Esta misma semana se han lanzado en España nuevos móviles de la firma china. El más destacado sin duda ha sido el Poco X4 Pro 5G, uno de los modelos más esperados de la filial de Xiaomi, que es un móvil sorprendente en el más amplio sentido de la palabra. Tanto que nos preguntamos si es suficiente para jubilar a su predecesor.
No cabe duda de que estamos ante dos teléfonos que son de lo más interesante de la gama media del último año sin contar los modelos Poco M4 Pro, y si estrenaste a su antecesor, querrás preguntarse seguramente si la nueva generación merece tanto la pena como para cambiarlo por ella.
¿Tiene un procesador peor?
Cambiar un móvil por la siguiente generación no es algo raro para algunos usuarios, siempre y cuando la mejora que vean reflejada de un modelo a otro sea suficiente como para justificar ese cambio. Y este año en el caso del nuevo Poco, no está del todo claro, sobre todo en un aspecto. Hablamos del procesador, porque muchos ven cierto «downgrade» en el cambio de procesador que hemos visto en el nuevo modelo. Si el Poco X3 Pro contaba con un Snapdragon 860, un chip con un rendimiento casi de alta gama, este año las cosas han cambiado en la nueva generación.
Y es que el procesador que encontramos es un Snapdragon 695 5G. Este parece ser un procesador algo menos potente que los de las series 8, aún no se ha comprobado cuánto, pero lo ha elegido Xiaomi para poder contar por fin con conectividad 5G. Por tanto, este que es el aspecto más polémico, tendría cierto sentido desde el punto de vista del fabricante. Reduciendo un poco el rendimiento por un lado, pero ofreciendo una conectividad más moderna por el otro.
Muchos puntos a favor
En el resto de apartados hay claras mejoras. Por ejemplo, la pantalla es idéntica, salvo que ahora además es AMOLED. Por otRO lado también existen mejoras en la cámara de fotos, que si bien ahora tiene un sensor menos, el principal es de nada menos que 108 megapíxeles, más del doble de resolución que tenía su predecesor.
También mejora en cuanto a la batería, y mucho por cierto, ya que en este caso cuenta con una carga rápida digna de la gama alta, con una potencia de 67W. Gracias a ello puede cargarse al completo su batería de 5000mAh en apenas 40 minutos, por lo que se trata del doble de potencia de carga. Por tanto en todos los aspectos hay mejoras significativas de un modelo a otro.
¿Merece la pena?
La realidad es que el gran público no va a notar la diferencia entre un Snapdragon 860 y un 695 5G, que es el aspecto menos atractivo de este teléfono.
Además, este procesador ofrece totales garantías en el día a día, por lo que vamos a estar sobrados de potencia para las tareas cotidianas. Por tanto, teniendo en cuenta que el precio es el mismo que tenía la anterior generación, incluso inferior, desde luego sí merece la pena dar el salto. Porque a cambio obtenemos una pantalla AMOLED, una cámara de 108 megapíxeles, y una potente carga de 67W, además de MIUI 13 como capa, palabras mayores sin duda cuando hablamos de un teléfono de gama media tan asequible como este.