Queramos o no, lo cierto es que no descubrimos algo nuevo si decimos que la batería es uno de los elementos más sensibles de nuestro móvil. Además, su vida útil y degradación en el tiempo dependen de muchos factores, incluyendo el propio uso que le demos. Pero, por mucho que cuidemos este componente, precisamente esa ‘vida útil’ ya nos revela que su duración y rendimiento no son para siempre. Además, este elemento comenzará a dar signos inequívocos de este final.
En muchos foros especializados, e incluso en MovilZona, os recomendamos en muchas ocasiones las mejores maneras para aumentar la vida de la batería del móvil. Pero, aun así, llegará un momento en que notaremos que algo no funciona como debería. Por desgracia, estos elementos internos de los smartphones de hoy no se pueden sustituir de manera tan sencilla, al menos para el usuario final, en comparación con las extraíbles de hace unos años.
Averigua si algo va mal
Estos componentes de los smartphones se integran en los móviles en forma de pequeñas bolsas de aluminio selladas. Están diseñadas para aguantar un número limitado de ciclos de carga, teniendo en cuenta que un ciclo de carga cuenta como el pico máximo y mínimo de su rendimiento desde cada carga. Hay varias formas para poder optimizar estos ciclos de carga, pero en ningún caso extenderán la vida de la batería mucho más allá.
Para nuestra fortuna, hay varios indicios que nos ponen sobre la pista de que nuestra batería puede necesitar un cambio. Generalmente, y en circunstancias normales, estos síntomas no deberían aparecer antes de los 18 meses de uso. Sin embargo, pueden aparecer antes o después, incluso muy pronto, en caso de que estemos ante un problema de fábrica.
Se agota antes de tiempo
Es el primer síntoma que nos hará sospechar que algo no va bien. Al notar que se descarga más rápido que antes, estaremos seguramente ante el final de su vida. Si antes llegábamos, por ejemplo, a la mitad del día con un 60%, y ahora ocurre lo propio con un 30% de carga, es señal de que se está agotando su ciclo de vida.
En un caso puntual, puede ser causa de alguna aplicación, pero es algo que podremos descartar fácilmente probando el smartphone en Modo Seguro. Para ello reincida el equipo u mantén pulsado el botón de bajar volumen hasta que aparezca el logotipo de Android. Entonces debes usar el smartphone de forma normal y ver si te dura más que antes. De ser así, simplemente desinstala esas apps que hayas instalado recientemente y vuelve a iniciar el smartphone de forma normal.
No se carga completamente
También podremos notar que no se carga por completo. No importa el tiempo que dejemos enchufado el dispositivo, que nunca llegará al 100%. Esto puede ser síntoma de una degradación, al no contener suficiente energía eléctrica para que los sensores de nuestro móvil registren una carga completa. Además, será uno de los síntomas más claros que nos advertirán de que este componente del dispositivo móvil ha llegado a un punto en el que, probablemente, sería mejor cambiarlo.
Aun así, antes de ir al servicio técnico para que encuentren una solución al problema de la batería del smartphone, no estaría de más que calibrásemos la celda. Para ello, solo tienes que cargar el smartphone hasta el 100%, aguantando un poco más cuando se alcance este nivel. Después espera a que el móvil se apague del todo y, ahora, déjalo sin usar unas cuantas horas. Hay marcas que recomendar esperar de 3 a 4 horas, pero cuanto más puedas, mejor. Finalmente vuelve a cargarlo al 100%. De esta manera, si este componente interno del móvil se había descalibrado, habremos hecho correctamente la calibración para que no siga teniendo fallos al cargarse o de autonomía.
La carga baja de golpe
Este síntoma suele ser de los que más ponen de manifiesto el problema por lo llamativo que es. El terminal perderá de golpe varias cifras en el porcentaje de carga. Es posible que lo quitemos del cargador al 100% y notemos que de golpe baja al 90% o al 80%. Por supuesto, para controlarlo mejor, debes habilitar que veamos cuánto le queda a la celda desde los ajustes del teléfono.
La pérdida de puntos porcentuales de inmediato es algo normal, pero las caídas tan grandes revelan que la batería está llegando a su fin. De hecho, el problema es más grave aún si cuando se alcanzan valores inferiores (un 20 o un 15%) el smartphone se apaga de repente. Por esto mismo, es importante que estemos atentos en todo momento al estado del porcentaje de energía del dispositivo cuando tenemos este tipo de problemas en el smartphone. Para que podamos visualizarlo sin problemas, tendremos que habilitar la opción con la que conseguiremos que se muestre el porcentaje en la barra de estado del terminal. Y, para conseguirlo, estos serán los pasos que deberemos seguir:
- Vamos a la app de ajustes del teléfono.
