El Motorola Moto G es un terminal que apenas lleva entre nosotros unas pocas semanas tras su lanzamiento el pasado mes de noviembre. Adscrito al segmento de los smartphones de gama media, es uno de los dispositivos que encaran la campaña de Navidad con muchas esperanzas de cosechar buenos resultados.
Pero al margen de las espectativas que tenga la propia Motorola con este modelo, lo cierto es que sus especificaciones técnicas están muy bien equilibradas para obtener un rendimiento óptimo gracias a su instalación de Android 4.3 Jelly Bean. Como recordaréis, el Moto G cuenta con un procesador quad-core Snapdragon 400 a 1,2 GHz, 1 GB de memoria RAM, 8 ó 16 de almacenamiento interno, pantalla de 4,5 pulgadas y 1280×720 pixeles de resolución, una cámara de 5 MP y una batería de 2.070 mAh. Otras de las funciones más interesantes de los últimos modelos de Motorola es la posibilidad de activar la barra de navegación.
Precisamente, sobre la batería va el test que han realizado nuestros compañeros de GSMArena, que le han aplicado el tercer grado para conocer cuánto dura según el uso que le vayamos a dar. Y estos son los resultados.
Llamadas
El nuevo Moto G consigue quedarse a apenas 19 minutos de las 14 horas de uso en llamadas, lo que significa que si lo vamos a usar sólo para esos menesteres, la duración está más que garantizada para aguantar un día entero y algo más (otra cosa es que haya una tarifa que aguante este ritmo). Aquí tiene mucho que ver que el smartphone no usa la pantalla mientras hablamos, por lo que el ahorro de batería es considerable.
Navegación web
Precisamente en la navegación web sí hay un uso intensivo de la pantalla, lo que hace que el rendimiento descienda hasta las 9 horas, a pesar del buen trabajo del procesador de ‘bajo consumo’ que lleva, un Cortex-A7. Hay que recordar que el Moto G no es 4G, por lo que el tiempo de carga de las páginas es mayor y, por decirlo de alguna forma gráfica, las más de 9 horas dan para ver mucho menos con una conexión 3G. Pero aún así, es una cifra realmente meritoria.
Reproducción de vídeo
Y para el final, unas de las tareas que mayor cantidad de energía requiere del Moto G: la reproducción de vídeo. En este test aguantó más de 6 horas y media, lo que no está nada mal si tenemos en cuenta que todo un Nexus 5, por ejemplo, tiene menos aguante en este apartado.
Resultados finales
Tras todas las pruebas realizadas, el Moto G es capaz de alargar la vida de su batería hasta las 54 horas, es decir, dos días completos más seis horas que nos van a permitir, como mucho, hablar diariamente una hora por teléfono, otra navegando y otra viendo películas.