Cuando compramos un teléfono nuevo, lo primero que solemos hacer es configurarlo a nuestro gusto, descargar las aplicaciones que vamos a utilizar, configurar tonos de llamada, alarmas, ponerle un fondo de pantalla, etc, y es que hoy en día los teléfonos móviles se han vuelto algo muy personal. El problema llega cuando vamos a cambiar de teléfono, o queremos restablecerlo de fábrica, que en muchas ocasiones, volver a configurarlo de nuevo puede ser una tarea muy tediosa. En este aspecto, Apple ha llevado desde los inicios la delantera gracias a iTunes y las copias de seguridad idénticas de sus dispositivos.
Simplemente conectando nuestro iPhone al ordenador, podemos sincronizarlo con iTunes para crear una copia de seguridad de todo el dispositivo, sus aplicaciones, nuestros datos personales y todas nuestras configuraciones. De esta manera, cuando cambiemos de iPhone, o lo restablezcamos (algo recomendable tras las grandes actualizaciones de iOS), podremos restaurar su estado idéntico desde dicha copia de seguridad.
Las copias de seguridad de iTunes normalmente se guardan localmente en nuestro ordenador. Cuando nuestro PC esté correctamente protegido no habrá problema, pero si alguien más tiene acceso a nuestro equipo, tanto con permiso como sin él, puede poner todos los datos de nuestra copia de seguridad en peligro.
A continuación, os explicamos cómo debemos proteger correctamente las copias de seguridad de nuestro iPhone con iTunes, especialmente después de los cambios introducidos en iOS 11 donde se reduce bastante la seguridad de estas copias.
Otras formas seguras de hacer copias de seguridad de nuestro iPhone
La verdad es que las copias de seguridad de iTunes son muy cómodas y, sobre todo, eficaces a la hora de configurar un dispositivo de nuevo, sin embargo, puede que no sean la mejor opción si lo que buscamos es una máxima seguridad, además de que ocupará varios gigas en el disco duro de nuestro ordenador.
Otra alternativa para guardar copias de seguridad de los datos y la configuración de nuestro iPhone es hacerlas en iCloud que, si tenemos nuestra cuenta correctamente protegida, será muy cómodo por el hecho de que cada vez que lo carguemos se sincronizarán los datos con la nube, lo único que para restaurar la copia, al copiarse solo enlaces simbólicos a las aplicaciones, estas tendrán que bajarse de nuevo, y eso tardará un rato.
Por último, la forma más rudimentaria, pero la más segura, que es copiar a mano los datos importantes a nuestro ordenador (como nuestras fotos) y después, con una hoja de papel y un boli, apuntar todas las apps instaladas. Así, cuando lo restablezcamos, podremos volver a descargarlo todo manualmente y podremos aprovechar para evitar descargar aplicaciones que no necesitemos, ahorrando espacio y recursos en nuestro iPhone, iPad, o cualquier otro dispositivo móvil.
¿Proteges correctamente tus copias de seguridad?