Durante la historia de la telefonía móvil, ha quedado demostrado que la competencia ha impulsado gran parte de los avances. Los smartphones de hoy son lo que son, gracias a esta lucha entre las marcas. No obstante, a veces parece perderse el norte de lo importante, y el foco se pone más en la cantidad que en la calidad, lo que al final puede llegar a encarecer un producto de forma absurda.
Hay muchos ejemplos de esto. Recordemos cuando los fabricantes ponían en nuestras manos smartphones con NFC cuando la infraestructura de los pagos móviles era inexistente, o cuando llegaron los primeros móviles 5G sin apenas oferta comercial disponible. Con el número de sensores ocurre algo similar, ya que plantea el debate de si realmente son necesarias tantas cámaras y si un móvil es mejor que otro por contar con más sensores o más megapixels.
Muchas cámaras y muchos megapixels
En estos momentos, el mercado está plagado de terminales de gama media y alta con cuatro o cinco sensores traseros. No obstante, la experiencia y resultados nos dice que esto no es lo principal que tenemos que tener en cuenta. Recordemos por ejemplo, que el Nokia 9 PureView, fue el primer móvil en ofrecer cinco cámaras traseras de 12 megapixels cada una, pero el terminal estaba lejos de ofrecer resultados a la altura de otros dispositivos de su competencia con menos sensores.
Google ha sido una de las compañías que más llegó a demostrar este aspecto, antes de subirse al carro de los multi-sensores. Recordemos que el Pixel 3 contaba con una de las mejores cámaras del mercado, siendo uno de los que mejores resultados fotográficos ofreció en 2018, contando con una sola lente de 12 megapixels, frente a rivales con más sensores y más megapixels. Sin ir más lejos, el primer móvil de Samsung con cuatro cámaras fue el Galaxy A9, lanzado en 2018. Este terminal pasó sin pena ni gloria por el mercado y será recordado solo por este dato y no por los resultados de su cámara.
Lo que realmente importa
Sin embargo, aunque queramos, es muy difícil encontrar móviles en 2021 con una sola lente, o incluso dos, algo que ya queda reservado a la gama de entrada. La triple y cuádruple cámara ya es una estándar en la gama media y gama alta. Por este motivo y dado que la cantidad no es una referencia fiable, tendremos que tener en cuenta otros factores quizá más importantes.
- El tamaño del sensor: el tamaño del sensor es uno de estos factores importantes. Cuanto más grande sea más luz captará y mejor se defenderá en los ambientes más adversos de iluminación.
- Tipo de lente: Sony, Samsung, Zeiss, Omnivision… saber qué lente lleva el terminal puede ser garantía de unos resultados, al menos aceptables. No obstante, incluso los principales fabricantes de lentes cuentan con sus propias gamas, por lo que es una referencia que no ofrece resultados absolutos
- La apertura: este valor indica la canida de luz que deja pasar la cámara al sensor. Los valores más bajos son mejores, es decir, cuentan con más apertura. Esto se puede traducir en una mejor velocidad de disparo y resultados más nítidos.
- La optimización de software: este aspecto es crucial. Puede que dos fabricantes usen el mismo sensor, pero los resultados sean antagónicos. Aquí es donde entra la optimización de software con la IA como protagonista en muchas ocasiones. Cada software interpreta de manera diferente la información que le facilita el sensor, para reflejarla en una imagen que podrá ser más o menos fiel a la realidad, sin que ni una cosa ni otra tenga por qué ser necesariamente malo, y donde en muchas ocasiones entra en juego el gusto personal.
Jugar con las lentes
No obstante y aunque queda claro que no sea sinónimo de mejores fotos, más calidad o resultados más sorprendentes, lo cierto es que contar con varios sensores puede dar mucho juego. En ocasiones, los fabricantes integran lentes que muchos consideran “de relleno” como el dueto clásico macro + profundidad de 2 megapixels que permite, cumplir el trámite de los cuatro sensores traseros. Sin embargo, el juego con sensores teleobjetivo o ultra gran angular, puede dar mucho juego para los pinitos fotográficos de usuarios que quieren aventurarse en un mundo por descubrir.