Móvil Realme 6











Resumen de características
La compañía de moda acaba de lanzar en marzo de 2019 las respectivas actualizaciones de la serie Realme 5, los Realme 6 y Realme 6 Pro. El más asequible de los dos, el Realme 6, presenta una pantalla de gran tamaño con una frecuencia de actualización de 90 Hz, la primera vez que encontramos estas características en un móvil asequible de la firma y nunca antes visto en este segmento de presupuesto. Este teléfono también incluye el poderoso procesador MediaTek Helio G90T, era exclusivo del Redmi Note 8 Pro desde hace bastante tiempo.
Si tenemos en cuenta que el precio del teléfono está a partir de 170 euros, está claro que el Realme 6 optó a convertirse en una de las mejores opciones más económicas que se presentaron en 2020. Y lo hace presumiendo de todo tipo de características como veremos a continuación.
Tiene pantalla para todo
El Realme 6 tiene una pantalla de 6.5 pulgadas que es idéntica a la que tenía el Realme 5. Sin embargo, el nuevo teléfono no tiene una muesca, ya que en su lugar encontramos una pequeña perforación en la esquina superior izquierda que da cabida a una pequeña lente frontal, algo no muy común en móviles de este segmento de precio.
La pantalla tiene unos biseles delgados en el costado, pero la barbilla inferior es considerablemente más gruesa. Las esquinas del Realme 6 son redondeadas y permiten un mejor agarre del smartphone.
En términos técnicos, hablamos de una pantalla LCD Full HD +, algo que faltaba en el modelo anterior que estrena una frecuencia de actualización de 90Hz que ayuda al teléfono a ofrecer una experiencia fluida a la hora de reproducir contenidos, navegar por el teléfono y jugar a juegos. Realme permite cambiar manualmente entre 60 Hz y 90 Hz, pero se puede establecer el modo automático para que sea el propio teléfono quien lo decida. Realme dice que el brillo máximo de este panel supera los 400 nits.
La pantalla tiene una densidad de 405 ppp y, gracias a la pantalla perforada, el Realme 6 tiene una relación pantalla-cuerpo de 90.5 por ciento. La misma está protegida por Corning Gorilla Glass 3.
En cuanto a software, existen muchas posibilidades en el sistema operativo del terminal basado en Android 10 y al que no le falta Realme UI. Así, por ejemplo, es posible dar uso a un Modo oscuro que es de agradecer ya que la fatiga visual se reduce. Aparte, se puede seleccionar la frecuencia que se utiliza ya sea 60 o 90 Hz, por lo que se tiene un mayor control sobre el consumo de este componente.
Además, hay posibilidades de ajustar la temperatura del color, pero solo con dos opciones preconfiguradas. De todas formas, la pantalla consigue colores bastante reales, aunque algo menos intensos que los que tienen los paneles OLED. En lo que tiene que ver con el uso del brillo automático, hemos de decir que el funcionamiento nos ha parecido muy bueno, con un cambio rápido cuando se necesita. Incluso, supera sin problemas los 400 nits.
Al dar uso al Realme 6 con las diferentes opciones de gestión del color, creemos que la mejor configuración posible es dar uso a una temperatura más fría, ya que el ajuste y realismo es mucho mejor.
Su potencia puede sorprendernos
Bajo el capó de este teléfono de la firma china nos encontramos al procesador MediaTek Helio G90T, un poderoso chipset que tiene dos núcleos Cortex-A76 funcionando a 2.05 GHz y otros seis núcleos trabajando a 2.0 GHz.
A nivel gráfico el protagonismo se lo lleva una GPU Mali-G76, que no es la más potente del mercado, pero que nos va a ofrecer grandes prestaciones.
Al poner a trabajar las pruebas de rendimiento con este terminal, descubrimos que el procesador permite que el terminal tenga muy buena soltura en, prácticamente, cualquier situación. Incluso con varias aplicaciones al mismo tiempo
Las variantes de memoria disponibles en las que podremos comprar el teléfono de Realme son 4, 6 y 8 GB de RAM, mientras que el almacenamiento parte de los 64 GB y puede llegar hasta 128 GB. Además, tiene compatibilidad con tarjetas MicroSD.
La RAM demostró ser lo suficientemente rápida a la hora de gestionar información pero, especialmente, el almacenamiento se demostró eficiente. Incluso, por encima de lo esperado en muchas situaciones.
Al ejecutar diferentes juegos, como Asphalt por poner un ejemplo, comprobamos que la combinación de SoC y GPU es efectiva. No hay ‘lag’ evidente de primeras, aunque cuando lo utilizamos en largas sesiones de juego, la cosa cambia. Aunque, para nada decepciona. Además, es sorprendente el control de la temperatura que tiene este dispositivo.
Dentro del apartado de las conexiones físicas del Realme 6, vemos que luce un puerto USB Tipo C. También tiene un sensor de huellas ubicado en el lateral del teléfono, sobre el botón de encendido. Y, algo en lo que nos tiene acostumbrados la firma asiática es que trae también un puerto jack de 3.5 mm para auriculares.
A nivel inalámbrico, el smartphone cuenta con compatibilidad con redes 4G, es decir, no tiene 5G. En cuanto al Wi-Fi, tenemos compatibilidad con redes 2,4 GHz y 5 GHz, además de Bluetooth 5.0, GPS y Radio FM. También viene acompañado del querido chip NFC con el que podremos realizar pagos.
