El ZTE Axon 7 fue presentado a mediados del mes de mayo, convirtiéndose desde el momento de su lanzamiento en uno de los terminales más potentes del momento. El nuevo gran buque insignia de ZTE pertenece al selecto club de teléfonos con 6GB de RAM, y además cuenta con un diseño realmente atractivo, beneficiado por los excelentes materiales con los que está fabricado. Ahora un test muestra su resistencia a arañazos, fuego y a doblarse en este vídeo, donde ha demostrado ser uno de los más resistentes en la actualidad.
Que un teléfono sea potente y bonito no tiene por qué estar reñido con que sea resistente a algunos imprevistos en forma de accidente, como arañazos, torsiones inesperadas e incluso a una fuente de calor a la que pueda estar expuesto de forma casual.
El ZTE Axon 7 resiste estoicamente en esta prueba
Como decimos, la potencia y el diseño no tienen por qué estar reñidas con la resistencia, y esto es lo que demuestra el siguiente vídeo, que pone a prueba al ZTE Axon 7 en multitud situaciones que más bien parecen una tortura que un test de resistencia. En el primero de todos, la pantalla del ZTE demuestra su resistencia a los arañazos, siendo estos notables sólo en las mayores profundidades, lo que sin duda demuestra que para que un arañazo quede grabado en la pantalla hace falta mucha fuerza o un objetivo verdaderamente afilado.
En cuanto a los arañazos sobre su cuerpo, dejan evidentemente una huella, pero en general se comporta muy bien en este aspecto, siempre y cuando hablemos de arañazos que puedan darse en su uso diario. De hecho la cuchilla no es capaz de dejar marca alguna sobre las lentes de la cámara de fotos, tanto la delantera como trasera, ambas permanecen inalterables ante los intentos de rayado. Lo mismo ocurre con el lector de huellas, que a pesar de los profundos arañazos sigue funcionando perfectamente, lo que demuestra su excelente fabricación y resistencia a los arañazos.
El fuego también intenta hacer sus estragos, pero no lo consigue, la pantalla mantiene su forma original, no se oscurece y además funciona perfectamente después de la exposición a la llama. Y por último la prueba más importante, el bend test, que mide su resistencia a doblarse.
Aquí el ZTE Axon 7 da el do de pecho y demuestra ser lo suficientemente flexible como para recobrar su forma original después de haber sido expuesto a una fuerza importante. El resultado, no hay signos de haberse doblado el teléfono, lo que viene a refrendar que el ZTE Axon 7 es uno de los teléfonos más resistentes que hemos visto en los últimos meses.