Análisis del ASUS ROG Phone 7 Ultimate: la bestia más «gaming» que hemos probado

Probar un smartphone dedicado al gaming siempre es especial. Entre la habitual monotonía de los terminales que pueblan el mercado, este tipo de producto sorprende en todo momento tanto por diseños más o menos atrevidos y, sobre todo, funciones y características especiales y refrescantes. El último que hemos podido testear no es otro que el ASUS Rog Phone 7 Ultimate, que viene acompañado, como habréis podido ver en las imágenes, de un accesorio muy especial.
Y por el diseño vamos a empezar. Hemos tenido la suerte de que en nuestras manos ha caído el modelo más completo en color “Storm White” que, al menos para el que suscribe, es el más interesante. Es igual a los modelos «normales», salvo la gran diferencia de la pequeña pantalla secundaria en la carcasa trasera y la inclusión en el pack del AeroActive Cooler 7, del que hablaremos más adelante. Los modelos ROG Phone 7, a secas, tienen la ventaja de que llegan en un color Phantom Black, además de repetir el modelo blanco del Ultimate y ofrecen en su carcasa trasera el logo de ASUS ROG con LEDS personalizables en lugar de la pantalla del Ultimate.
En cuanto a precios, hablamos de un terminal que «cuesta»… pero os podemos adelantar que realmente es porque lo vale. Los modelos, tanto en color blanco y negro, del ROG Phone 7 tienen estos precios y configuraciones:
- 12 GB RAM / 256GB por 1.029 €
- 16 GB RAM / 512GB por 1.199 €
La versión ROG Phone 7 Ultimate (que trae 16 GB RAM/512 GB) sube a los 1.429 €, que como ya indicamos solo tiene color blanco, y viene con el accesorio AeroActive Cooler 7 incluido y que tiene un coste de 109,99 euros si lo compramos a parte. Pero cómo promoción de lanzamiento, si se pre-compra el Asus ROG 7 de 512 GB entre el 13 de abril y el 30 del mismo mes, viene de regalo. Ya están al a venta y llegarán a manos de los usuarios a final de abril.
Diseño característico
Eso sí, ambos modelos comparten, además de Android 13, el mismo concepto con el que se atraviesa una línea diagonal en la carcasa trasera de cristal endurecido que nos deja una parte más “clásica”, aunque con los detalles para los LED y otra translúcida en la que podemos ver una serie de patrones que simulan los circuitos del teléfono de manera futurística.
Como no, en ella destaca el “ojo” de ASUS ROG en el caso de los modelos que no son el Ultimate, que como buen producto gaming lo que esconde es un conjunto de LEDS que pueden llevar hasta 8 modos de luz y ofrecer más de 16 millones de colores. Todo ello dentro de un equipo que tiene resistencia IP54, lo que quiere decir que no es sumergible, pero sí que aguanta las salpicaduras de agua sin problemas.
En su conjunto, es un smartphone que, manteniendo unas líneas lisas y contundentes, se diferencia de otros productos gaming que recurren a los relieves y las protuberancias. El ASUS ROG Phone 7 es muy cómodo en la mano, quizás algo pesado porque alcanza los 239 gramos, apostando todo su carácter “jugón” a la decoración.
Como ya hemos comentado… si nos hacemos con la versión Ultimate (que es la que hemos probado) tendremos una pantalla extra en la carcasa trasera donde podemos colocar animaciones personalizadas a través de ROG Vision. No es algo nuevo, ya estaba en las anteriores generaciones, pero viene con 60 nuevas animaciones a modo de notificaciones visuales.
Potencia bruta
Al final, es lo que queremos en un producto de estas características. Y el equipo va sobrado gracias al nuevo Snapdragon 8 Gen 2, el procesador más potente hasta la fecha con hasta 3,2 Ghz. Viene acompañado de 16 GB de RAM en su versión más completa y hasta 512 GB que, lo importante, cuenta con el sistema X Mode de ASUS para darle ese extra en rendimiento o FPS que marcan la diferencia, optimizando de manera inteligente la batería.
