Desde hace años llevamos escuchando hablar y opinar sobre la privacidad en los móviles, llevándonos esto a pensar que de una manera u otra el usuario no tiene siempre el control. Con la intención de conocer cuánto de cierto hay en esto, vamos a comparar la privacidad entre iOS y Android, lo que nos dará una visión clara de lo que significa en cada sistema operativo el control de los datos y la información de los usuarios.
Son muchos los elementos de los smartphones que han ido evolucionando junto a la privacidad, ofrecidos a partir de los datos una soluciones más adaptadas a los usuarios. Pues nos guste o no, los datos se han convertido en un valor muy importante en la vida actual y tanto si nos preocupamos ya por ello como si lo pasamos por alto, debemos darle su correspondiente consideración.
Los permisos como punto principal
Uno de los puntos más importantes de la privacidad en los smartphones se sitúa en las opciones que nos dan los permisos, donde anteriormente veíamos más diferencias entre los sistemas, con iOS como un claro vencedor, pero sin embargo con el paso del tiempo los móviles Android han ido ganando terreno en este aspecto y ahora se plantan con grandes opciones mejoradas.
Para modificar los permisos de una de las apps en los iPhone y controlar a lo que tiene acceso cada una de ellas tenemos que entrar en Ajustes > Privacidad para después elegir en qué queremos centrarnos. Aquí nos encontramos opciones muy variadas que van desde la Localización hasta el control de HomeKit o de los archivos del dispositivo.
Android copio en cierto modo esta disposición y pasos, dejando atrás las modificaciones app por app para adaptar el gestor de permisos, también dentro de Ajustes > Privacidad. De este modo tenemos a nuestra disposición el control de las apps que tienen acceso a lo mismo que en los iPhone aunque con alguna que otra carencia.
Las diferencias en este aspecto por lo tanto estarían en que iOS permite controlar qué servicios o apps tendrán acceso al reconocimiento de voz, algo en lo que Google ya está aplicando cambios, también a la red, Bluetooth y a los datos de los sensores. Otros apartados que vemos, cambian con respecto a la disposición en Android pero también están presentes en el otro sistema.
Sin embargo una de las novedades que vimos en Android 11 y que resultan muy útiles para la privacidad es el auto eliminador de permisos en apps que no usamos, lo que nos permite no correr riesgos porque una app desactualizada y olvidada pueda escucharnos o acceder a nuestros contenidos.
La seguridad y la privacidad como valor diferencial en iOS
No cabe duda alguna de que Apple ha sabido sacarle partido a sus ventajas en la privacidad frente a Android, convirtiéndolo en una seña de identidad. Desde los anuncios en televisión, hasta otros tipos de publicidad nos tratan de dejar claro que los iPhone son los móviles con más privados, aunque esas diferencias que antes eran mucho más notables cada vez sean menores.
https://youtu.be/–kqRhOtoks
El control que hace iOS sobre los datos de los usuarios ha sido valorado en muchas ocasiones por la tranquilidad que ofrecen al usuario y eso ha hecho que les valga como bandera. Al tratarse de un sistema operativo de código cerrado, resulta más fácil encontrar vulnerabilidades y con fallos de seguridad, un punto ante el que Android jamás podrá enfrentarse.
Cifrado de datos en los móviles Android y en los iPhone
Aunque en los últimos tiempos la nube y las apps han ido integrando el cifrado de conversaciones, archivos y demás elementos, esta protección lleva mucho tiempo en Android y en iOS. Con tan solo establecer un código PIN, contraseña, usar el lector de huellas o el reconocimiento facial, estamos procediendo a cifrar todo el contenido del sistema, incluyendo las propias apps.
En este caso nos topamos con un empate a tablas dado que el cifrado resulta igual de efectivo en ambos casos, la clave estará en el sistema de reconocimiento que utilicemos. En los iPhone el reconocimiento facial es mucho más avanzado que en Android, pero sin embargo el uso del lector de huellas en el sistema operativo más extendido sigue el nivel del Touch ID que un día los iPhone comenzaron a perder.