- Tocamos sobre Batería.
- Dentro de este menú, tendremos que activar la opción Porcentaje de batería.
La apariencia estética
En este caso, nada como una exploración estética para salir de dudas. En una gran mayoría de los casos, estos componentes pueden hincharse como consecuencia de la falta de eficiencia en las reacciones químicas de su interior debido al desgaste que los componentes, no solo sufren con el paso del tiempo, sino por un posible error durante su fabricación.
Esto provocará que la parte trasera de nuestro móvil se hinche, incluso puede llegar a despegar la tapa trasera. Si esto ocurre, tendremos que proceder a su cambio de forma inmediata, ya que en este caso incluso corremos peligro de que las reacciones químicas acaben desencadenando en la combustión de este componente. Aunque, en los últimos terminales, al contar con un cuerpo ‘unibody’, será más difícil apreciar este detalle. Pero, al tocar la parte trasera o al apoyarlo sobre una superficie plana, podremos llegar a conseguir comprobar si está o no hinchada.
Un calor excesivo
Hay varias cosas que podrían llevar a que tu teléfono se sobrecaliente. Dejarlo bajo la luz solar directa o en un espacio demasiado cálido, como el coche, son algunas de las causas que pueden provocar las altas temperaturas en tu teléfono. Sin embargo, si no estás haciendo nada de eso, estás en un entorno medianamente fresco, y tu smartphone emite mucho calor, seguramente tengamos un problema con la batería del mismo.
La forma en que usas tu teléfono y la frecuencia con la que lo usas, puede tener un impacto en la temperatura de tu teléfono. Si estás jugando durante mucho tiempo o usas el smartphone durante largas sesiones, eso puede hacer que la batería de tu teléfono trabaje horas extras y haga que tu teléfono se sobrecaliente. Lo mismo sucede cuando sometemos a este componente a una sobrecarga, dejando el teléfono en el cargador incluso después de que haya alcanzado el 100 %.
Si el móvil no está al sol, no lo estas usando con mucha frecuencia, está desconectado del cable, y aún así n tas que la parte trasera está demasiado caliente, lo más seguro es que la batería no esté a pleno rendimiento y debas cambiarla más pronto que tarde.
¿Puede llegar a ‘explotar’ mi batería?
El famoso fenómeno en el que explota nuestra batería, una vez estemos notando que la misma se están hinchando es una de las cuestiones que más se ha temido a lo largo del tiempo en lo que a la salud de las mismas se refiere. Y sí, es un hecho que nuestra batería puede llegar a explotar debido a que varios de sus componentes pueden llegar a ser inflamables por sus compuestos químicos y pueden acabar provocando que la misma acabe por explotar. Y además, este tipo de explosiones en las baterías suelen ser tanto peligrosas como tóxicas por lo que tendremos que tener mucho cuidado a la hora de vigilar nuestras baterías al momento en el que se están hinchando.
Para que esto no ocurra, lo ideal será cuidar al máximo posible la salud y la preservación de dichas baterías, intentando que tengan ciclos de carga estables y sobre todo, que los cables que usemos para cargarlas sean de una buena calidad para que no acaben dañando colateralmente la misma. En este sentido, tampoco tendremos que dejar nuestro móvil cargando durante las noches de manera reiterada debido a que la batería puede sufrir fallos en los sensores de sobre tensión, por lo que si estos fallan durante la noche, podremos tener un grave problema.
El móvil se apaga aleatoriamente
Es cierto que este fallo puede provenir de otro componente como el procesador, la placa base, el botón de bloqueo o incluso de algún error que podamos encontrar en el sistema operativo. Pero nunca podemos descartar que la celda de energía que tenemos en el móvil sea la culpable de que aparezca esta incidencia en el móvil.
Lamentablemente, si ya has restaurado el smartphone y arreglado cualquier fallo con el sistema operativo, es muy difícil cuál es la pieza de hardware que está provocando el fallo por lo que te tocará acudir a un centro de reparaciones.
Tu smartphone se chiva
Muchos teléfonos tienen una opción en la configuración que permite comprobar el estado de la batería. Esto te dará una indicación de cuánto tiempo le queda de vida útil a la batería y si necesita ser reemplazada.
