Han pasado cerca de 4 años desde que EE. UU. decidió vetar a Huawei y sus productos, lo que la dejó completamente fuera de combate debido a la imposibilidad de usar los servicios de Google. Esto incluye, tanto las aplicaciones de Maps, Gmail, Lens y etcétera como el propio sistema operativo Android. Ahora, con la compañía en jaque mate, imaginamos las dos posibles situaciones para que Huawei vuelva a ser lo que era, pues sus móviles siguen presumiendo de una gran calidad.
Si bien ambos escenarios son complicados de ocurrir, pero quién sabe lo que podría acabar pasando de aquí a unos meses. El primero de ellos es hacer que sus servicios sean tan intuitivos y buenos como los de Google, lo cual esconde su dificultad en que los usuarios ya están muy acostumbrados a tales servicios; mientras que la segunda alternativa, la más difícil pasa por recuperar estas apps junto con Android en su totalidad.
Huawei lo tiene complicado
Desde que se produjo la restricción por parte del gobierno de los Estados Unidos, la popularidad de los smartphones de Huawei ha caído en picado por el simple hecho de no contar con aplicaciones básicas del estilo Gmail y Google Maps, pero, sobre todo, por no disfrutar de más actualizaciones del sistema Android.
Para entrar en contexto el último lanzamiento de gama alta de la compañía en España, el Huawei P60 Pro, llega con la versión Android 12, cuya llegada se dio en 2021, junto con el parche de seguridad de agosto del año 2022. Una situación que lo deja completamente vulnerable frente a brechas de seguridad recientes a nivel de software, lo cual también se extrapola a la App Gallery, la tienda de aplicaciones de Huawei, que puede redirigirte a enlaces no seguros. Para acabar con esta problemática, la marca que fue durante un tiempo la gigante tecnológica mundial tiene dos opciones:
Perfeccionar sus servicios como los de Google
El caso de la App Gallery es solo uno de los muchos inconvenientes, ya que esta busca aplicaciones a través del buscador cuando no hay respuesta en la tienda. Esto puede dar lugar al acceso a páginas maliciosas o apps peligrosas que funcionan a modo de virus. Petal Maps, la aplicación de navegación, sí que goza de una interfaz limpia, atractiva y funcional, pero es un caso ejemplar, pues el buscador no es el mejor de todos y el servicio de correo electrónico no es tan intuitivo para el usuario.
El primer paso debe ser centrarse en mejorar su ecosistema y quién sabe si, finalmente, acaba atrayendo a más usuarios; sin embargo, el problema se encuentra en que la comunidad de Android ya está acostumbrada al sistema operativo y dar el salto a Huawei supondría algo similar a lo que significa pasarse de Android a iPhone o viceversa, una situación que no se da todos los días.
Sí que es cierto que Huawei lo tiene muy pero que muy complicado, sobre todo por el rechazo que ya se ha generado hacia la marca. Conociendo el mercado, posiblemente le cueste varios años recuperar a su público, aunque en cualquier caso, incluyendo algunas apps de las más usadas por parte de los usuarios, deberá ser más que suficiente. Aunque negociar con Google, no será nada fácil.
Huawei recupera Android y las apps de Google
La vía más complicada para reinar de nuevo y que Huawei vuelva a ser lo que era consiste en negociar con Estados Unidos para lograr el levantamiento total o parcial del veto. Los móviles de Huawei no reciben actualizaciones de Android, no vienen con apps de Google ni tampoco presumen de conexión 5G, lo que provoca que sean dispositivos poco deseados entre los usuarios. Lograr recuperar todas estas características volvería a llevar a la empresa a donde siempre debió estar.
Si uno echa un vistazo a los smartphones Huawei, se percatará fácilmente de que son dispositivos similares a los que vende Xiaomi, por ejemplo, caracterizándose por su calidad-precio. Tienen de todo: rendimiento, buena pantalla, batería duradera, unas cámaras impecables e incluso buen precio, así que no les falta nada más allá de las cuestiones relacionadas con el software. Lo que le depara el futuro a la marca es una incógnita, por lo que solo queda esperar para ver qué ocurre, aunque estos son los dos escenarios más favorables.