Las cartas ya están sobre la mesa. Samsung daba a conocer ayer mismo su nueva bestia, el Samsung Galaxy Note 7 y a medida que pasan las horas vamos conociendo más y más detalles adicionales a las características técnicas desveladas en el evento Samsung Unpacked. Según lo previsto, el phablet compartirá con el Samsung Galaxy S7 algunos elementos vitales como cámara y procesador. Sin embargo, las primeras pruebas de rendimiento como AnTuTu realizadas al Note 7 con chip Snapdragon 820 hablan de puntuaciones superiores a las registradas por el Galaxy S7.
A las similitudes estéticas entre el Samsung Galaxy S7 Edge y el nuevo Samsung Galaxy Note 7 hemos de sumar las características técnicas compartidas. Y es que a nivel de rendimiento, el nuevo Note 7 dispondrá en su interior los mismos 4 GB de RAM y SoC que el Samsung Galaxy S7. Y sí, los surcoreanos volverán a apostar por dos versiones diferenciadas por el procesador. La versión internacional estará provista de nuevo con el Samsung Exynos 8890 de ocho núcleos y la versión específica para mercados concretos como el estadounidense seguirá contando en sus filas con el procesador Qualcomm Snapdragon 820 a 2.15 GHz.
Uno más uno no son dos
A priori, con esta configuración era de esperar que el rendimiento de ambos modelos fuera prácticamente idéntico, máxime cuando la resolución de la pantalla; aunque de diferente tamaño; es la misma en ambos casos. Pues las primeras pruebas realizadas a los modelos expuestos por la firma después del evento de presentación dejan ver que no es del todo cierto, al menos tal y como refleja el popular test de rendimiento AnTuTu.
Así lo indican desde PhoneArena, que tuvieron la oportunidad de practicar las pertinentes pruebas. Las mediciones se produjeron sobre un Samsung Galaxy Note 7 con procesador Snapdragon 820. Tal y como podéis ver en la captura y las gráficas estadísticas, el phablet ha registrado una media de 145.000 puntos mientras que la respectiva versión de Galaxy S7 –con Snapdragon- se queda en unos 136.000 puntos. Son aproximadamente 9.000 puntos de diferencia, algo reseñable dada la configuración de software.
Cuestión de la optimización de software
No obstante, podemos ahondar más en el tema e indicar que el Samsung Galaxy S7, el mismo día de la presentación, los modelos expuestos en aquel momento ofrecían puntuaciones cercanas a los 131.000 puntos. Por tanto, podríamos determinar que la diferencia en condiciones similares es aún mayor a esos 9.000 iniciales. En cuanto a los test específicos encargados de medir el rendimiento gráfico como GFXBench, no hay variaciones en el procesamiento de la GPU Adreno 530.
A pesar de las variaciones que puede presentar el test AnTuTu bajo ciertas circunstancias, queda patente que las diferencias de puntuaciones se deben principalmente a que Samsung ha logrado optimizar aún más su software –Android 6.0.1 Marshmallow– desde el lanzamiento del S7. Afinaciones que permiten aprovechar en mayor medida el hardware y que se ve reflejado en todo su esplendor en el Samsung Galaxy Note 7, puede que por las modificaciones realizadas en la revisión de la interfaz gráfica Samsung TouchWiz UX disponible en el phablet. ¿Sucederá lo mismo con la versión equipada con procesador Samsung Exynos 8890?