Los dispositivos de Apple compatibles con iOS 6 ya pueden instalar la actualización 6.0.1. Es bastante recomendable hacer esto, ya que se consigue un mejor rendimiento y s solucionan, como es habitual, algunos pequeños problemas de funcionamiento y compatibilidad. El proceso se puede realizar de dos formas con un iPhone 5 (y con el resto de modelos también): mediante iTunes o el denominado vía OTA (Over The Air).
Ambas formas tienen el mismo resultado, que no es otro que iOS 6.0.1 se instale de forma correcta en el dispositivo correspondiente, pero cada una de estas formas tiene sus particularidades. Te las comentamos, gracias a la información suministrada por nuestros compañeros de Apple Zona, para que tú decidas cuál es la que crees que más te conviene.
Proceso mediante iTunes
Es el que lleva más tiempo en funcionamiento, ya que hasta la llegada de iOS 5 era la única forma que existía para actualizar un iPad, iPhone e iPod. Para poder llevarlo a cabo se ha de conectar el terminal correspondiente al ordenador mediante el puerto USB y, a partir de este momento pasa lo siguiente: se identifica el dispositivo y la versión de su software, a continuación comprueba que si está sincronizado con la biblioteca de iTunes y, finalmente, el programa contacta con el servidor de actualizaciones y, de existir alguna, pregunta al usuario si se desea proceder a su instalación (de confirmarse se comienza con la descarga del archivo correspondiente).
Es un método limpio y seguro, que tiene como virtud que si existe cualquier problema con el producto iOS, es capaz de realizar una instalación limpia y comenzar “desde cero”. Eso sí, aquí se descarga el sistema operativo por completo, por lo que se ha de conseguir un fichero de 700 MB, más o menos, que sumado al proceso de instalación tiene como resultado un tiempo elevado pare hacer todo esto.
Consciente de que la actualización mediante iTunes era demasiado larga, pero necesaria mantenerla por si hay problemas con un terminal, Apple lanzó con iOS 5 las conocidas como actualizaciones Delta (o como se conoce normalmente, vía OTA).
Actualización vía OTA, mucho más rápida
Si se procede a una instalación de este tipo, el tiempo que se necesita para obtener el mismo resultado es muy inferior. La razón es que mediante las actualizaciones Delta sólo se descargan las rutinas de código que se han modificado, por lo que se puede reducir el tamaño del archivo a descargar hasta en un 90% en casos extremos. Un ejemplo es que iOS 6.0.1 sólo ocupa 43,3 MB.
Aparte de la reducción del tiempo en el proceso de instalación, también se consigue un beneficio añadido: el proceso es incremental, por lo que se instala en el terminal de forma directa y sin perder dato alguno. En definitiva, un proceso más rápido e igual de limpio (pero este es justo el que puede fallar, y para eso existe el específico con iTunes…).
Por lo tanto, ahora sólo tienes que decidir cómo prefieres realizar la actualización de tu dispositivo Apple, como por ejemplo los nuevos iPhone 5. ¿Más rápido o seguridad 100%?