El uso moderado de los tablets seducirá las mentes de nuestros hijos

La llegada de los teléfonos móviles y de los tablets al mundo del gran consumo ha provocado que no solamente los más mayores, sino los más pequeños de la casa pueden acceder a este tipo de aparatos de una manera habitual. La realidad es que su manejo pasa si por una pantalla táctil en la que interactuamos con los dedos y que por lo general sorprende y seduce a nuestro cerebro por la calidad y cantidad de información que nos ofrece.
Sin duda que las ventajas son enormes, pero hay ciertos peligros en el horizonte que conviene atajar. No podemos olvidar que un niño de prescolar puede pasar hasta seis horas al día delante de alguna pantalla, un dato cuando menos inquietante. Según el Comité Ejecutivo de la Academia Americana de Pediatría hay jóvenes que elevan esa cifra hasta las 9 horas cuando se adentran en la pubertad.
Forzar la atracción mental
Según especialistas como Dimitri Christakis, director del Centro de Salud, Comportamiento y Desarrollo Infantil del Children Seattle Hospital, el uso intenso de dispositivos electrónicos en cierta manera fuerzan el desarrollo mental de los más pequeños o cuando menos le hacen vivir una realidad quizá demasiado veloz. Está aceleración provoca que los más pequeños o mejor dicho su cerebro tengan mayores dificultades a la hora de concentrarse en cualquier actividad digamos normal del día a día. Christakis asegura que los más pequeños pueden tener un comportamiento fuera de lo normal de la vía dopaminérgica, una especie de sistema de recompensas del cerebro. Es decir los tablets o móviles sorprender de una manera tan potente que será difícil que le niño se sorprenda con algo en la vida real. Algo que desee luego no contribuirá positivamente a la evolución del niño en un futuro.
Uso moderado
Cómo era de esperar la solución pasa por limitar el uso de los tablets y teléfonos móviles a los más pequeños de la casa, de modo que no pierdan costumbres típicas de cualquier ser humano como es la conversación o el disfrute de los juguetes de toda la vida. De hecho los investigadores más eruditos en el tema aseguran que media hora al día de uso de un tablet puede ser una medida idónea para que el niño siga su evolución natural.
Queda claro que los tablets y los móviles son elementos necesarios no solo de los adultos, sino de los más jóvenes, pero también lo es que conviene aplicar un uso controlado y medido de los mismos. El objetivo es que el cerebro de los más pequeños aproveche las ventajas que aportan estos equipos y obvie los riesgos de involución en la atracción hacia las cosas que provoca un uso excesivo de los mismos.