Anterior a su lanzamiento, el OnePlus One encabezó portadas de todo tipo de medios de comunicación con diversas críticas positivas gracias a la excelente campaña de marketing con que su fabricante preparó la llegada al mercado del terminal. Sin embargo, tras esta «euforia» llegaron ciertas decepciones al ver el embalaje con que llegaron las cien primeras unidades y, sobre todo, algunos defectos de ensamblaje. No obstante, podrían haber sido sólo las cien primeras unidades salidas de Smash The Past las que habrían salido de OnePlus en estas condiciones. En cualquier caso, las primeras pruebas de resistencia están llegando, y en este caso es sometido a agua.
Los teléfonos inteligentes, así como las tabletas, están conformados mayormente por componentes electrónicos que, si bien por sí solos no son vulnerables al agua, su conexión con una batería cargada puede provocar un cortocircuito al contactar con este líquido -y otros-. Por eso, los dispositivos móviles resistentes al agua, y así garantizado por la certificación IPXX, cuentan con ciertas protecciones que mantienen estanco su interior, lo que impide la entrada de líquidos hasta determinada presión. No obstante, ya hemos visto anteriormente cómo terminales «no resistentes al agua» como el HTC One M8 o el Motorola Moto G muestran una resistencia sorprendente que deben, especialmente, a su excelente construcción. ¿Qué ocurrirá con el OnePlus One?
El OnePlus One «soporta» salpicaduras según muestra un usuario en vídeo
En primer lugar, es fundamental diferenciar entre inmersión y salpicadura. La diferencia fundamental radica en la presión con que el agua hace contacto sobre el cuerpo de teléfono inteligente, puesto que de ello puede depender la infiltración de líquido hacia el interior del terminal. Así pues, las salpicaduras suponen una presión mínima del agua sobre el cuerpo del dispositivo y, por lo tanto, un mayor grado de dificultad para causar desperfectos. Ahora bien, una inmersión supone presión del agua sobre todo el cuerpo del dispositivo de forma, en estado estático, uniforme sobre el mismo.
En cuanto al vídeo en el que se muestra una prueba de resistencia al agua del OnePlus One, no puede considerarse una inmersión en agua por parte del dispositivo, si bien es cubierto por completo por líquido. Y es que, con la profundidad de los charcos en los que es sumergido el OnePlus One, la presión que el agua ejerce sobre el mismo es reducida, por lo que es comprensible que no se produzcan desperfectos en el mismo. En cualquier caso, y para quitar aún más hierro al asunto, la infiltración del agua hacia el interior del dispositivo puede ser lenta y varía en función de la orientación del mismo, lo que significa que puede no causar desperfectos, sumergir el terminal en agua, durante las primeras horas. Sin embargo, cuando lo dejemos colocado o, simplemente, continuemos utilizándolo, pequeñas gotas de agua o humedad que se haya infiltrado puede acabar haciendo un contacto que origine el corto circuito y, con él, los desperfectos.
Fuente: PhoneArena