Microsoft ha presentado hace unos minutos la que será su nueva apuesta por el segmento tablet, que busca hacerse un hueco tras tres generaciones de una Surface que, en esta ocasión y aunque lleva instalada la versión 8.1 de Windows, será compatible con la nueva que llegará a lo largo de este 2015. Por lo que no se quedará obsoleta en el momento que los de Redmond liberen su nuevo OS.
Surface 3 llegará a las tiendas el 7 de mayo y el diseño ha sido afinado todavía más respecto del modelo Pro que lleva ya algún tiempo en las tiendas. Se trata de una versión más accesible y económica pero con un gran rendimiento que además destaca por las mejoras que le han aplicado a la parte exterior.
Este nuevo dispositivo está creado con un cuerpo de magnesio con una capa cerámica y desde Microsoft avisan de que el grosor de esta Surface 3 ha venido condicionado por el tamaño mínimo que debía tener el conector USB. Lo que nos hace entender que de no mediar esta ranura, podríamos haber tenido un tablet todavía más fino.
Eficacia y rendimiento
Esta nueva Surface 3 vendrá con un procesador Atom X7 quad-core que es un 80% más rápido que un Intel i3, lo que da una idea del buen rendimiento que vamos a obtener con este nuevo dispositivo. Además del chip, la memoria dependerá de la que escojamos en la tienda y tendremos opciones de 2 ó 4 gigas de RAM.
Windows 8.1 (actualizable a Windows 10) se mueve con mucha soltura y no hay problemas para realizar la mayoría de tareas que podemos completar en un ordenador portátil de gama media. Al fin y al cabo estamos hablando de un tablet con aspiraciones profesionales y de enseñanza. Precisamente por esto último, existirá una versión con almacenamiento de 32 gigas dirigido para el ámbito docente. Aunque si vamos a las tiendas solo los hallaremos de 64 y 128GB SSD.
Pantalla y batería
La pantalla de esta nueva Surface 3 tiene 10 pulgadas y resolución FullHD, es decir, 1.920×1.080 pixels y aunque hay móviles que alcanzan el QHD (2.560×1.440), en el ámbito de los ordenadores no es algo que se haya extendido, por lo que es un tamaño perfecto para el trabajo diario.
Uno de los grandes lastres de los tablets y dispositivos móviles suele ser la duración de la batería. Pues bien, aquí Microsoft ha querido hacerse notar y nos habla de que tendremos una autonomía de 10 horas de reproducción de vídeo ininterrumpidas o dos días de trabajo completos, haciendo las tareas habituales que consideran como ‘una jornada normal’. Aquí, como siempre, dependerá de nuestro ritmo de uso que notemos más o menos estos ejemplos que nos ponen desde la compañía.
Lápiz y cámaras
Esta nueva Surface trae de serie el famosos ‘stylus‘ que tan buenos resultados viene dando en la plataforma Windows desde el lanzamiento del primer Surface Pro. Ahora el dispositivo lo han rediseñado y mejorado incluso sus prestaciones ya que es sensible a la presión (256 niveles sin efecto Parallax) y detección de la palma de la mano. Esto significa que aunque apoyemos la mano en la pantalla mientras dibujamos, el lápiz no dejará de funcionar. Además, tendremos aplicaciones adaptadas para anotar incluyendo PDF, que podremos señalar y escribir sobre ellos fácilmente para compartir lo corregido rápidamente.
También cuenta con una cámara principal de 8MP y otra frontal de 3 que nos servirán para salir de un aprieto si es necesario sacar alguna fotografía. Lógicamente, esto nos abre el camino para videoconferencias y el uso de ‘apps’ como Skype o Hangouts de una manera fácil y sencilla.
Conectividad y puertos
Aunque es algo que Microsoft no pareció ver con buenos ojos, por fin está dispuesta a tener como norma que sus tablets (en este caso la nueva Surface 3) tengan conectividad móvil. En el caso de este nuevo modelo, tendremos una opción LTE/4G que nos permitirá conectarnos por la calle gracias a una tarifa de datos aunque si optamos por la más sencilla y económica, nos tendremos que conformar con Wifi.
Si antes os hablábamos de que por ‘culpa’ del USB el grosor del tablet no podía pasar de un mínimo, hay que decir que además de la conexión de carga tendremos un Mini Display Port, Micro USB y auriculares por si queremos conectarlo a un monitor y usarlo en casa como si se tratara de nuestro equipo de sobremesa.
Un ordenador (casi) de bolsillo
Este Surface 3 viene a mejorar todavía más la apuesta que Microsoft llevó a cabo con su modelo Pro, aunque reduce sensiblemente sus prestaciones para encajarlo en un nicho de mercado todavía más competitivo. Prueba de ello es su precio, que será de 599 euros para el modelo normal y esa ventaja de poderlo actualizar a Windows 10 este mismo año.
Como accesorios opcionales tenemos el ‘docking station‘ o la funda teclado, que es una de las grandes aportaciones de Surface a este mercado y que nos costará con el modelo de teclas mecánicas 129 euros. Sin duda, un complemento casi obligado si nuestro trabajo es escribir constantemente.
Un gran equipo y una gran evolución.