La carga inalámbrica no funciona en mi móvil: ¿Qué le pasa y cómo lo puedo arreglar?
La carga inalámbrica en móviles es una gozada para quienes la han probado. Aunque claro, está ahora mismo destinada a los móviles de alta gama o gama media con un precio menos accesible. Sin embargo, pese a sus ventajas y comodidad, no está exenta de problemas. Por eso, vamos a comentarte los principales problemas que se suelen dar con este tipo de carga en móviles.
Si ahora mismo la carga inalámbrica de tu móvil no funciona, falla, es intermitente o notas que no va como debería, estas son las razones por las que puede estar pasando y cómo lo puedes arreglar. A veces, la solución es más sencilla de lo que crees. Eso sí, no va a ser tan rápida como la del cable y puede afectarle el frío o el calor. Evidentemente, damos por hecho que has comprobado que tu teléfono es compatible con la carga inalámbrica.
La funda no es compatible o es muy gorda
En muchas ocasiones, la razón por la que no carga el móvil de esta forma es que tienes la funda puesta. Aunque muchas funcionan con este tipo de carga y lo hacen bastante bien, puede ser que justo esa no sea compatible con el tipo de carga o simplemente que sea tan gorda que le impide cargar. En este caso, solo te va a quedar probar a quitarla e intentarlo de nuevo. Si funciona, ese era el problema. Como no es recomendable dejar el móvil sin protección, o la quitas para cargar siempre que sea necesario o más te vale comprar una nueva.
También puede ser que algún otro accesorio que tengas en el teléfono esté interfiriendo, como los objetos metálicos, soportes, incluso si tienes alguna tarjeta de crédito.
Has colocado mal el cargador o este ya no funciona
No es en sí un problema de la carga inalámbrica, pero si colocas mal el cargador vas a tener problemas para cargar el móvil. Por eso, si ves que tu teléfono no está cargando nada en absoluto comprueba que no sea eso lo que pasa. Vuelve a colocarlo de nuevo prestando atención a que lo haces bien, siguiendo las instrucciones de este tipo de carga y comprobando que ajusta bien. Si es la primera vez que lo haces, mira antes cómo funciona en tu móvil e incluso consulta el libro de instrucciones.
También es posible que tengas un cargador defectuoso o que se haya estropeado. Es una situación que se da en muchas ocasiones, sobre todo cuando llevas mucho tiempo con él o lo has reutilizado durante mucho tiempo. También puede ser que el cargador no sea compatible, o al no ser el original o uno bueno no funcione como debería. Esto puede afectar a la velocidad de carga del teléfono, pero también podría llegar a dañar la batería o el propio móvil. Por eso, es importante que compres un buen cargador inalámbrico que sea compatible con la carga de tu teléfono.
La ha roto una actualización
No es la primera vez, ni será la última, que una actualización destroza la carga inalámbrica de los móviles haciendo que deje de funcionar o dé problemas. En este caso, lo único que queda es esperar a un parche que lo solucione. También puedes volver a la versión anterior del sistema operativo hasta que lo arreglen. Si has actualizado hace poco tu teléfono, podría ser esta la causa. Consulta en Internet a ver si a más personas les ha pasado lo mismo recientemente.
En ocasiones, las actualizaciones más importantes pueden acabar dando este problema hasta el punto de que no cargue o dé otro tipo de problemas de carga, aunque se suele solucionar rápidamente con un nuevo parche.
No está enchufado a la corriente
Puede que el hecho de que te digan que es un cargador inalámbrico te haga pensar que no vas a tener que usar ningún cable y lo vas a poder usar en cualquier lugar. No obstante, no es así. Asegúrate de que está conectado correctamente a la corriente, ya que aunque sea inalámbrico hay que enchufarlo igual.
Comprueba asimismo que el cable de conexión está en buen estado, funciona bien, no se ha roto y no se ha descolocado. No son pocas las personas que dicen que es una solución tonta y se dan cuenta de que realmente ese era el problema.
Hace mucho calor o frío en el ambiente
Como hemos adelantado antes, el calor o frío pueden afectar considerablemente a la carga del teléfono, y no iba a ser menos en la inalámbrica. Si tu dispositivo se ha cargado mucho o la temperatura del aire ha aumentado de repente, la velocidad de carga puede ser mucho más lente o incluso detenerse sin que pueda continuar. Esto lo hace para proteger tu dispositivo del sobrecalentamiento para evitar daños irremediables. Lo mismo puede suceder con el frío.
Lo único que puedes hacer en este caso, y más sabiendo que se trata de la seguridad de tu smartphone, es esperar a que este adquiera una temperatura normal o que el ambiente esté menos cálido para cargarlo. Si está muy caliente, puedes probar a usar un ventilador para móviles.