A falta de una semana para que sea presentado el Samsung Galaxy Note 3, siguen apareciendo rumores que apuestan por una versión de bajo coste. Las principales diferencias respecto a la versión original estarían en el tipo de pantalla y la resolución del sensor de la cámara. Estos cambios tendrían como objetivo reducir el coste de fabricación del phablet para distribuirlo en los mercados emergentes.
La información recogida por SamMobile no es más que un reflote de la posibilidad de que Samsung fabrique varias versiones del inminente Galaxy Note 3. Una de éstas se correspondería con la más básica en prestaciones con el fin de abaratar el coste final del phablet. Y es que la competencia de otras marcas chinas con Huawei, ZTE e incluso Xiaomi y otras tantas han abierto un frente en el que el objetivo es ofrecer equipos de lo más completos a precios reducidos.
El «low cost», una moda forzada
La mismísima Apple se ha visto obligada a crear el iPhone 5C para triunfar en mercados como el chino. ¿Por qué no Samsung? Aunque la compañía surcoreana dispone de un completo catálogo de terminales que abarcan un buen número de gamas y precios, son los equipos de alta gama los más seductores…y caros. De ahí que tal vez la firma presente el próximo 4 de septiembre en la IFA de Berlín no solo el Samsung Galaxy Note 3, sino las versiones específicas para otros mercados. Tal y como proponen las fuentes consultadas, el próximo phablet contaría con, al menos, una versión que reduciría ligeramente sus prestaciones para fijar un precio más competitivo.
Un tercio del total de la producción
Estos cambios se ceñirían al tipo de pantalla, ya que se dice que la versión low cost podría incorporar una pantalla LCD en lugar del característico display OLED -Super AMOLED- de versiones anteriores y modelos de alta gama. Asimismo la cámara también sufriría los «recortes» al sustituirse la principal, con sensor de 13 megapíxeles, por otro de ocho megapíxeles. Se desconoce en qué medida repercutiría esta variación y si otros componentes será objeto de cambios, aunque el panel supondría de principio no solo un importante ahorro económico, sino que aliviaría la carga de producción de paneles orgánicos. Según datos ofrecidos por el medio etnews, el Samsung Galaxy Note 3 con pantalla LCD tendría un volumen del 30% del total de la producción del phablet.