Hay muchas personas que quieren gastar lo mínimo posible al comprar un móvil, lo que los lleva a optar por opciones que cuestan 100 euros e incluso menos. Sin embargo, esta es la peor decisión que puedes tomar por el simple hecho de que por un poco más hay smartphones que están muy por encima en todos los sentidos que los primeros.
La brecha existente entre un teléfono de 100 euros y uno de 150 es abismal en términos de prestaciones. Pantalla, rendimiento, cámaras, diseño… todo el dispositivo experimenta una mejora que se nota desde el primer momento. De modo deberías plantearte buscar otra clase de alternativas independientemente de tus preferencias.
No compres un móvil de 100 euros
Estamos de acuerdo en que todos conocemos a una persona que dispone de una economía lo suficientemente solvente como para comprarse un móvil aceptable, pero siempre opta por el más barato posible por el simple hecho de que solo lo quiere para chatear y ver redes sociales. Aunque también hay casos en los que se opta por smartphones de menos de 100 euros para personas mayores dado que no van a aprovechar todas sus capacidades. No obstante, poniendo un poco más de dinero encima de la mesa puedes conseguir un teléfono de garantías y que va a seguir siendo útil para cualquier cosa. Aquí te dejo los principales motivos por los que deberías pensarte dos veces apostar por un móvil tan barato.
La calidad de la pantalla se nota muchísimo
La mayoría de los móviles baratos cuentan con una pantalla tipo IPS LCD que salen perdiendo en comparación con los paneles AMOLED que llevan muchas opciones por 150 euros. Estos últimos cuentan con un nivel de brillo mucho mayor y unos colores más intensos, lo cual no permite mejorar la calidad de imagen de series y películas, sino que también ayuda a que las personas mayores no tengan que forzar la vista para apreciar el contenido con detalle.
Por solo 150 euros hay móviles increíbles
Ni siquiera hace falta llegar a los 200 euros, puesto que hay móviles en oferta por 150 euros que presumen de especificaciones ideales. El caso ejemplar es el Redmi Note 12 de Xiaomi, un dispositivo que cuenta con pantalla AMOLED de 120 Hz como los teléfonos de alta gama, un procesador mucho más potente que los que llevan los de menos de 100 euros y una cámara que ofrece mejores fotos y más posibilidades de imagen.
Las fotos de las cámaras se notan
Acabamos de mencionar que las fotos de la cámara es uno de los aspectos donde más se nota la mejora de un móvil de 100 euros a uno de un poco más. El detalle de los primeros es muy pobre, así como la representación de colores. Si bien los smartphones de 150 euros no son una maravilla, de día se nota muchísimo el salto de calidad. Además, los modelos como el Redmi Note 12 traen varios tipos de lente para una mayor variabilidad.
Un móvil de 100 euros no es bonito
Otro punto negativo de los móviles de 100 euros o menos es que suelen ser pesados y tener un diseño que para nada resulta atractivo. En cambio, hay alternativas como el Samsung Galaxy A14 o el propio Xiaomi Redmi Note 12 que hacen gala de una estética premium que resulta atractiva a simple vista. Muchos pasan por alto este aspecto, pero yo no soporte los smartphones feos.