No obstante, mientras que en los iPhone de Apple encontramos esta opción con un porcentaje, en los smartphones que funcionan con el sistema operativo de Google, simplemente suelen advertirnos si es buena, muy buena, mala, o muy mala. Además, no siempre es tan fiable como podríamos desear pues puede que se cumplan cualquiera de los problemas que hemos mencionado anteriormente y que el indicativo de la herramienta de nuestro móvil no señale que le pase nada al teléfono.
Qué hacer si la batería está dañada
En el caso de que esté completamente rota, o su degradación sea tan grande que apenas dure unas horas encendido, será el momento de ponernos manos a la obra. Básicamente, ante estas situaciones solo podremos hacer dos cosas al respecto, y son las siguientes.
Pon una nueva
Si hemos llegado a la conclusión de que este componente del dispositivo móvil está totalmente estropeado, es el momento de que lo reemplacemos sin mayor temor. Antiguamente, el cambio de la batería era muy sencillo, ya que podíamos abrir la carcasa trasera del terminal y retirarla fácilmente sin ningún tipo de dificultad. Sin embargo, ahora mismo, los cuerpos de los teléfonos son todo en uno, por lo que retirarla será más complicado. Por lo tanto, si cuentas con los conocimientos suficientes os aconsejamos que cambiéis por vuestra cuenta, tan solo deberéis encontrar una que sea compatible original y compatible con vuestro smartphone.
Si, finalmente, decides que puedes cambiarla por tu cuenta, deberás comprar con un kit de herramientas para poder llevar a cabo el reemplazo de este componente. Después, deberás seguir este proceso (aunque, dependiendo del modelo, el paso de retirar del interior este componente podría variar):
- Aplicamos calor al smartphone (lo podemos hacer con una plancha de calor, si es que tenemos, o incluso con un secador a potencia mínima durante algunos segundos). No obstante, deberemos dispersarlo por toda la parte posterior.
- Ahora, con ayuda de una ventosa que incluyen los kits de reparación, vamos a tirar de la pared trasera del terminal y con las agujas, iremos abriendo camino por los bordes entre el marco y la parte trasera del dispositivo.
- Deberemos tener mucha paciencia y hacerlo con cuidado para no dañar ningún elemento del teléfono. Luego, quitamos los tornillos de la parte superior e inferior, para quitar todos los embellecedores.
- Con cuidado y las herramientas de plástico incluidas, desconectamos el conector de la batería para que deje de tener corriente. Nos ayudaremos de alcohol isopropílico para poder despegar la batería, que va fijada al teléfono. Para ello, hay que dejarlo actuar unos 5 minutos.
- Ahora, desembalamos la nueva y añadimos un pegamento especial para estos componentes. A continuación, colocamos la nueva en la misma posición en la que estaba la anterior y la conectamos a la placa base.
- Por último, tendremos que atornillar la estructura y comprobar si el smartphone enciende. Ponemos pegamento especial para fijar la parte trasera y ejercemos presión en ella durante unos segundos.
Acude al soporte técnico
En el caso de que no seamos capaces hacerlo por nuestra cuenta, o no tengamos ni idea de cuál es la idónea para el teléfono, tranquilo. Solamente deberemos ponernos en contacto con un servicio técnico especializado, podrá ser tanto el oficial de la marca como una tienda de nuestra zona que se encargue del reemplazo de este componente del smartphone.
Dependiendo de si tu smartphone está en garantía o no, te tocará pasar por caja y hacer frente al pago por el reemplazo de la batería del dispositivo móvil. Y es que cada marca ofrece un periodo diferente que puede ser de 6 meses a 3 años, pero eso solo lo sabrás consultando las condiciones de la garantía que ofrece el fabricante de tu teléfono móvil.
Muchos lugares ofrecen reparaciones el mismo día, siempre y cuando la batería de su dispositivo esté en stock. Pero en algunos casos tendrás que enviar tu teléfono por correo para obtener una reparación, lo que podría dejarte sin él durante días, aunque es posible que puedan dejarte un teléfono de préstamo mientras dura el arreglo.
En cuanto al precio, estás de suerte. Las baterías son los componentes más baratos de reparar y, al no depender de chipsets, no están sometidos a las subidas de precio derivada de la alta demanda de los procesadores. Dependiendo de la antigüedad de tu teléfono, y de la marca, será más barata o más cara, pero por lo general te costarán de 30 a 80 euros, sin contar con la mano de obra.
Todo va bien, ¿cómo lo evito?
Puede que hayamos tenido la suerte de que este elemento interno del smartphone todavía esté en óptimas condiciones. Sin embargo, nunca hay que relajarse, por lo que deberemos tener en cuenta una serie de aspectos con el objetivo de cuidar la batería del móvil lo mejor posible para que nos dure el máximo de tiempo. Además, no solo contaremos con consejos generales para ello, sino que también existen funciones en los móviles que nos lo pondrá muy fácil.
