EEUU, Trump y los aranceles a la tecnología: Tu próximo smartphone puede salirte mucho más caro

Tras anunciar exenciones arancelarias cambiando los planes iniciales para teléfonos inteligentes y computadoras, el presidente Donald Trump advierte que se avecinan nuevos aranceles sobre semiconductores y la cadena de suministro tecnológica. Te contamos todo lo que puede pasar de aquí en adelante.
El alivio para el sector tecnológico podría ser cosa de unos días, ya que la administración Trump planea imponer aranceles específicos a componentes clave como los chips. Así que por ahora la pesadilla no ha terminado, y tendremos que estar pendiente a las nuevas decisiones.
Exenciones arancelarias: un respiro en mitad de la tormenta
El pasado viernes, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP) publicó una lista de productos tecnológicos, incluyendo teléfonos inteligentes, computadoras portátiles y semiconductores, que quedarían exentos de los nuevos aranceles del 125% sobre importaciones chinas y del 10% global. Esta medida fue recibida con alivio por consumidores y empresas tecnológicas, ya que evitaba un aumento significativo en los precios de productos tecnológicos que generan una gran expectación y son líderes en ventas a día de hoy, dada la importancia que tiene en nuestras vidas los smartphones.
Sin embargo, el presidente Trump aclaró que estas exenciones son temporales. En una publicación en Truth Social, afirmó: “Nadie se va a librar”, indicando que los dispositivos electrónicos se trasladarán a una categoría arancelaria diferente, enfocada en semiconductores y la cadena de suministro tecnológica.
Trump va a preparar nuevos aranceles
El secretario de Comercio, Howard Lutnick, confirmó que los productos electrónicos exentos serán incluidos bajo aranceles específicos sobre semiconductores en uno o dos meses. Esta estrategia busca incentivar la producción nacional de componentes críticos y reducir la dependencia de países como China. Medida que puede servirle para seguir con las negociaciones que tiene abierta con el mandatario chino, y, por otro lado, con la misión de potenciar la fabricación en los Estados Unidos.
Aunque la exención actual ofrece un respiro, los productos tecnológicos aún están sujetos a un arancel del 20% relacionado con el fentanilo. Además, la administración Trump ha dejado claro que planea imponer aranceles adicionales a los semiconductores importados, lo que podría afectar a toda la cadena de suministro tecnológica.
¿Cuál es el impacto en el mercado global?
La decisión de liberar temporalmente ciertos productos tecnológicos ha tenido un efecto positivo en los mercados. Las bolsas europeas abrieron con ganancias significativas, reflejando el alivio de los inversores ante la posibilidad de evitar una escalada en la guerra comercial. Y se esperan repuntes en el SP500 y el Nasdaq.
Sin embargo, la incertidumbre continúa. Las empresas tecnológicas, como Apple y Samsung, que dependen en gran medida de la producción en Asia, podrían enfrentar fuertes desafíos si se implementan nuevos aranceles sobre componentes clave. Algunas compañías ya han comenzado a diversificar sus líneas de producción hacia países como India y Vietnam para mitigar los riesgos derivados de la política estadounidense. Lo cierto es que el efecto de estas políticas está todavía por ver, y aunque da la sensación de que son medidas proteccionistas, también lo son para potenciar la negociación contra todos los países, para sacar tajada a todos los niveles, y, por tanto, mejorar la economía americana. Sea una cosa o la otra lo iremos viendo a lo largo de unos meses. ¿Y tú que piensas que será lo próximo que nos prepara Trump?