Hablamos de mejoras frente a la anterior Gen1 de Snapdragon 8 del 15% en procesamiento, más del 20% en cuanto a gráficos y con cerca de un 15% en eficiencia energética. ¿Esto se nota en el ASUS? Los dos primeros factores sin duda, el segundo, también, pero en menor medida, pero no es culpa del equipo sino del propio uso que le vamos a dar. Cualquier móvil que dediquemos a jugar, y sobre todo a juegos exigentes, tendrá menos autonomía que uno de uso habitual.
Eso sí, si lo comparamos con como se “bebe” la batería un juego tipo Fortnite o COD Warzone en cualquier otro móvil, o, sobre todo, como se calientan, el ASUS ROG 7 Ultimate muestra ahí sus garras y su posición como uno de los titanes del mercado en este segmento. No en vano, en las pruebas de ANTUTU y Geekbench ha dejado atrás a terminales como el Xiaomi 13 Pro o el Samsung Galaxy S23 Ultra, ambos con su mismo procesador.
Uno de los secretos: la refrigeración
Es algo que no se ve pero que se siente y mucho, sobre todo tras largas horas de sesión de juegos con el dispositivo. Este nuevo ASUS ROG Phone 7 no es que cuente con un sistema de refrigeración especial, es que toda la construcción, su estructura está pensada para disipar el calor con elementos como una capa de grafito justo debajo de la carcasa, un sistema de doble batería, una cámara de disipación por vapor y, de nuevo, una capa de grafito bajo la pantalla.
A esto hay que añadirle, y sí, por fin os vamos a contar qué es ese curioso accesorio, el AeroActive Cooler 7, que viene a ser la parte de refrigeración activa del nuevo teléfono de ASUS. Este dispositivo cuenta con un ventilador que se conecta a una abertura especial de la carcasa para inyectar el aire a través de ella y reparte también otra corriente sobre la carcasa. Es además un pad con 4 gatillos físicos para los juegos y, para rematar el conjunto, un altavoz con subwoofer para mejorar el audio con una clavija minijack para el audio.
Ojo, eso no quita que el rendimiento sonoro del equipo no sea bueno sin él. Tenemos altavoces duales y simétricos a los dos lados de la pantalla con efecto 3D, lo que permite localizar mejor a los enemigos cuando estamos jugando ya que sabemos de dónde viene el sonido, y que tienen un tamaño de 12×16 mm. Podríamos entrar en muchos detalles técnicos, pero sólo hay que quedarse con un dato para darse cuenta de lo que lleva instalado el ROG Phone 7: son los más grandes que ha montado un smartphone hasta la fecha. Y si sabéis de sonido, en los altavoces, el tamaño importa y mucho. Además, vienen firmados por Dirac Virtuo. Podemos decir que ofrecen un sonido natural y limpio, cosa muy difícil en un móvil en los que la mayoría suenan a “lata”.
Como veremos más adelante, se aprovecha de la inusual posición del USB-C para cargarse sin cable, y consigue bajar hasta 25 grados la temperatura trasera del equipo y 8 grados la de la pantalla. Según las pruebas con el equipo, se consigue mantener un framerate de 60 fps en juegos como Genshin Impact, algo que no consigue prácticamente ningún otro móvil, con una temperatura que no supera los 40 grados y una autonomía de unas 4 horas.
Como no, su extenso set de LEDs RGB es totalmente personalizable, así como sus funciones con su propia sección dedicada en el Armoury Crate, el centro de mando de los ASUS ROG ara todas las funciones gaming.
De hecho, la idea es que, si vamos a tener una sesión corta de juego, el propio disipador del procesador será suficiente. Si la cosa se extiende más allá de los 30 minutos, es cuando entra en liza la cámara de disipación por vapor y si vamos a estar más de una hora a los mandos, para eso está el AeroActive Cooler 7.
Pantalla y cámara
El terminal monta una pantalla de 6,78 pulgadas de aspecto 20.4:9 y resolución de 2448 x 1080 píxeles. Pero lo más importante no es eso sino, para empezar, que tiene un ratio de refresco que alcanza los 165 Hz – aunque podemos configurarlo desde los 60 Hz e incluso ponerlo en modo automático -, algo que es complicado de ver hasta en los monitores más avanzados. Y lo que es aún más importante, 1500 nits de brillo lo que hace que se defienda en cualquier tipo de iluminación, incluso prácticamente con luz directa solar sobre la pantalla y podemos seguir viendo sin problema unos colores nítidos y definidos.
