Posiblemente seas uno de esos muchos geeks impacientes que se mueven por la red y que desea tener todas las actualizaciones antes que nadie. Dentro de esta necesidad de probar todas las novedades de nuestras apps cuanto antes se encuentran las que aún se encuentran en fase beta, es decir, que aún no están totalmente preparadas para su lanzamiento definitivo; algo que se podría traducir como ‘fase de prueba’ por lo que esto nos permitirá tener con nosotros una enorme cantidad de nuevas mejoras antes que nadie, pero también puede traer algún que otro problema.
Cuando se suele hablar de actualizaciones en fase beta, en la mayoría de los casos, suelen referirse al sistema operativo de nuestro teléfono, es decir, a esas nuevas actualizaciones que tomamos como nativas en el smartphone y que suelen traer novedades tanto en la interfaz como en la experiencia como usuario. En el caso de las apps puede darse el caso de que haya actualizaciones beta, pero son las mínimas, por lo que en principio, nos referiremos concretamente a las actualizaciones de sistema operativo.
¿Por qué puede ser un error actualizar?
Ya os hemos puesto en preaviso de que el hecho de actualizar a estas fases betas, puede traernos diferentes problemas aparejados, por lo que te sugerimos que prestes atención a los siguientes motivos que te explicamos. Todo ello, para que puedas elegir por ti mismo sobre el hecho de si tenemos o no que actualizar nuestro móvil a esta versión beta aceptando esta serie de posibles errores que podemos tener en nuestro teléfono tras realizar la actualización.
Bugs, errores… y mucho más
Dentro de esta actualización, al encontrarse en una fase que en realidad es de prueba, se realiza por supuesto, para testear los diferentes errores que pueden existir en dicha actualización y que estos errores y bugs se manifiesten con los usuarios para que, en la fase final, queden completamente solucionados. En realidad, debería tratarse de fallos menores que no deberían poner en ningún tipo de peligro a nuestro teléfono móvil, aunque a ciencia cierta, nunca sabemos lo que podemos encontrarnos en una fase beta.
Pero seamos sinceros, a ninguno nos gusta usar un teléfono móvil que contenga fallos que puedan realizar de nuestra experiencia algo tedioso o molesto por muy menores que sean estos fallos, por lo que si crees que puede ser un impedimento, no actualices. Eso sí, el hecho de que notifiques estos errores al fabricante será agradecido por los desarrolladores que podrán corregirlo a tiempo.
¿Amas tu batería? No actualices
Estas actualizaciones no suelen estar optimizada al 100% para con nuestro teléfono móvil, por lo que esto puede provocar que nuestras acciones con el smartphone consuman más batería de la que debería. Además, dentro de la fase beta, no existe ningún tipo de solución para que la batería funcione de manera normal. No hay más que esperar a que el fabricante saque una nueva versión beta del sistema operativo.
De todas maneras, aunque veamos que la batería se consume más rápido de lo normal, en cierta manera no debemos preocuparnos. A menos que sea muy molesto, por lo que la única opción será volver atrás y reinstalar esa anterior actualización con las que no teníamos este problema.
Fallos de rendimiento
De la mano de la batería y casi que por las mismas razones va también aparejado el rendimiento y los posibles fallos que podemos experimentar en este aspecto debido a esa falta de optimización que suelen tener estas actualizaciones. Esto puede llegar a provocar una ralentización en los procesos de nuestro teléfono móvil o incluso que puedan crashear algunas acciones que realicemos en nuestro teléfono móvil.
Esto puede verse acentuado en el caso de que tengamos un móvil que ya vaya siendo antiguo y que por tanto, puede sufrir mucho más que un móvil que actualmente rinda correctamente. Como resultado, en el caso de que tu móvil sea uno de estos que va tocando jubilar, lo mejor será que no arriesgues.
Lo que buscamos aún no está disponible
Antes de actualizar debemos informarnos correctamente para no caer en un error. Y es que muchas veces, cuando actualizamos a estas versiones beta, puede ser en busca de nuevas funciones que suelen incorporar estas actualizaciones en nuestro teléfono móvil. Puede darse el caso de que llegue el momento de actualizar y una vez haya terminado la misma, nos demos cuenta de que esa función que buscábamos no está entre las disponibles y el proceso haya sido para nada.
Por tanto, lo mejor que podremos hacer es asegurarnos previamente en las especificaciones o a través de otras personas que ya hayan actualizado a través de las redes sociales sobre si esta nueva versión beta, trae o no la funcionalidad que buscamos.
Fallos con las apps instaladas
Por último, otro de los fallos que pueden producir estas actualizaciones en fase beta pueden venir de la mano de las actualizaciones que ya tenemos instaladas en nuestro teléfono móvil. Puede darse el caso de que estas apps entre en conflicto con alguno de los procesos que inicie esta nueva actualización y la app pueda tener fallos en su rendimiento o incluso pueda llegar a cerrarse de manera inesperada.
Esto puede llevarnos a fallos mucho mayores de lo esperado, por lo que en este momento, lo mejor será que si ves algún fallo parecido a este que os comentamos con algunas de las apps que ya tenéis en vuestro teléfono, volváis a una versión anterior del sistema en la que no se producía este fallo.