Cámara
Empezando por la parte delantera, nos encontramos una cámara selfie de 16 MP, que viene integrada dentro de ese pequeño agujero que protagoniza el frontal del dispositivo que ya os habíamos mencionado anteriormente.
Además, podemos utilizar el sistema de reconocimiento facial integrado en este sensor, se ilumina un anillo alrededor del agujero dándole al móvil un toque bastante original. Esta lente es capaz de grabar vídeo a 1080p y 30 FPS. Y no se queda ahí la cosa, ya que también cuenta con funciones de IA para poder darle más ‘vida’ a los retratos.
Si nos ponemos a analizar el sensor principal de su cámara trasera vemos que nos ofrece una resolución de 64 megapíxeles, que tiene algo de ganancia de detalle, pero lo cierto es que no es especialmente destacable.
Aunque, por lo general, las fotos que se hacen con el realme 6 de forma automática y con la IA activada son bastante buenas, mostrando un amplio rango dinámico y poco ruido. Algo que nos ha parecido importante es que el postprocesado no es malo y, además, es barato y rápido, lo que es de agradecer. Además, podemos apreciar como en la siguiente imagen, al utilizar el modo retrato, conseguimos un buen desenfoque.
Además, podemos decir que el gran angular funciona especialmente bien, ya que no hay fallos evidentes en los laterales de las imágenes y la definición es bastante buena. Y no nos podemos olvidar de mencionaros que su sensor macro es preciso. Si nos vamos al modo noche, lograremos fotos aceptables, pero con falta de detalle.
En los vídeos hay que decir que la falta de estabilización óptica se deja notar. Bien es cierto que el uso del zoom es mejor de lo que esperábamos, pero hay movimiento que no corrige su software. Además, es importante que os mencionemos que puede grabar vídeos a resolución 4K y FHD+ a 60 FPS.
Su batería es lo que más nos gusta
El departamento de batería tampoco se ha pasado por alto. Realme ha aumentado la capacidad de la batería a unos respetables 4.300 mAh, pero lo más importante es que la compañía ha puesto en funcionamiento el sistema de carga rápida de 30 W VOOC Flash Charge 4.0, que debería cargar toda la batería en menos de una hora.
Y es que, una de las grandes sorpresas que nos dio este terminal, son los tiempos que ofrece al utilizar. Además, lo que aguanta con una carga son muy similares tanto con 60 como con 90 Hz como frecuencia de la pantalla.
Con un uso habitual y con el brillo en automático conseguimos siempre un día y medio de uso sin muchos problemas, lo que es una buena marca y demuestra que el fabricante ha acertado con la batería integrada.
En lo que tiene que ver con el uso constante de la pantalla encendida, si tenemos el brillo a la mitad su potencia, los tiempos de uso al ver una película son realmente buenos, con cifras que superan casi siempre las siete horas.
En lo que tiene que ver con la carga rápida, que ofrece al dar uso al adaptador de corriente que viene en la caja con el terminal, podemos ver cómo se aprovecha de una potencia máxima de 30 W.
El caso es que, en un tiempo estándar de media hora, que siempre es una referencia, se consigue una carga de hasta el 70% como máximo. Lo normal es que sea algo menos, sin bajar nunca del 65%, por lo que hay que decir que el comportamiento es realmente bueno.
Lo malo del realme 6
No son muchas las pegas que podemos ponerle a este terminal de realme. Pero, aunque nos haya gustado, hemos probado de mil y una forma este smartphone de la firma china para decir que este teléfono sigue estando más caro de lo que realmente merece la pena pagar.
Aunque tiene buenas características, como su procesador, su autonomía o pantalla. Sin embargo, si comenzamos por su rendimiento, está claro que no es un móvil gaming, ya que cuando estamos durante horas y horas jugando, notaremos cierto ‘lag’ o retardo en su rendimiento.
Si seguimos analizando, a pesar de que tiene una cámara principal de 64 megapíxeles, vemos como el detalle no es el mejor del mundo. Además de que el balance de blanco de las imágenes podría ser mucho mejor para la configuración de cámaras que trae este dispositivo.
Y aunque las fotos con desenfoque se comportan bastante bien, con algún sufrimiento en interiores, pero no es algo especialmente grave y lo cierto es que es de lo mejor en su rango de precio. Si nos vamos a los vídeos, notaremos la falta de estabilización óptica, y es algo que se deja notar mucho.
Por último, si nos vamos a su batería, a pesar de que nos ha sorprendido, si utilizamos el panel del móvil con un nivel de brillo al máximo, por ejemplo, viendo una película. La autonomía baja, y mucho, superando por poco las 5 horas de uso de la pantalla encendida. Además, si nos vamos a su carga, vemos que no ofrece la tecnología inalámbrica.
¿Su compra merece la pena?
Por el precio en el que se encuentra este dispositivo, es una opción que hay que pensarse. Debemos tener claro que es un smartphone realme de 2020, por lo que a este gama media le faltan ciertas características que podríamos echar en falta, como una carga rápida más veloz, mejores cámaras o conexión 5G. Pero, para ser del año que es, y valiendo unos 170 euros aproximadamente, es un poco caro, pero sigue siendo una buena opción.
En cambio, si buscamos un smartphone que nos dure varios años, es el momento de mirar otros gama media que se encuentran más o menos a este precio. Incluso, encontraremos opciones interesantes dentro del catálogo de la marca china, como el realme 8.