A esto se le añade el nuevo dato de moda, el ratio táctil que llega a los 720 Hz. ¿Qué significa esto? Pues algo muy importante para un móvil destinado a que estemos tocando la pantalla mientras jugamos o con controles táctiles: precisión y ausencia, prácticamente, de lag táctil (23 ms).
Por otra parte, aunque no es un móvil fotográfico, monta una sobresaliente cámara principal de 50MP, con sensor Sony IMX766, el más interesante del fabricante, con zoom 2x óptico. Además, hay cámara secundaria con ultra gran angular de 13 MP (125 grados) y una de 5MP para el macro. En el frontal, monta una de 32 MP para los selfies.
Aunque, evidentemente, no es el punto fuerte del terminal se puede decir que ASUS ha hecho bien los deberes y no echamos de menos nada en esta cámara que no tenga un terminal de gama alta como podría ser la grabación en 8K, cámara lenta a 4K, transición casi “transparente” entre lentes, modo Pro para los más “foteros” o la posibilidad de hacer fotos de captura de trazos de luz. No es una novedad, pero es un agradable añadido entre otras muchas funciones.
Jugando con el ASUS Rog 7
Al final, es a lo que hemos venido con este terminal y para lo que está pensado. Y eso se nota en su diseño que piensa, en todo momento, que lo vamos a coger de modo horizontal. Esto se nota, para empezar, por la posición extra del USB-C que, en lugar de estar en su lugar habitual, lo tenemos en uno de los laterales para que no moleste al agarre.
A partir de ahí, todo esta pensado para sujetarlo con una o dos manos, pero siempre en esa posición ya que, hasta tenemos dos botones ultrasónicos en uno de los laterales del equipo a modo de gatillos de un gamepad de consola. Por otra parte, en los ajustes se puede elegir, por ejemplo, la vibración y respuesta de los botones en pantalla.
En este sentido, destaca también el nuevo Game Genie, un viejo conocido de la marca pero que viene renovado con una nueva interfaz y más funciones para tener a un toque mientras jugamos cosas como la posibilidad de cancelar notificaciones o llamadas, mapear la vibración de la pantalla o cambiar el refresco de pantalla. Entre las novedades que más nos han gustado está el X Sense, un sistema que reconoce momentos clave en los juegos para darnos información mientras estamos jugado o el X Capture que se encarga, a través de IA, de capturar ese momento épico que estamos viviendo para poder compartirlo después.
Lo cierto es que ya el ROG Phone 6 Pro rozaba los 60 FPS, pero el ROG Phone 7 Ultimate ha llegado para asentarlos y hacer que sean una gozada. No hay juego que se nos haya resistido a una sesión en la que, incluso sin el accesorio refrigerador, hayamos pasado de 40 grados de temperatura (bajando incluso a 35 con él puesto) y siempre al máximo de framerate disponible.
Cómo ya hemos dicho antes, la batería aguanta, en su conjunto y con el AeroCooler funcionando, alrededor de las 4 horas de juego. No en vano, lo que monta son dos módulos que suman unos 6.000 mAh, una auténtica barbaridad y con posibilidad de carga rápida con adaptador HyperCharge incluido además de una carcasa de goma con una ventana para no perdernos detalle de los LED de la carcasa del terminal.
Conclusión
El Asus ROG 7 y especialmente la versión Ultimate, es, actualmente, el móvil gaming más potente y completo del mercado actualmente. No solo por prestaciones, que las tiene, sino también porque está pensado por y para los videojuegos. Todo en su diseño, estructura, componentes, software y accesorios está enfocado a este mundo.
Tanto si quieres dedicar tiempo a títulos nativos de móvil como atreverte con sistemas de streaming como XCloud, lo podemos decir sin temor a equivocarnos, hasta el momento, no vas a encontrar un smartphone que cumpla mejor para esta función.