¿Harán Samsung y Google la competencia a WhatsApp con un nuevo protocolo de mensajería?
Google ha anunciado una nueva colaboración cuanto menos interesante. Se trata de un acuerdo con la gigante Samsung, con la que pretende trabajar para impulsar y llevar a las masas el nuevo protocolo de mensajería RCS a las masas. Pero, ¿qué significan estas siglas y qué alternativa suponen frente a la poderosa WhatsApp?
El RCS lleva sonando desde hace bastante tiempo pero a estas alturas no sigue siendo más que un concepto del que pocos tienen idea. Es por ello que resulta tan revelador que una compañía como Google anuncie ahora esta colaboración oficial con nada menos que Samsung, con el objetivo de «ofrecer una experiencia mejorada de mensajería en el smartphone» capaz de imponerse a otras soluciones ampliamente conocidas y usadas hoy en día y que, claro, destierre para siempre los SMS.
¿Qué es el RCS?
Las siglas RCS corresponden a Rich Communication Services que viene a traducirse como «servicio de comunicación enriquecido». La idea es crear un protocolo de comunicación común en el que el intercambio de mensajes, con posibilidad de chatear por WiFi, crear chats grupales, recibir notificaciones de envío y recibo y compartir fotos y videos de alta resolución (de hasta 10 MB).
Ya en 2016, durante la Mobile World Congress, se planteó la creación de este estándar en el que estaban involucradas operadoras, varios fabricantes y la propia Google. La muestra de interés fue creciendo con el tiempo hasta llegar a más de 55 operadores, 11 OEMS y dos distribuidores de sistemas operativos (Google y Microsoft) que se plantean dar el paso al RCS como plataforma unitaria de comunicación -sí, Apple, de momento, está fuera. Esta no cuenta con cifrado de extremo a extremo, quizás unas de las mayores pegas que se le puede poner ahora mismo a la solución.
No se trata de una aplicación, no te confundas. El RCS es un estándar, de forma que las diferentes compañías (ya sean operadoras o fabricantes de teléfono) pueden hacer sus propias aplicaciones basadas en este protocolo, siendo todas compatibles entre sí. Ahora bien: para que tu teléfono lo use, tu operadora debe de soportarlo, de ahí que se trate de un trabajo que debe ser conjunto. ¿Y qué pasa si tu receptor no tiene RCS? En ese caso, aclaran, el mensaje le llegará en formato SMS.
Como ves el concepto está claro, por lo que Google lo que quiere es acelerar esta adopción para conseguir que se difunda a nivel global lo antes posible. Con esta anunciada colaboración consigue que Samsung de un empujoncito hacia adelante para que lleve la tecnología a sus equipos, empezando por los Galaxy S8 y S8 +, según confirma la propia firma de Mountain View. Igualmente Samsung se ha comprometido a que sus próximos teléfonos inteligentes Galaxy también admitirán de forma nativa la mensajería RCS -hablamos ya del Galaxy S10?
El tema no acaba aquí. Google, que para eso es la que más mueve toda esta madeja, ha rebautizado el RCS como «Chat«, de forma que esta viene a ser una especie de estándar general del propio RCS. Evidentemente, la compañía quiere generalizar esta plataforma en todos los teléfonos Android.
¿Una amenaza para WhatsApp?
Podría llegar a serlo. Muchos se muestran reacios a la idea ya que básicamente este protocolo ofrece una experiencia de usuario similar a la que podemos encontrar en la plataforma por excelencia de comunicación en estos momentos. Algo que comienza a ser realidad con la opción para activar los mensajes RCS en móviles Samsung.
El hecho sin embargo de que venga ya integrado de forma nativa en el teléfono podría ser un punto a favor del RCS, que ahora sí que puede ver cómo el empuje de Google y de uno de los fabricantes que más teléfonos venden en el mundo (léase Samsung) hace al fin efecto. Y es que aunque aunque muchos no sepan ni de qué se trata, hay ya operadoras y fabricantes que lo ofrecen sin que haya trascendido nunca más allá.
Una ventaja importante de esta plataforma frente a WhatsApp es que funciona a través de nuestro número de teléfono, no requiriendo de ningún tipo de registro, y sin necesitar de conexión a internet -como sí que necesita el servicio propiedad de Facebook. Esto es porque los mensajes se mueven de los servidores de las operadoras al servidor certificado por la GSMA (bautizado Jibe Cloud).
Tendremos que ver cuando el RSC se despliegue de manera oficial y masiva si finalmente consigue tumbar a WhatsApp. La distribución a cuentagotas y casi de manera silenciosa ha servido de poco, por lo que el estándar necesita llegar con mucha más fuerza a todos los usuarios, demostrándoles que hay vida más allá de WhatsApp. Del mismo modo si no queremos seguir utilizándolos, podremos desactivar los mensajes RCS en el móvil de una forma sencilla.