Consejos de uso
La vida útil de la batería de un teléfono móvil es un aspecto crucial que afecta directamente la experiencia del usuario. Aunque es inevitable que la batería se degrade con el tiempo, existen múltiples estrategias que pueden mitigar este proceso y maximizar su duración. Como decimos, este elemento interno de los teléfonos está abocado sí o sí al final de su vida. Sin embargo, podremos poner en marcha las consideradas ‘buenas prácticas‘ o costumbres que, si bien pueden alargar ligeramente su vida, al menos no hará que se degrade antes de tiempo.
Además de evitar que la carga caiga por debajo del 20% o exceda el 100%, es recomendable gestionar el brillo de la pantalla, manteniéndolo lo más bajo posible sin sacrificar la comodidad visual. Las aplicaciones en segundo plano no solo consumen recursos del sistema, sino que también drenan la batería, por lo que es aconsejable cerrarlas regularmente.
Eliminar las aplicaciones que son grandes consumidoras de energía puede tener un impacto significativo en la durabilidad de la batería. Asimismo, es importante prestar atención a los cambios de temperatura, ya que los extremos pueden dañar la batería de manera irreversible. El uso del cargador oficial garantiza que la batería reciba la corriente adecuada y previene daños potenciales. Los modos de ahorro de energía son herramientas útiles incorporadas en los dispositivos que optimizan el uso de la batería cuando es necesario.
Mantener el sistema operativo actualizado asegura que se beneficiará de las últimas optimizaciones de energía y seguridad. Conectar el dispositivo a redes Wi-Fi reduce el uso de datos móviles, lo que a su vez puede disminuir el consumo de batería. Desactivar conexiones inalámbricas innecesarias como Wi-Fi, Bluetooth o GPS cuando no están en uso también contribuye a este fin. Del mismo modo, desactivar sonidos y vibraciones innecesarios, evitar el uso de cargadores no oficiales, no cargar el teléfono durante toda la noche, evitar la exposición a temperaturas extremas, utilizar el modo avión en áreas con señal débil, desactivar la sincronización automática de aplicaciones, optar por fondos de pantalla oscuros, desactivar notificaciones no esenciales, limpiar la memoria del teléfono con aplicaciones específicas, no exponer el dispositivo al sol directo, evitar la descarga completa de la batería, usar auriculares en lugar del altavoz, desactivar la auto-rotación de la pantalla y desactivar funciones de seguridad biométricas cuando no se usan, son todas prácticas que contribuyen a prolongar la vida de la batería.
Estas medidas no solo extienden la vida útil de la batería, sino que también promueven un uso más consciente y eficiente del teléfono móvil. Al adoptar estos hábitos, los usuarios no solo protegen la salud de su dispositivo, sino que también pueden disfrutar de una mejor experiencia de usuario a largo plazo. La clave está en la moderación y en el uso inteligente de los recursos del dispositivo, asegurando así que la batería mantenga su rendimiento óptimo durante el mayor tiempo posible.
Usa siempre cargadores y cables originales
Cuando sufrimos un problema con este elemento, normalmente pensamos que es culpa de este componente. Pero, la experiencia, nos dice que, en la mayoría de los casos, el fallo está en el propio cargador o cable que utilizamos. Por lo tanto, prueba a intercambiarlos con otros que funcionen correctamente en otros dispositivos.
Comprueba si ahora tu móvil sí que alcanza el 100% de energía. Además, será mejor que utilicemos un cargador original, ya que podríamos caer en la trampa de que no sea 100% compatible en cuanto al voltaje que nuestro teléfono necesita. Aunque ahora mismo haya muchas marcas que no adjuntan este componente en la caja del dispositivo, es más que recomendable comprar uno 100% oficial por este motivo.
Una app puede ayudar
Hay aplicaciones especialmente desarrolladas para contarnos en detalle lo que ocurre con este componente. Una de las más populares es Accubattery, que permite controlar el amperaje y la capacidad total de nuestra batería en el momento de la carga, por lo que saldremos de toda duda para saber si la carga se está produciendo correctamente y si la salud de nuestra esta es la correcta.
De esta forma podremos ver en tiempo real la velocidad de carga, el tiempo restante para que llegue al 100% y un resumen del histórico de cargas. Toda esta información, teniendo en cuenta lo que te hemos dicho, debería aclararte si ha llegado el momento de cambiar el componente.