Hoy en día todos hacemos fotos en cualquier lugar y las subimos a las redes sociales. Sin embargo, ¿es lícito publicar fotografías de personas, así como niños sin su consentimiento? Energy System nos recuerda la importancia de saber si es legal hacer fotos en la playa con el móvil, así como en conciertos, fiestas o en cualquier otro tipo de lugares públicos.
Si bien es cierto que la Constitución ampara el derecho a la información y a la libertad de expresión, también protege el derecho a preservar la imagen y la intimidad. Esto se traduce en que, si captas una imagen o grabas un vídeo de alguien sin su consentimiento y lo publicas, podrías ser denunciado por esa persona, ya que no es legal hacer fotos en la playa. Es más, el simple hecho de realizar la grabación y la fotografía es punible incluso aunque no lo publicaras.
“La ley sólo permite dos supuestos para poder sacar fotografías o vídeos de alguien sin su consentimiento. Si se trata de una persona pública en un acto o lugar público o si el material gráfico tiene fines informativos y es considerado de interés público”
No obstante, dependiendo del fin para el que se publique la foto y el medio en que dicha publicación se lleve a cabo, se estará realizando una intromisión ilegítima al derecho al honor de la persona que salga en la foto.
En defensa de la intimidad de las personas
La principal diferencia radica en el ser un personaje anónimo o un personaje público. Para demostrarlo podemos remitirnos al caso de la ex Miss España María Reyes, quien en 2002 fue capturada en la playa en ‘top less’ por la revista ‘Interviú’. En aquel caso la sentencia del Tribunal Supremo indicaba que «El personaje público que en lugar público se expone a mirada ajena asume que su imagen pueda ser captada y difundida sin su consentimiento, aunque no le satisfaga el resultado y siempre que tenga interés según el género socialmente admitido al que pertenezca el medio».
Por supuesto, a nivel más concreto, es necesario que te pongas a pensar el tipo de playa en el que estás. Si no hay nadie en la playa, pues no habrá problema en realizar fotos, mientras que si la playa está llena y hay muchas personas, puede llegar a molestar el hecho de que haya alguien haciendo fotos. Por supuesto, en el caso de que se trate de una playa nudista, esto se acrecienta, ya que hay muchas personas que vayan allí en busca de la tranquilidad y tú la estás perturbando.
Natalia López, responsable legal de Energy System indica que en caso que un tercero entienda que se ven lesionados sus derechos, podría solicitar la retirada de una imagen donde se reconozca según lo dispuesto en la Ley Orgánica 1/1982 de 5 de mayo de derecho al honor y a la propia imagen.
En este punto hay una excepción, ya que la necesidad de informar sobre un acontecimiento acaecido en una playa con el móvil también puede hacer prevalecer la libertad de información. A ello hace referencia la Ley Orgánica 1/1982, de 5 de mayo, sobre protección civil del derecho al honor que prevé que el derecho a la propia imagen no impedirá la información gráfica sobre un suceso o acaecimiento público cuando la imagen de una persona determinada aparezca como meramente accesoria.
Entonces… ¿es legal hacer fotos en la playa y otros sitios públicos?
La respuesta a esta pregunta no es tan sencilla como parece, ya que depende de varios factores, como el lugar, el tipo de foto, el uso que se le dé y los derechos de las personas fotografiadas.
En primer lugar, hay que distinguir entre el derecho a la imagen y el derecho a la información del que hemos hablado antes. Si lo tienes caro, en general, se puede hacer fotos en la playa y otros sitios públicos, siempre que no se invada la intimidad o el honor de las personas fotografiadas, ni se altere el orden público o se incumplan las normas del lugar. Por ejemplo, no se puede hacer fotos en zonas reservadas, como vestuarios o baños, ni en playas nudistas o con restricciones específicas. Tampoco se puede hacer fotos con fines comerciales o publicitarios sin autorización previa.
Sin embargo, publicar o compartir esas fotos en redes sociales u otros medios puede suponer una vulneración del derecho a la imagen de las personas que aparecen en ellas, especialmente si son menores de edad o si las fotos son comprometedoras o humillantes. En ese caso, se necesita el consentimiento expreso y previo de las personas afectadas, o de sus padres o tutores legales si son menores. De lo contrario, se podría incurrir en un delito contra la intimidad o el honor, que puede acarrear multas e incluso penas de prisión.
Por lo tanto, lo más recomendable es tener prudencia y respeto a la hora de hacer fotos en la playa y otros sitios públicos, y evitar publicarlas sin permiso si pueden afectar negativamente a otras personas. Al fin y al cabo, lo más importante es disfrutar del verano y de la naturaleza sin molestar ni perjudicar a nadie.
