A menudo nos preocupamos por conseguir que nuestro móvil funcione a la perfección, recurriendo a muchos trucos para hacer que la batería dure más tiempo o que su rendimiento en general sea mejor. Sin embargo, eso no siempre depende del propio terminal o de los archivos que tenemos guardados, porque puede haberse visto afectado por un ataque malicioso que nos está golpeando de lleno.
Con la intención de que sepas identificarlo, te vamos a dar las claves que te permitirán conocerlo. Una vez tenemos la idea clara y pensamos que podemos estar ante un virus, será el momento de sacar nuestros archivos para ponernos a salvo y proceder a restablecer el teléfono por completo, no volviéndolo a utilizar sin antes asegurarnos de que realmente eso ha sido suficiente.
Todo en lo que debes fijarte para detectar virus
Si estás con la duda sobre si tu terminal sufre de malware, tan solo debes ponerte ante él e ir comprobando con las siguientes indicaciones lo que le pasa. En cuestión de segundos, podrás saber si realmente el móvil tiene un virus o son imaginaciones nuestras.
La tarifa de datos se agota a toda velocidad
Este es uno de los aspectos claves para saber reconocer los problemas con el malware en los smartphones. Para ello, solamente debemos acceder a la app de nuestra compañía y comprobar si los datos que hemos consumido son muy superiores a los de los meses anteriores. Para ello debemos valorar si en los últimos días hemos estado más tiempo fuera de casa, hemos visto más videos o descargado archivos.
El consumo de los datos podría venir acompañado de esta situación, pues estaría tratando de conocer todo lo que hacemos con el teléfono o incluso hacerse con nuestros datos personales.
Se llena de anuncios
Otra de las claves para reconocer un virus, está en la publicidad que nos aparece. Sin acceder a ninguna aplicación e incluso en la propia pantalla de bloqueo, nos pueden aparecer anuncios que provocan que el móvil funcione mucho peor y además estará ocultando un problema mayor, como es el malware. Amenazas que aunque no suelen basarse en conseguir nuestra información, empeoran nuestra experiencia basándose en una mala publicidad, aunque nunca se sabe hasta dónde pueden llegar los daños. Por suerte, siempre podemos quitar los anuncios que aparecen en el móvil.
Tiene vida propia
Puede parecer extraño, pero no seríamos la primera persona que sin tocar el móvil podemos ver como el mismo accede a una aplicación o trata de consultar datos concretos. Esto lo puede estar realizando un hacker malicioso, con la intención de saber más sobre nosotros. Ante esta amenaza, lo primero que debemos hacer es cortar la conexión, desactivando la red WiFi y los datos. Un peligro mayor al de otras situaciones, dado que contará con acceso total a nuestro smartphone.
La batería ha cambiado a peor
No debemos olvidarnos de la batería, otro factor clave que nos puede hablar de la salud del teléfono. Si notamos que de un día para otro, por haber instalado alguna aplicación, haber descargado un archivo o simplemente habernos conectado una red WiFi abierta, detectamos que la velocidad con la que la batería se agota se ha multiplicado, es hora de preocuparnos. Pero debemos valorar si realmente esto viene solo precedido por ese motivo o ha tenido algo que ver el uso que hemos hecho de las cámaras, GPS y horas de pantalla.