Una de las principales pautas para que no te infecten tu móvil, roben tus datos, dinero o te perjudiquen de ninguna manera por medio de los códigos QR es no escanear ciertos códigos que pueden ponerte en peligro.
Estos son todos aquellos en los que encontrarás enlaces sospechosos, con faltas de ortografía, que no ofrecen nada de información o que provienen de fuentes desconocidas. A dónde dirige el QR es la clave, aunque esto solo lo sabrás cuando lo hayas escaneado.
Por eso, te aconsejamos que tengas un lector de códigos QR que te informe del enlace o archivo al que te dirigirá antes de hacerlo para que puedas comprobar a dónde te lleva, y así solo entrar si es totalmente de confianza, o en su defecto recurrir a Google Lens para conocer más sobre él antes de escanearlo.
Aunque todo se resuma en que no debes escanear códigos QR que te lleven a sitios que puedan ponerte en peligro, vamos a darte algunas ideas para que sepas más concretamente cuáles son los que no debes escanear en ningún caso.
Los carteles publicitarios que te ofrecen cosas gratis
Si ves carteles en la calle en que te ofrecen cosas gratis, regalos sorteos, gangas o cualquier otra cosa que pueda resultarte atractiva puede ser un engaño en muchos casos. La misma policía ha recomendado hace un tiempo no leer QR de carteles de publicidad que ofrecen descuentos suculentos, ofertas, sorteos o regalos. Si son de una empresa, mejor acércate a ella para informarte sobre las posibles promociones.
Esto mismo puede aplicarse a QR en páginas de Internet o cualquier otro medio que te ofrecen cosas gratis o buscan llamar tu atención de forma desmedida. No confíes.
Los ofrecidos por desconocidos
Puede parecerte algo difícil de creer, pero este es un engaño mucho más frecuente de lo que te imaginas. Son algunas las personas que ofrecen su propio código QR a algún establecimiento comercial con la excusa de que así aceptarán el pago, cuando en realidad lo están emitiendo, como sucede por ejemplo en el famoso timo del Bizum inverso.
Por eso, si alguien te ofrece pagar la compra de un producto de segunda mano por medio de QR o te dice que escanees un QR con cualquier pretexto, no lo hagas. Pídele que te pague en mano, por PayPal o como prefieras, pero es mejor perder una posible venta a que te engañen.
Únicamente debes escanear códigos QR de fuentes y establecimientos de confianza y para un fin concreto que te sea útil, especialmente cuando no tienes otra opción, como para leer la carta de un restaurante o ver los horarios de los buses.
Los QR de dudosa procedencia
Cualquier QR que encuentres en cualquier sitio de dudosa procedencia puede ser un peligro para ti, por eso, como te hemos dicho, solo escanea QR de sitios de confianza y siempre comprobando el enlace al que dirigen o a qué nos lleva, antes de nada.
Códigos que te llegan por email, puedes ver en webs poco confiables, te ofrecen algo muy tentador, etc. Es muy importante que te prevengas porque, aunque la tecnología de por sí no muy peligrosa, escanear un QR no confiable puede llegar a serlo.