Segunda parte de nuestra prueba de Goodspeed, la propuesta que combina un módem multiSIM junto con un servicio que nos provee de conexión a Internet 3.5G en el extranjero sin pensar en el roaming, en la que contamos nuestras experiencias con el dispositivo en un entorno real.
Dejábamos el artículo anterior, donde os contábamos nuestras primeras impresiones del producto mientras hacíamos la maleta a Reino Unido, justo antes de partir y empezar a utilizar Goodspeed de verdad. Con el módem cargado a 100% nos embarcamos rumbo a nuestro destino. Al poner pie en tierra encendemos, previamente la propia empresa UROS ha preconfigurado al destino para el que hemos adquirido la tarjeta SIM, recordamos se pueden instalar hasta 10 con un coste de 9,9€ al mes por disponer del servicio y 5,6€ al día de conexión, con 1GB a nuestra disposición para navegar, por lo que sólo tenemos que encenderlo y listo.
Notable rendimiento con una pobre cobertura.
Nuestra primera parada fue en Londres pero luego nos dirigimos a las afueras, Southampton. Esta puntualización es importante ya que si bien en Londres había una cobertura impecable, en esta localidad, no hemos logrado pasar de la mitad. Sin embargo, fue suficiente esta precaria cobertura para poder trabajar durante una semana, conectando al mismo tiempo tablet, un par de smartphones, iPod Touch, el portátil y hasta un iMac. Hasta 5 dispositivos llegaron a funcionar a la vez y en los test de velocidad realizados, obtuvimos más de 3Mbps sólo con el 20% de la cobertura y hasta 7 Mbps con el 50%.
En cuanto a la cantidad de datos diaria, 1 GB es bastante aceptable. Si sólo utilizamos un teléfono, es evidente que sobra ya que normalmente eso es lo que solemos tener en nuestras tarifas de datos para un mes.
Otra cosa es ya desde un ordenador. El correo electrónico y la necesidad de visitar, descargar archivos y mantener cosas sincronizadas como Dropbox ha hecho que algún día rozáramos esa cifra e incluso la superáramos. Aún así, Goodspeed no nos deja sin conexión, pero baja a unos desesperantes 120 kbps. Sin embargo, entendemos que nuestro trabajo necesita de un gran consumo de datos por lo que un usuario medio no debería tener problemas.
Algo más que navegar y trabajar
Pero quisimos poner a prueba al límite Goodspeed, y para ello quisimos ver si aguantaba el visionado de vídeos en streaming. Cómo YouTube nos parecía poco, ni cortos ni perezosos, descargamos una app para ver canales de televisión online nos dimos una sesión de Fórmula 1 viendo a Fernando Alonso volar por la pista de China. Repetimos, con sólo un 20% de cobertura pudimos seguir el evento sin problemas. Eso sí, masacramos ese día el límite de datos en apenas 2 horas. Si bien la conexión que nos quedó era inviable para una navegación cómoda desde portátil, tareas como consultar Facebook, Twitter, correo electrónico y cierta navegación desde el smartphone o incluso desde el tablet (este con más problemas) no dio ningún tipo de problemas y funcionaba relativamente bien.
Otra prueba a la que sometimos GoodSpeed, dado que el sitio que nos acogía lo permitía, es la de utilizarlo como router para streaming WiFi de contenidos entre dispositivos. Explicamos el caso, conectamos un MacBook y un AppleTV a GoodSpeed y no hubo ningún problema para compartir la biblioteca del portátil a través de AirPlay para una sesión de películas, con la ventaja de que este tráfico de datos no cuenta para nada ya que todo se hizo en la red local.
Facilidad de uso y eficacia
Pese a las vicisitudes de velocidad de conexión, que repetimos, somos conscientes que dependía de la localización, Goodspeed ha mostrado un rendimiento notable. La conexión WiFi permitía moverse con los aparatos, incluso conectarse desde dos habitaciones más allá de la nuestra, sin mayores problemas. La conexión a su red WiFi es sumamente fácil, sólo hay que buscar el punto de acceso y con dos toques en la única tecla del dispositivo podemos ver la contraseña que tiene el dispositivo. Para cualquier gestión con el dispositivo hay que pasar por www.uros.com, único punto que no pudimos comprobar ya que no éramos los propietarios de la línea y no teníamos los datos para loguearnos.
Autonomía algo corta, no llega al día de trabajo.
En cuanto a la autonomía, pese a la ausencia de una pantalla como la de un móvil o incluso altavoz, mantener la conexión WiFi y el 3G funcionando pasan factura a la batería de 2550 mAh. Una carga completa, con tres dispositivos conectados, dura alrededor de las 5 horas, no llega a una jornada de trabajo. Esto se puede alargar algo más si sólo conectamos un dispositivo. Sin embargo, cualquier usuario interesado en este tipo de dispositivo, al menos, tendrá dos gadgets entre portátil, tablet y smartphone siempre conectados.
Conclusiones
En conclusión, Goodspeed nos ha solucionado, y de forma muy notable, la posibilidad de estar permanentemente conectados a Internet y trabajar en el extranjero. Mientras íbamos por la calle era como llevar un segundo smartphone en el bolsillo de la chaqueta y en la habitación, simplemente conectándolo a la red, teníamos una red WiFi excelente para un trabajo online tan exigente como es un blog, incluso con coberturas muy precarias.
Como ya dijimos, la guinda del pastel sería que, dado que es un producto pensado para el extranjero, contara el mismo con un multi-enchufe para olvidarse del conversor, ya que no se suele viajar con uno para cada dispositivo y hubo momentos en los hubo que decidir si tener Internet con Goodspeed o cargar el móvil. Bien es cierto que cualquier USB puede ser un puerto de carga, pero no hubiera estado mal.
Otro aspecto que nos ha parecido mejorable es la autonomía. Si bien no esta nada mal, puede durar algo más de media jornada laboral, apurando y con un solo dispositivo llegaría incluso superaría las 6 horas, es necesario que en siguientes ediciones este elemento mejore hasta dar las reglamentarias 8 o incluso un poco más.
Nuestra valoración final es que se trata de un producto muy interesante para quien está todo el día en aeropuertos internacionales y pasa varios días a la semana fuera de casa. El coste no tiene nada que ver con lo que se llevaría pagar las conexiones en roaming, pero debemos reconocer que no está al alcance de cualquier bolsillo. De hecho, y con esto finalizamos, creemos que debería ser un producto indispensable pero para que las empresas equiparan con el a los ejecutivos que tienen viajando constantemente por Europa.