A quien no le gusta disfrutar de una tarde en la playa o la piscina, aunque no es la época favorita de todo el mundo, sí que nos ofrece un descanso que no comparable con otras cosas. Por el contrario de cómo nos afecta a nosotros, están nuestros smartphones, los cuales como posiblemente has notado sufren más durante el verano y la batería del móvil nos lo hace saber. Y más sufrirán si no sabes el tiempo que tiene el smartphone, así como su batería.
Aunque nuestro uso siga siendo el mismo tanto si estamos a -5 grados como cuando estamos a 35 grados, el móvil no tiene la capacidad de adaptación que podemos tener nosotros. Para que sepas los efectos que tiene y las maneras que hay de cuidar la batería ante estas altas temperaturas te mostramos los consejos a seguir. La próxima vez que dudes entre llevar la sombrilla a la playa no solo pensarás en ti, lo harás también en tu móvil.
¿Por qué baja más rápido la batería en verano?
Este suceso tiene una explicación científica muy sencilla de comprender y que se centra en el litio que componen las baterías de los smartphones. La temperatura óptima para estas baterías de litio se concentra entre los 10 y los 20 grados, la temperatura que solemos tener los meses de primavera y otoño.
Por lo tanto si nuestro móvil tiene que soportar las temperaturas que en España tenemos en verano, estará rebasando sus recomendaciones. Esto provoca que la temperatura de la batería se vea afectada, se caliente y por lo tanto el funcionamiento de la misma se merme. Los sistemas de seguridad que incluyen los móviles consiguen que la batería no sufra daños mayores pero para compensarlo la batería disipa el calor a través de la densidad energética y también energía.
Aunque no hay un estándares válidos para todas las baterías y dependerá de su construcción, capacidades del modelo en concreto o la temperatura a la que lo expongamos, podemos perder hasta un 30% de batería en verano si el móvil pasa horas aguantando altas temperaturas.
El rendimiento de la batería se recupera
Es cierto que esto nos debe preocupar porque de forma inmediata nos hace perder autonomía, pero en un medio plazo no supone que el móvil no vaya a poder darnos tantas horas de pantalla como antes de exponerlo al sol. De todas formas si el móvil pasa día sí y día también frente a 40 grados, terminaremos comprobando que aunque haya llegado el otoño, nuestro móvil ya no tiene la batería de la que disfrutamos anteriormente.
Otros efectos del verano en el móvil
Lo más importante de todo es el calor, pero no es lo único que puede habernos hecho notar como la batería del móvil dura menos en verano. Al viajar y recorrer lugares diferentes a los habituales nos enfrentamos a cambios constantes en la cobertura, búsqueda de conexión para el dispositivo y por lo tanto aumenta el consumo de batería.
No mantener los hábitos constantes en las vacaciones también puede volver algo loca a la inteligencia artificial de nuestro dispositivo y hacer que no consiga optimizar sus rendimiento como cuando teníamos una rutina. También es muy probable que utilices el GPS más a menudo, la cámara y las redes sociales, algo que también se notará.
Cómo hacer que nos afecte menos el calor
Las recomendaciones que tenemos que tener siempre en mente durante el verano con la intención de que la batería nos dure lo máximo posible están centradas en que el calor no afecte a nuestro móvil. Llevarlo a la playa o la piscina es un riesgo y si lo hacemos debemos llevarlo bien protegido en una mochila que además debería estar bajo la sombra.
Utilizarlo al sol aunque sea caminando también es un efecto negativo porque recibe los rayos, una alta temperatura y además las exigencias que le estamos pidiendo. No podemos olvidarnos tampoco de las opciones para ahorrar batería que hay en los teléfonos, las cuales resultan positivos si solo queremos llevarnos el móvil para estar comunicados.