Hace años que me he acostumbrado a los móviles Android. Si bien una vez que les pillas el truco a los iPhone verás que pueden ser mucho más cómodos y sencillos de lo que parece a simple vista, pero hay una razón por la que no quiero tener uno y ni siquiera me lo planteo. Tiene que ver con su diseño, lo que les hace parecer mucho más antiguos de lo que son.
No es por su precio, porque le faltan algunas funciones que tiene Android o porque no llegan a convencerme. No compraría un iPhone por una sencilla razón que te voy a comentar a continuación, y quizá te sorprenda mi decisión, pero la verdad es que me influye más de lo que podría parecer a simple vista. Tiene que ver con la pantalla del iPhone, el elemento donde pasamos horas y horas interactuando.
La carencia que deja en evidencia a los iPhone
La razón por la que ni me planteo tener un móvil de la marca Apple es que no existe un modelo con doble pantalla, un extra que me resulta muy práctica en mi día a día y que querría tener en mi nuevo móvil.
Se me ocurren muchas posibilidades para aprovechar esta pantalla adicional, e incluso si no la has usado en tu vida lo verás súper práctico cuando empieces a usarla. Los móviles de otras marcas con Android sí que te lo permiten. Es por eso que entre mis quinielas está Xiaomi, Samsung o los teléfonos OPPO, pero el fabricante más reconocido en todo el mundo no tiene ninguna opción con las mismas posibilidades.
Un móvil con una doble pantalla es ideal para mí porque puedo estar viendo algo en una pantalla mientras estoy haciendo algo en la otra, o recibir las notificaciones más importantes sin que me afecte a la pantalla principal. También da la posibilidad de ver un vídeo mientras escribo un email, o jugar mientras contesto a alguien un mensaje de Telegram, etc. Un extra de posibilidades que me hace evitar comprar una tablet, dado que lo tengo todo en uno.
Hace poco han salido a la luz imágenes sobre un nuevo iPhone plegable, pero fabricado por un usuario que ha tenido que dedicar mucho tiempo a preparar su dispositivo para convertirlo en un teléfono plegable sin que la experiencia sea la misma que la de los móviles que ofrecen esta funcionalidad hoy en día.
También se han visto imágenes de un iPhone con doble pantalla a modo de tablet. El hecho de contar con dos pantallas a mi disposición, me volvería a hacerme replantearme comprar un iPhone, pero me temo que para eso aún quedan varios años de espera.
La cuestión es que no existe este iPhone, de manera que me pierdo las muchas posibilidades que me ofrece esta funcionalidad. Algunas ya las he comentado, pero son muchas más y seguro que tú tienes en mente otras ventajas de tener dos paneles al alcance de los dedos.
¿Y si algún día lo ofrecen?
Si en algún momento Apple se decide a incluir la doble pantalla en sus dispositivos, puede que me plantee su adquisición. Ahora mismo hay modelos que me proporciona muy buenas prestaciones a un mejor precio que hacen que no necesite comprar un iPhone para tener todo lo que necesito en el móvil. ¡Quién sabe en el futuro!
Espero que Apple se anime muy pronto a lanzar la que sin duda sería la revolución de los iPhone. Porque siendo sinceros, su ecosistema si me atrae mucho, aunque en hardware se han quedado anticuados.