No cabe duda que el iPhone se ha ganado a pulso ser el móvil más deseado del mercado, algo que se traduce todos los años en su liderazgo en las listas de los móviles más vendidos. Pero eso no quiere decir que sean móviles perfectos o punteros en todo, porque tienen aspectos claramente mejorables como la carga de su batería.
Y es que los teléfonos de Apple desde luego no pueden presumir de contar con una batería que se cargue rápidamente, sobre todo si lo comparamos con los móviles Android, incluso los más baratos, que multiplican la potencia de esta carga para poder disfrutar de velocidades que desde luego hacen sonrojar a las prestaciones de los teléfonos de Apple.
¿De verdad son tan lentos?
Sí, rotundamente sí, es verdad que los usuarios de estos teléfonos están acostumbrados a unas velocidades de carga que les parecen adecuadas, siempre y cuando no las comparen con las de móviles Android mucho más baratos, como por ejemplo el Redmi Note 11 Pro+. Si comparamos la potencia de carga del tope de gama de Apple, el iPhone 13 Pro Max, con este teléfono chino, no podemos sino sonrojarnos por las enormes diferencias que existen.
El de Xiaomi tiene una potencia de 120W, frente a los 27W que fuentes extraoficiales aseguran que tiene. El primero se puede cargar por completo en solo 15 minutos, mientras que el iPhone 13 Pro Max puede hacer lo mismo en más de una hora. Es evidente que las diferencias son muy grandes, y más si tenemos en cuenta que el de Apple cuesta alrededor de los 1.300 euros, y el de Xiaomi solo 300 euros. Desde luego las comparaciones son odiosas, pero esta demuestra que los iPhone son extremadamente lentos cargando su batería.
Malos recuerdos para Apple
Pues bien, no todos los fabricantes de móviles Android cuentan con una carga tan rápida, pero es evidente que la tecnología está ahí, y de momento se ha demostrado segura. Y es que esta puede ser una de las principales razones por las que Apple va aumentando de forma tan gradual la potencia de la carga de batería de sus teléfonos. El problema en este caso no es tanto que los de Cupertino no tengan acceso a esta tecnología, ya que por recursos es evidente que podría incorporarla cuando quisiera. Pero seguramente las principales trabas a no crecer tan rápido en velocidad de carga, tienen que ver con los problemas que ha sufrido Apple con las baterías y el rendimiento de sus teléfonos.
La salud de las baterías está directamente relacionada con el rendimiento del teléfono, y Apple ha sido demandada en el pasado por reducir este en sus teléfonos de forma gradual, en base a la degradación de la batería. Y es que a más potencia de carga, teóricamente la batería se degrada antes, lo que visto la experiencia de Apple, podría afectar al rendimiento de sus móviles. Por tanto es normal que Apple vaya con pies de plomo en esta funcionalidad de sus teléfonos. Y es que aunque fabricantes como Xiaomi aseguran que loas baterías no sufren tanto con estas cargas rápidas, siempre existe el riesgo de que un aumento súbito de la potencia pueda tener como consecuencia un mal funcionamiento de esta, con riesgo de explosión, como hemos visto en algunos casos del pasado, o bien una degradación temprana.
Por tanto Apple parece que no tiene como prioridad aumentar la velocidad de carga, sino mantener el gran rendimiento del que presumen estos teléfonos. Por lo tanto no es de esperar que este aspecto cambie mucho en el futuro, y lo más curioso de todo, no parece algo que importe demasiado a sus clientes, que prefieren que otros aspectos del teléfono sean más vanguardistas que la potencia de carga del terminal.