Los teléfonos móviles cada vez cuentan con funciones más extraordinarias e impresionantes, aunque estas pueden exprimirse aún más. Una forma para ello es rootear nuestro dispositivo, una opción que para nada es ninguna novedad.
Este proceso se basa en obtener permisos para acceder a cualquier propiedad del terminal. De esta forma se puede alterar las configuraciones establecidas por el fabricante y conseguir un rendimiento mayor sin necesidad de realizar otros ajustes. Las posibilidades son prácticamente infinitas: puedes cambiar el Sistema Operativo, sacar más partido a los componentes e incluso deshacerte de softwares instalados de fábrica. Pero ¿cuál es el riesgo que conlleva todo esto?
Adiós a la garantía
Rootear tu smartphone puede traerte varios problemas, pero el primero que surgirá nada más iniciar el procedimiento y que será irremediable es la pérdida de la garantía. Esto quiere decir que, si en una ocasión posterior tu móvil sufre algún tipo de daño el fabricante se desentenderá por completo y no podrás hacer absolutamente nada.
Piensa antes de actuar
Antes de ponerte manos a la obra debes pararte a pensar debidamente cuáles son los ajustes que pretendes modificar. Lo primero que debes tener en cuenta es que al momento de rootear tu smartphone desaparecerán diversas funciones relacionadas con la seguridad.
Pero no solo eso, sino que un error podría causar daños en el sistema que bloquearían el terminal y lo dejarían completamente inoperativo. Por este motivo nunca tienes que eliminar archivos integrados en el sistema. Estate atento, además, a qué ROM pretendes descargar, ya que si es incompatible provocaría problemas de funcionamiento.
Actualizaciones manuales
El hecho de rootear el móvil conlleva que las distintas actualizaciones de cualquier tipo no llegarán de manera automática, ya sean de seguridad o para arreglar ciertos problemas, ninguna lo hará.
Esto significa que tendrás que ser tú mismo el que se encargue de ello, lo que puede resultar una tarea algo complicada si no controlas mucho la cuestión.
Bloqueo de apps
Como es de esperar los desarrolladores de aplicaciones y la propia Google no quieren que ni por asomo pienses en rootear el móvil. Por este motivo algunas aplicaciones te negarán el acceso si llevas a cabo el proceso.
El principal motivo del bloqueo de apps es para mejorar la seguridad del sistema. Aunque existen ciertos métodos para saltarte esas prohibiciones engañando a la propia Google.
¿Merece la pena?
Actualmente la mayoría de los dispositivos gozan de multitud de herramientas para personalizar nuestro smartphone e incluso los que cuentan con un precio relativamente bajo ofrecen unas propiedades más que aceptables.
Por lo que quizá no merezca la pena asumir estos riesgos. Con la llegada de Android 12 el abanico de posibilidades se extiende aún más. Puede que no sea el momento de rootear tu teléfono.