Apple lleva dominando el mercado de los smartphones desde hace más de una década. Se ha convertido en la reina del sector, marcando un antes y un después con sus iPhone. La empresa con sede en Cupertino parecía intocable hasta el día de hoy, aunque los últimos años muestran que incluso las marcas más grandes pueden sufrir las consecuencias de sus actos. Los números de ventas ya no son tan impresionantes y da la sensación de que Apple ya no tiene esa capacidad para sorprender.
A pesar de seguir liderando algunos rankings de popularidad y mantenerse como una de las marcas más valiosas del mundo, los síntomas de desgaste son evidentes. Las ventas del iPhone bajan, especialmente en mercados clave como China, la competencia mejora a un ritmo más acelerado y las decisiones de Apple en términos de diseño, innovación y política de precios generan cada vez más críticas. La pregunta ya no es si Apple sigue siendo la número uno, sino si está sabiendo adaptarse a un mercado que ya no le perdona la falta de audacia.
Caída en las ventas del iPhone
El iPhone es el producto líder de Apple y el que catapultó a la firma a lo más alto. Sin embargo, el móvil ha dejado de ser el principal motor de crecimiento durante los últimos años. Las ventas cayeron un 2,45% en el tercer trimestre de 2023 respecto al año anterior, mientras que a finales de 2024 se produjo una caída del 5% debido a la terrible recepción del iPhone 16 y unas supuestas innovaciones que no han convencido del todo a los usuarios.
China: un mercado cada vez más hostil
China fue durante muchos años un país esencial para Apple en términos de venta de smartphones y otros dispositivos. Pero la situación ha cambiado radicalmente con el paso del tiempo, llegando a reducirse en un 30% las ventas del iPhone en la región al completo. Factores como el resurgimiento de Huawei, el aumento de consumo nacional y las diferentes restricciones gubernamentales impuestas hacia los dispositivos tecnológicos extranjeros están provocando que Apple disminuya su presencia en uno de los mercados más grandes del mundo.
Una innovación estancada
Si por algo se caracteriza Apple, entre otras muchas cosas, es por su marketing y capacidad para vender bien sus móviles. Siempre han sido los más avanzados, aunque esta ventaja ha ido desapareciendo con el paso del tiempo y cada vez le resulta más complejo innovar a la marca o simplemente peca de cierto racanismo. Un claro ejemplo es el iPhone 16, lanzado el pasado año 2025, el cual se estrenó con una pantalla de 60 Hz, una característica que viene siendo habitual en Apple desde hace años, al mismo tiempo que existen móviles por menos de 200 euros que ya tienen 120 Hz incondicionalmente. A esto hay que añadir que la batería de la mayoría de los modelos de Android por parte de Xiaomi, Samsung y otras marcas superan con creces la autonomía de los iPhone de Apple, y lo mismo ocurre con la carga rápida. Los altos precios de Apple tampoco ayudan, puesto que hoy en día es fácil encontrar smartphones Android con especificaciones igual de avanzadas que un iPhone y bastante más económicos.
Y es que, competidores como Samsung y Xiaomi ya ofrecen pantallas 120 Hz en gamas medias por menos de 300 euros. Además, Xiaomi y realme equipan baterías de más de 5.000 mAh con carga rápida de 120 W en modelos por debajo de 400 euros. Esta presión erosiona el valor percibido del iPhone por todos los clientes, especialmente en usuarios sensibles al precio y rendimiento.
Es cierto que afirmar que Apple tiene los días contados es una exageración, pero los números están avisando por sí solos. La empresa se enfrenta a la pérdida de interés de los usuarios en su producto estrella, críticas debido a decisiones algo cuestionables para un móvil de 1.000 euros y otros problemas. El tiempo decidirá qué ocurre finalmente y si otras marcas toman las riendas del mercado.