Aunque Android es un sistema operativo bastante abierto, ciertas configuraciones no se encuentran accesibles para la mayoría de los usuarios, ya sea porque pueden suponer un peligro para la seguridad o para el rendimiento como por estar limitadas por el propio fabricante. Una de estas configuraciones a las que no solemos tener acceso es a la configuración del procesador, de su comportamiento y, sobre todo, de las frecuencias que nos permiten hacer Oberclock y Underclock.
Hoy en día, la mayoría de los teléfonos modernos cuentan con dos procesadores, uno de alta capacidad, Big, ideal para las tareas que requieres más carga de trabajo, como, por ejemplo, los juegos o mientras utilizamos el teléfono, y otro más lento, Little, pero mucho más eficiente, que se encarga de mantener los procesos y servicios en segundo plano funcionando con un gasto casi ínfimo de batería.
En algunas roms modificadas, es posible que estas frecuencias no estén bien configuradas y puede ocurrir que el procesador Little, encargado de estos procesos en segundo plano, funcione a una frecuencia demasiado baja y tengamos problemas. O también, si somos usuarios un poco más avanzados y hemos instalado un kernel especial, es posible que nos interese reducir la frecuencia máxima de los procesadores, haciendo que el teléfono consuma mucha menos batería y se mantenga, además, más fresco.
En el siguiente artículo os explicamos cómo se realiza fácilmente este proceso utilizando la herramienta Kernel Auditor. Además de modificar las frecuencias del procesador, esta herramienta nos permitirá también jugar con los distintos «gobernadores» de la CPU.
Mucho cuidado al modificar las frecuencias de la CPU de tu Android, o podemos quedarnos sin teléfono
Como hemos dicho, esta se trata de una configuración avanzada y, si no sabemos lo que estamos haciendo, es mejor no modificar estos valores. Aunque normalmente no hay peligro, ya que Android nos evitará aplicar configuraciones inválidas, sí es posible que si configuramos unos valores muy elevados, tanto en el procesador más potente como en el más eficiente, es posible que, el teléfono empiece a funcionar mal, se caliente más al utilizado y, sobre todo, que la batería dure menos de lo normal.
Además, si aumentamos las frecuencias máximas, entonces sí podemos llegar incluso a romper nuestro teléfono.
Como hemos dicho, esta herramienta es muy práctica, por ejemplo, para solucionar el problema con la reproducción de música en segundo plano que tienen muchas de las roms LineageOS, pero, a partir de eso, debemos utilizarla con cuidado.
¿Alguna vez has realizado este tipo de configuración a tu dispositivo?