Con el paso de los años hemos visto una clara evolución en la clásica tarjeta de los móviles, tanto Android como iPhone, la cual no solo nos permitía hacer llamadas, sino también disfrutar de la red de datos que tenemos contratada con la tarifa telefónica. Sin embargo, las nuevas tecnologías han ido disminuyendo su tamaño, y ahora la nueva realidad será la desconocida iSIM para smartphones.
En este tiempo, hemos pasado por diferentes etapas, SIM, mini SIM, el formato micro y nano, hasta la tarjeta virtual. Y, la última en llegar, ha sido la iSIM. Pero, ¿qué es exactamente este nuevo formato? Para que puedas entenderlo rápidamente, y en apenas unos minutos, te diremos cómo funciona, sus principales ventajas, además de las mayores diferencias que nos encontramos con otros formatos de tarjeta.
En qué consiste una iSIM
Los tiempos cambian, y ahora más rápido que nunca. Por esto mismo, los fabricantes de smartphones, así como las empresas relacionadas a este sector, no dejan de sorprendernos con diferentes cambios, y cada poco tiempo. La última novedad, que se convertirá en la nueva realidad para los móviles, es la tarjeta iSIM. Este accesorio es programable y es todavía más pequeño, y lo más importante, viene integrado en el procesador de un smartphone.
Básicamente, este nuevo formato también es conocido como ‘integrated SIM’, es decir, el chip estará insertado en el propio procesador de los smartphones en lugar de ocupar un espacio en la placa base. Por lo que diremos adiós directamente a las clásicas bandejas donde introducíamos estos accesorios. Además, no hay que temer por nada, ya que obviamente es totalmente compatible con 2G, 3G, 4G y 5G.
En este caso, esta se incorpora en el propio SoC de los teléfonos, ya que se ha conseguido que el circuito venga integrado dentro del dispositivo, donde se colocan los diferentes elementos electrónicos que hacen posible que llegue a funcionar correctamente todo móvil. Básicamente, se consigue eliminar la necesidad de dejar un espacio que estaba asignado a la clásica SIM de los teléfonos.
Aunque está claro que ocupará espacio dentro del propio cuerpo de los móviles, el tamaño reducido de esta tecnología ha hecho que los fabricantes puedan llegar a introducirlas en los terminales, cuando antes era imposible. Básicamente, porque ocupaban más espacio. Y con la zona sobrante, se podrá conseguir que sea aprovechado por otros componentes o, incluso, confeccionar un diseño de smartphones con un mayor compacto, todavía más de lo que estamos viendo hoy en día.
Todas sus ventajas
Ahora es el momento de pasar a ver cada uno de los beneficios que trae consigo la iSIM de los móviles. Además, no son pocos, por lo que te dejamos un pequeño listado para que puedas sacar en claro tus propias conclusiones. De todas maneras, está claro que el fin de la tarjeta SIM está más cerca que nunca, o al menos, tal y como la conocíamos:
- Se conseguirá simplificar, además de mejorar, el diseño y el rendimiento de los smartphones. Básicamente, porque se podrá liberar el espacio que antes ocupaba dentro de un teléfono. Y es que tendrá un tamaño que será ‘menos de 1 milímetro cuadrado’.
- Los costes de fabricación se reducirán. Esto es en parte gracias a que los operadores podrán utilizarse de la infraestructura eSIM que ya existe para permitir el aprovisionamiento remoto de SIM a los usuarios.
- Más seguridad para los usuarios. Esto se da gracias a que será mucho más difícil el hecho de que alguien pueda clonar la tarjeta SIM de un teléfono. Y no solo esto, sino que también se consigue que no se dañe o la podamos llegar a perder en un futuro.
- Este nuevo formato consigue consolidar la funcionalidad SIM en el conjunto de chips principal del dispositivo junto con otras capacidades como la GPU, la CPU o el módem.
- Se llevaría la experiencia móvil a ordenadores, tablets, wearables, y otros dispositivos, que hagan uso de una tarjeta. Es decir, se abre la puerta a capacidades de conexión de servicios de móviles a una enorme cantidad de dispositivos, los cuales no podían tener la capacidad de integrar tarjetas SIM.
¿Qué diferencias hay?
Ahora es el momento de ver las diferencias que nos encontramos entre estos formatos, para sacar en claro cuál será mejor opción el día de mañana, sobre todo, cuando nos vayamos a comprar un nuevo teléfono.
SIM vs. iSIM
Empezamos con la comparativa entre la clásica SIM y la nueva iSIM. Principalmente, su gran diferencia la encontramos en que una es física y la otra en parte no, ya que no necesitaremos introducir ningún tipo de tarjeta en el terminal. Por lo que diremos adiós a la bandeja que solemos sacar del móvil para meter este accesorio.
Otro de los puntos fuertes de la iSIM, como ya hemos visto, es que las marcas de smartphones podrán aprovechar ese espacio sobrante para introducir cambios en el diseño de sus teléfonos, e incluso, para incluir nuevos o mejores componentes internos. Pues ahora la tarjeta vendrá en el procesador del dispositivo.
Además, también nos encontraremos con un importante cambio en la seguridad. Ahora, no son pocos los usuarios que sufren en su piel el clonado de tarjetas SIM. Pues bien, con la tecnología iSIM para el móvil, será más difícil, y casi imposible. Así mismo, los operadores ya no nos enviarán a casa ni nos darán en la tienda una tarjeta física.
eSIM vs. iSIM
La eSIM, o tarjeta virtual, apareció hace unos años. Entre un formato y otro no hay mucha diferencia, más que nada por la iSIM es su sucesor. En ambos casos, se puede configurar este accesorio de manera remota, además de administrar diferentes perfiles. Además, en cualquiera de los dos casos, nos olvidaremos de tener que pedir una tarjeta física a nuestra compañía telefónica.
No obstante, la diferencia notable es que la eSIM, aunque viene también soldada en la placa base de un smartphone, lo cierto es que requiere de un procesador por separado. Algo totalmente diferente que este nuevo formato, ya que, en este caso, forma parte del propio procesador del móvil.