Probablemente la parte de nuestro teléfono móvil a la que más uso le otorgamos sea la cámara. Esto se debe a que los smartphones cuentan cada vez con mejores sensores para que realizar una fotografía a la altura de una cámara de fotos tradicional. Pero es posible aumentar aún más la calidad de las imágenes gracias a la GCam.
La cámara de Google es un software “exclusivo” de los smartphones de la compañía estadounidense. Aunque esta puede descargarse en prácticamente cualquier otro dispositivo Android a modo de APK, lo que resulta verdaderamente útil, puesto que logra unos resultados mucho mejores que los que lograrías con la cámara de tu móvil. Además te librarás de los problemas de ralentización al hacer fotos.
Sin embargo, tal y como hemos indicado en el párrafo anterior, pese a que la gran mayoría puede ejecutar la aplicación, existen algunos casos que no permiten su instalación. El motivo por el cual ocurre esto es porque la GCam cuenta con ciertos requisitos que necesita tu dispositivo para ser compatible con ella al máximo.
El procesador importa
El software fotográfico de Google está pensado para utilizarse con procesadores Snapdragon. Esto no significa que el hecho de que tu terminal disponga de una CPU de otra firma no vaya a ejecutar la aplicación, pero sí que su funcionamiento y resultados no serán óptimo y diferenciales respectivamente.
Algunos de los fabricantes que no suelen incorporar un chip Snapdragon en sus teléfonos son Huawei, Honor y Samsung. Las dos primeras utilizan habitualmente un procesador Kirin, mientras que en el caso de la compañía surcoreana el rendimiento lo proporciona un chip Exynos. En cambio, si tu smartphone trae consigo un MediaTek es posible que aproveche en mayor medida las capacidades de la GCam.
Disponer de API Camera2
Otro de los requerimientos que debe cumplir tu dispositivo es que la compatibilidad con API Camera 2 sea parcial o completa. Esto quiere decir que la empresa que lleva a cabo la fabricación del teléfono debe haber desbloqueado la conexión de comunicación entre el hardware y el software fotográfico.
Comprobarlo es objetivamente sencillo porque una aplicación nos confirmará si el terminal es compatible. La app en cuestión se trata de Camera 2 API Probe. Lo único que tienes que hacer es instalarla y acceder a ella. Cuando entres deberás fijarte en la sección ‘Hardware Support Level’. Si dentro de ella uno de los apartados (o ambos) denominados ‘LEVEL_3’ o ‘FULL’ se encuentra en verde significa que tu móvil dispone de API Camera2, por lo que puedes utilizar cómodamente la GCam.
En la página de los desarrolladores encontrarás un listado con todas las versiones del software de la gran G. Hay una inmensidad de ellas, pero si tu smartphone cuenta con Android 9 o inferior lo aconsejable es que optes por la versión 7.1 de la GCam. A partir de aquí todo se basa en probar. Una más vieja supondrá que no tendrás a tu disposición las funciones más actuales, pero sin lugar a duda, su funcionamiento será mucho mejor.