Hace unos meses que ya conocemos y venimos oyendo hablar de un proyecto de Google hecho realidad, Android One. La idea era simple, llevar el sistema operativo Android a algunos países emergentes para que puedan disfrutar de todos los servicios a precios reducidos, por lo que la mayoría de móvil los podemos encontrar a precios asequibles. Hoy abríamos con la noticia del lanzamiento del primer Android One en España, que llegaba de la mano de bq y bajo el nombre de bq Aquaris A4.5 4G con un precio de lanzamiento de 169 euros y con botones virtuales, como le gusta a Google.
Sus características como bien hemos comentado esta mañana, están encaminadas a la gama media-baja de lo que podemos encontrar actualmente en el mercado, por lo que podríamos decir que está diseñado para aquellos que no le dan un uso intensivo a su dispositivo Android. Habrá que ver cómo funciona una vez en el mercado, ya que en el mismo intervalo de precios se mueven otros interesantes dispositivos como la gama Motorola Moto G. Como curiosidad, bq vende tanto la versión Android One como la versión convencional de su terminal de 4,5 pulgadas por el mismo precio, 169 euros. Si una vez llegados hasta aquí no te queda demasiado claro el tema de Android One y sus diferencias con Android convencional tal y como lo conocemos, este es tu artículo.
Android One vs Android
Comencemos desde el origen. Android One salió a la luz para llevar Android a aquellos países que no son demasiado potentes económicamente hablando, para que todo aquel que lo desease pudiese tener un dispositivo con el sistema operativo Android. En términos de software nos encontramos con una versión igual al Android convencional, pudiendo afirmar que se trata más bien de una gama de teléfonos. Las versiones se van actualizando al igual que lo hacen por ejemplo los terminales Nexus, pero se podría decir que son como versiones paralelas optimizadas especialmente para estos teléfonos de entrada.
Aquí tenemos sin duda una de las principales ventajas que tiene Android One respecto al resto de dispositivos económicos, ya que el responsable de sus actualizaciones es directamente Google, sin tener que pasar por operadores ni fabricantes. Además, se comprometen con el cliente a mantener actualizado el terminal durante como mínimo 18 meses, aspecto a valorar y más en un terminal que se encuentra por debajo de los 200 euros.
Requisitos mínimos de Android One
A pesar de que Google nunca ha dicho que existan unas especificaciones mínimas para los terminales Android One si es verdad que existen algunas coincidencias entre todos los terminales de esta gama. Entre ellas encontramos: Procesadores Mediatek de cuatro núcleos en su mayoría acompañados de 1 GB de memoria RAM y unas 4.5 pulgadas de pantalla. En almacenamiento interno hay terminales que cuentan con la cantidad de 4 GB, pero por ejemplo el bq viene con 16 GB ampliables mediante tarjeta microSD, característica muy común en estos dispositivos.
Resumiendo, podríamos decir que si no quieres desembolsar una gran cantidad económica en la compra de un terminal Android y además quieres contar con las última actualización posible, Android One se postula como una de las grandes alternativas ofreciéndonos una buena experiencia dentro de los límites de nuestras capacidades del Android en cuestión.