Cada año que evoluciona la Mi Band de Xiaomi nos deja más posibilidades y ofrece mejoras notables, pero sin embargo sigue estando un paso por detrás de los smartwatches. Aunque Xiaomi también tiene sus propios relojes, llegará un momento donde la evolución tenga que dar un salto notable y la Mi Band 7 podría ser parte de ello.
Vamos a conocer todo lo que debería cambiar en la Mi Band 7 con respecto a las anteriores generaciones para ponerse al nivel de los relojes inteligentes y más avanzados. Esto conlleva un aumento en el precio, pero sin duda alguna haría que la pulsera más popular de todos los tiempos se reinventase y consiguiese ofrecer a los usuarios todo eso que echan en falta en el día a día.
Necesita un gran rediseño
Algo que Xiaomi no ha modificado prácticamente desde que la Mi Band existe, más allá de la integración en la pantalla con la Mi Band 2 o el aumento de tamaño en la Mi Band 6 es el diseño. Quizás ha llegado el momento de que eso cambie y dejemos de ver todas las Mi Band a simple vista iguales, provocando con ello un cambio de sentido en el mundo de las pulseras inteligentes.
Para competir con los smartwatches tendría que comportarse como tal y por qué no pensar en una Mi Band 7 cuadrada o circular. Su coste no sería mucho más elevado y es algo que la gigante Xiaomi podría amortizar. Ese aumento de tamaño permitirá mayor personalización en las esferas, algo que gusta a todos y además ofrecería una mayor comodidad a la hora de ver la hora, la fecha y por supuesto las notificaciones.
Aunque Xiaomi ha trabajado en mejorar la lectura de alertas en la pulsera, debemos admitir que sigue siendo un suplicio leer mensajes de WhatsApp desde una pantalla diminuta. Comparándolo con otros relojes, las notificaciones marcarían un antes y un después.
Y varios extras…
Si la Mi Band quiere ser algo más, también debe tener en cuenta que los smartwatches más avanzados cuentan con opciones como por ejemplo el GPS. Ese extra que marca la diferencia entre poder salir a hacer deporte con el móvil o sin él, dado que la pulsera de Xiaomi sigue careciendo de ello y es uno de los usos principales. Además de a integración de capacidad para responder llamadas desde la pulsera, ya que ahora solo se pueden gestionar las llamadas entrantes en la pulsera china, con micrófono y altavoz para estar al nivel de los relojes inteligentes más premium del mercado.
Otros aspectos se basan directamente en el software, donde Xiaomi tendría mucho que pulir. Entre lo más deseado sin duda sería un sistema de opciones donde la pantalla táctil tome relevancia, más allá de los básicos gestos que tenemos en las pulseras actuales. Accediendo a las notificaciones de una manera más sencilla, pudiendo ejecutar acciones rápidas con toques en la pantalla o incluso ofreciendo opciones para por ejemplo mantener siempre la pantalla activa mediante un modo always on display.
Lo ideal también sería poder instalar aplicaciones que se combinen con nuestro móvil. Quizás estamos más cerca de esto de lo que pensamos y por eso la Mi Band 6 con NFC ya es una realidad aunque no conocemos por ahora como funciona el sistema de pagos.