Nuestros móviles están lleno de puertos y sensores diferentes. Sin embargo, solo un puñado de privilegiados pueden presumir de contar con un puerto infrarrojos. Aunque esta opción se remonta a los mejores tiempos de gloria de los móviles Nokia, ni siquiera en pleno 2020 encontramos muchos terminales con esta opción. Sin embargo, hay un método para que cualquier móvil pueda añadir un puerto infrarrojos para convertirse en un auténtico mando a distancia.
Tener un puerto infrarrojos en el móvil puede convertirlo en un mando para la televisión, mucho más preciso y rápido que las soluciones que se ofrecen vía Wi-Fi. Si nuestro móvil no cuenta con esta opción, tendremos que hacer uso de un periférico específico que aprovechará algún puerto de nuestro móvil para dotarle de esta tecnología. La pega es que ese puerto en concreto, que puede ser el jack de 3.5mm para auriculares o el puerto de carga, quedará en desuso mientras usamos los infrarrojos.
Añadir infrarrojos al móvil
Si tienes jack de auriculares
El puerto para auriculares se está perdiendo a pasos agigantados. La gama alta prácticamente lo ha descartado, mientras que cada vez hay más dispositivos de gama media que lo integren. Si contamos con un móvil que disponga de esta opción, quizá sea una mejor forma de no ocupar el puerto de carga mientras añadimos la posibilidad de infrarrojos.
En este caso, bastará conectar el accesorio, ya que la energía necesaria será tomada del puerto de auriculares. Esta opción es muy económica y tiene un precio de unos seis euros en Amazon.
Sin jack de auriculares
En este caso, tendremos que hacer uso del puerto de carga de nuestro dispositivo para añadir infrarrojos a nuestro móvil. Por suerte existen herramientas como GuDoQi, que se conecta a puertos USB-C, microUSB o Lightning para que nuestro móvil sea un mando a distancia para la TV o cualquier otro aparato electrónico de la casa como usar el móvil como mando para el aire acondicionado o un proyector.
Este dispositivo tiene un alcance de 12 metros y según el fabricante, controla el 99,9% de los dispositivos que funcionan mediante IR. Comenzará a emitir infrarrojos en cuanto lo conectemos al puerto de carga de nuestro móvil Android o iPhone. Su precio es de 12 euros.
La app necesaria
De nada sirve conectar estos dispositivos si no tenemos el apoyo de una app. En este sentido, es posible que no todas funcionen igual en todos los móviles. Os dejaremos justo debajo con las dos que mejores resultados ofrecen tanto para iPhone como para Android. Una vez hemos conectado nuestro terminal, basará con iniciar la app y seleccionar el modelo de televisión que tengamos, para poder comenzar emitir los infrarrojos en la frecuencia de nuestro modelo de televisión.