Durante los últimos meses las especulaciones en torno a la trayectoria de Apple en el mercado de smartphones se ha apoderado de la actualidad. Con la presentación oficial de los resultados económicos del primer trimestre económico de 2016 la firma de Cupertino no ha hecho más que reavivar los malos pronósticos. Si bien los norteamericanos han logrado superar las estadísticas de venta respecto al mismo periodo del año pasado, la lectura de los datos de venta va en otra dirección. El iPhone 6s y las distintas versiones anteriores aún en catálogo no convencen, generan dudas, tal y como se desprenden de los últimos estudios de mercado.
Desde su nacimiento, el smartphone de Apple ha aumentado su presencia en el mercado de forma exponencial. Cada nueva generación de iPhone ha logrado unos resultados envidiables con un porcentaje de crecimiento exuberante. Sin embargo, los últimos estudios de mercado elaborados por prestigiosas firmas de analistas han empezado a registrar datos no tan positivos para el teléfono de la manzana mordida. Un cúmulo de circunstancias ha propiciado que el teléfono que en su día Steve Jobs catapultase al éxito se vea en una situación comprometida.
La decadencia de Apple, una posibilidad cada vez más evidente
Esa situación se puede ver en varias gráficas. La primera en las mismas estadísticas de venta proporcionadas ayer mismo por la firma de Cupertino. Las mismas indicaban que, si bien el último trimestre del año se saldaba con ventas de 74.8 millones de iPhones (300.000 unidades más que durante el mismo periodo del año pasado), se apreciaban indicativos de desvanecimiento. ¿Dónde? En este apartado entran de lleno estadísticas que ponen de manifiesto que los principales mercados para Apple hasta la fecha hacen aguas. Y es que allí donde hasta ahora se había vendido en mayor porcentaje, ahora se registran fuertes caídas.
Tal es el caso del mercado japonés, donde el descenso respecto a la cuota de mercado de iPhone en el último trimestre de 2014 se cifra en un 6.1% menos. Lo mismo sucede en Australia, donde esa bajada está en torno al 5.5% respecto al dato registrado en Q4 de 2014. Especialmente preocupantes pueden tomarse las estadísticas procedentes de Estados Unidos, la cuna de la compañía, donde el descenso es más acusado con un 8.6% menos de cuota de mercado. En Europa la caída es ligeramente inferior, pero con clara tendencia bajista.
Asia, el bálsamo
Si Apple ha vendido más iPhones que en anteriores años, pero registra una cuota de mercado claramente inferior en sus principales mercados de referencia, en algún otro país tiene que haber ganancia. Efectivamente, Apple actualmente se nutre de mercados estratégicos como China, donde la venta de su smartphone sigue en aumento. Los datos registrados hablan de un incremento del 5.6%. Sin embargo, los directivos de Apple ya son conscientes de que las ventas empiezan a estancarse incluso en sus mercados más suculentos como es el asiático. Tan solo hay motivos para el optimismo en mercados cono el hindú, donde Apple sí ha visto infladas las ventas notablemente. Sin embargo, con la tendencia bajista del resto del mercado, la cual muchos de los analistas respaldan para próximos trimestres económicos, Apple puede verse envuelta en una espiral negativa.
El papel del iPhone 7
Es indudable que la posición de Apple en el mercado se verá influenciada en los próximos meses si no toma medidas. Las medidas de contención pasan por una de sus principales bazas, el iPhone 7. Sin embargo, a no ser que la propia firma adelante el ciclo comercial de su smartphone, el iPhone 7 no llegará hasta por lo menos el cuarto trimestre de 2016. Con todo y con eso, muchos tienen que ser los cambios que ofrezca el nuevo modelo para reactivar las ventas a partir del trasvase de usuarios de otras plataformas que logren ser convencidos por las bondades del nuevo modelo. Del mismo modo el éxito de Apple pasa por seducir a quienes quieran cambiar sus viejos iPhone y vean motivos suficientes en el iPhone 7. Por tanto, la nueva generación de iPhone será vital para espolear las ventas, pero para ello el nuevo modelo tendrá que impactar en un mercado en el que el resto de marcas están a un nivel muy elevado. A este respecto es importante destacar el factor precio. Y es que los de Cupertino juegan en contra en este aspecto con modelos excesivamente caros en comparación con la competencia.
El iPhone low cost
A pesar de que Apple mantiene su línea empresarial donde no hay cabida para un iPhone low cost, el mercado de smartphones es muy dinámico y actualmente la gama media manda. Una familia de dispositivos donde la franja de precios entre los 200 y 400 euros es el coste que muchos de los usuarios interesados por la telefonía están dispuestos a gastar. Apple no puede perder de vista este mercado si quiere mantener sus estadísticas de venta. ¿Será esta vez el iPhone 6c o iPhone 5se el modelo de referencia en esta gama? Pronto lo sabremos puesto que se espera que haya un evento de prensa en marzo donde previsiblemente se verá el iPhone con pantalla de cuatro pulgadas, acompañado tal vez de nuevos iPads.