Puede que esté llegando el temido momento en que te das cuenta de que la batería de tu móvil no funciona porque ha agotado sus ciclos de carga o porque hay algo que le ha afectado. De repente, te puedes encontrar con que no tiene nada de batería y no hay forma de que reviva.
Tanto si sucede porque ha pasado mucho tiempo desde que has comprado tu teléfono o porque estás teniendo unos hábitos de carga no recomendables, puede llegar el nada deseado día en que tengas que cambiar tu batería. Por suerte, puedes hacer que este día se retrase.
Dejar que se descargue de todo puede matar tu batería
Si dejas que la batería de tu teléfono se descargue hasta el 0 % todas las ocasiones, esto es mucho más malo de lo que puedes llegar a imaginar y puede dar lugar al trágico final del que ya hemos hablado. Si lo haces de vez en cuando no va a pasar nada, pero si lo haces con mucha frecuencia se va degradar la batería y finalmente se acabará rompiendo a medio o largo plazo. De hecho, no es recomendable que dejes que baje del 15%.
Por esto mismo, muchos móviles ya avisan cuando el teléfono llega a esta cifra para que vayas pensando en cargarlo. El porcentaje de carga de tu batería debería ser de al menos el 20 %, y con un máximo el 80 %, según recomendación de varios expertos. Esto se debe a que la mayoría de las baterías actuales, debido a los materiales con las que están fabricadas, tienen ciertos grados y márgenes de estrés cuando llegan a estas cifras, especialmente si dejas que tu teléfono se descargue siempre totalmente.
En estos casos, en que se agota totalmente, la batería se somete a un estrés mayor. En ocasiones, este estrés puede llevar a que esta se caliente más de lo que debería y que sobrecaliente el teléfono. En ciertas situaciones, lleva a problemas de baterías hinchadas. No suele explotar por esta razón, pero sí podría romperse o acelerar su deterioro con mayor rapidez hasta límites insospechables.
Por eso, lo más recomendable para evitar que la batería de tu teléfono se dañe antes y que tengas que cambiarla con mayor frecuencia, o que empiece a dar problemas, es que no dejes que se descargue totalmente. Intenta cargarlo a la corriente o con una batería externa cuando esté acercándose al 20 %. Así, evitarás que te dure mucho menos de lo que debería teniendo en cuenta los ciclos de carga mínimos que te ofrece.
Eso sí, no está de más que lo dejes descargar totalmente una vez cada varios meses o cuando esté presentando problemas para calibrar la batería. Puedes aprovechar cuando te has quedado sin batería porque no tenías opción de conectar el teléfono. En este caso, tendrás que dejar que repose unas horas y después lo cargarás al 100 %. Si sigues estos consejos y utilizas un cargador original o certificado, harás que la celda de tu teléfono te dure mucho más tiempo en las mejores condiciones y ahorrarás tener que reemplazarla antes de lo que debería porque se te ha roto.