Opciones y posibilidades en la privacidad de Android e iOS
Para conocer en profundidad las diferencias que nos plantea la privacidad en los móviles con ambos sistemas operativos, tenemos que poner ante nosotros ambos casos y eso es lo que hemos hecho, pasamos a mostrarte las opciones que nos encontramos y sacamos conclusiones sobre lo que nos ofrecen.
Ocultar el contenido sensible en la pantalla
El primer punto donde nos encontramos con una opción idéntica entre las posibilidades de la privacidad se sitúa en la información que aparece sin encriptar en la pantalla de bloqueo. En su mayoría de tarta de notificaciones que llegan a nuestro móvil y que podemos ver en la pantalla sin acceder al smartphone, algo que podemos evitar en Android desde Ajustes > Privacidad > Notificaciones en la pantalla de bloqueo y también en iOS desde Ajustes > Notificaciones > previsualizaciones.
Las contraseñas siempre ocultas
Por defecto en Android y en iOS nos topamos con que al escribir una contraseña, se muestra rápidamente para comprobar que hemos pasado la tecla correcta, algo que no tiene diferencia entre Android e iOS hasta el momento en acceder a los ajustes, donde desde Android 11 además podemos evitar que se muestre a penas unas décimas de segundo, de este modo evitamos que nadie pueda ver la clave.
Controlar el acceso ala red, la nota pendiente de Google
Por otro lado, como hemos podido ver antes, entre o permisos de privacidad el iPhone da la opción de escoger qué apps y servicio podrán hacer uso de la red, lo que en Android es imposible de hacer. De este modo una app en iOS puede seguir en el móvil sin hacer jamás uso de nuestra tarifa de datos para no llevarnos sorpresas.
Los permisos de un solo uso
Entre los puntos fuertes de la privacidad de ambos casos tenemos que mencionar la posibilidad de dar un permiso único de acceso que se volverá a necesitar la próxima vez que por ejemplo una app acceda a la ubicación o a la cámara. Esto nos permite tener bajo control el acceso a las apps sobre esto con una opción que nos aparece al tratar de usar la herramienta, otro aspecto donde el funcionamiento es similar.
Nuestros datos al servicio de la publicidad
Todo lo que podemos controlar a través de la privacidad en los móviles, el valor de la publicidad es uno de los más importantes y por ello tenemos opciones para ajustarlo en los móviles Android y en los iPhone. A nuestra disposición está la posibilidad de permitir o no anuncios personalizados que se basan en lo que visitamos o los usos que hacemos. En el caso de los iPhone podemos ver además un informe de esa información obtenida según nuestra segmentación.
El acceso al uso del móvil por parte de Google y de Apple
En cuanto a los datos de análisis que tanto en Android como en iOS ofrecemos a las compañías, tenemos la posibilidad de activar o desactivar estos datos, algo que puede ser de utilidad para mejorar el funcionamiento de aplicaciones, rendimiento e incluso a optimizar los consumos de batería. Desde iOS podemos escoger los datos se utilizarán para su análisis y se divide de una forma más avanzada entre lo que queremos o no queremos compartir.
Conclusiones: ¿Son tan grandes las diferencias?
Después de haber hecho un amplio repaso por todas las opciones que basadas en permisos y opciones de privacidad vemos en ambos sistemas operativos, nos damos cuenta de que realmente la distancia no es tan amplia como lo parecía en un principio. Si es cierto que hay algunas opciones añadidas en los iPhone para controlar algunos permisos y que además se desgrana mucho mejor el acceso a los datos que Apple puede hacer en nuestro smartphone, pero sin embargo Google ha sabido rectificar a tiempo y ya no estamos ante un sistema que se olvida de la privacidad. Esto nos lleva a que las diferencias de privacidad entre iOS y Android no son tan grandes, aunque sin embargo Apple sabe «venderlo» mejor.