El avance tecnológico de los últimos años en lo que al sector de la telefonía se refiere ha significado toda una revolución para el usuario. Hoy en día los smartphones no ofrecen única y exclusivamente un hardware de garantías para ofrecer un rendimiento óptimo, sino que cuentan con características que buscan asegurar la mayor resistencia posible frente a toda clase de situaciones.
Es por ello por lo que de manera continuada los móviles actuales son sometidos a un sinfín de pruebas para certificar el aguante que muestran. Uno de los grados de protección más conocidos y extendidos entre la comunidad recibe la denominación IP68, el cual está presente en gran parte de los lanzamientos que vemos diariamente. Sin embargo, no todos conocen el significado de esta clase de dureza y por esta razón vamos a explicaros en qué consiste exactamente.
Qué significa IP68
En primer lugar, antes de entrar en profundidad en esta cuestión es necesario aclarar a qué hacen referencias las siglas de esta denominación. Representan la “Ingress Protection”, es decir, el grado de resistencia que ofrecen en el dispositivo. Esta protección se encuentra regulada por una norma internacional conocida como CEI 60529 Degrees of Protection y en pocas palabras sirve para evaluar la dureza que presenta el cuerpo del teléfono ante ciertas circunstancias.
Dicha certificación es obligatoria en casi todo el globo terráqueo y las empresas deben indicar de manera visible esta propiedad, la cual con el paso del tiempo ha acabado siendo de extrema relevancia para los usuarios a la hora de afrontar su compra. No obstante, hay más aspectos que debes conocer sobre esta particularidad y es que cada uno de los dígitos que aparece junto a las siglas IP muestra el grado de protección ante dos condiciones que veremos a continuación.
Qué dicen los dígitos
Este certificado de resistencia IP viene acompañado de dos números a su lado que dicen mucho de las pruebas realizadas sobre el smartphone. Principalmente, porque el primero de ellos indica el nivel de protección ante materiales sólidos, mientras que el segundo hace lo propio con los líquidos.
Ojo, porque dureza ante materiales sólidos no quiere decir que muestre la firmeza ante golpes frente a objetos. Este primer dígito tiene que ver con la entrada de sustancias como las partículas de polvo y cuanto mayor sea la cantidad, mayor será la protección. En concreto, la cifra 6, la más alta hasta el momento en cuanto a esta clase de materiales, garantiza que el móvil está completamente a salvo frente a la intrusión de partículas como el polvo, arena…
Por otro lado, tenemos la protección ante sustancias líquidas y el funcionamiento es exactamente idéntico al anterior, es decir, un número más alto significa más resistencia. Un 8 demuestra que el terminal resiste la entrada de líquidos en su interior y que es capaz de sumergirse durante una cantidad específica de tiempo establecida por la marca encargada de la fabricación. En el caso de que tu smartphone no llegue hasta ella, te interesará saber que existen accesorios para usar el móvil en lugares como la ducha y disfrutar en todo momento de tus series favoritas.
En comparación con el primer dígito, este segundo sí cuenta con una denominación superior conocida como 9K. Una cifra que señala que el móvil aguanta chorros de agua de alta presión a una distancia corta. Sin embargo, las principales compañías de la industria no disponen en su catálogo de una alternativa bajo este criterio, pues la mayoría de ellas acostumbran a integrar una denominación IP68 aunque esto no quiere decir ni por asomo que no existan opciones que lo cumplan.