Si alguna vez se te ha caído el móvil al agua, sabes lo angustiante que puede ser. Ya sea un iPhone, un Xiaomi, un Samsung, o un smartphone de cualquier otra marca, lo más importante es mantener la calma y seguir los pasos adecuados para evitar el máximo daño posible.
Pero más importante que seguir estos pasos, es saber lo que no debes hacer. Por ejemplo, Fabricantes de móviles de todo tipo, Apple. Samsung, OPPO… han publicado recomendaciones sobre qué hacer si tu dispositivo se moja, y aunque los consejos varían ligeramente entre fabricantes, todos coinciden en una cosa: nunca uses un secador para secar el móvil.
Por qué no debes usar un secador de pelo
Uno de los errores más comunes cuando un teléfono se moja es recurrir al uso de un secador de pelo. Pensándolo fríamente (¡ja!) parece una solución lógica, pues el calor seca el agua, pero no se deben usar secadores de pelo ni ninguna otra fuente de calor, como hornos o radiadores, para secar los teléfonos.
La razón es bien sencilla, el calor que desprende este aparato no es controlado al 100% y puede dañar los componentes internos sensibles, como la batería o las conexiones de la placa base, lo que podría dejar el móvil totalmente roto. De hecho, si el calor es muy intenso, podrías dañar la pantalla o deformar la carcasa.
El calor no es el único peligro al que se enfrenta nuestro teléfono, sino también por la fuerza del aire que expulsa. Este aire podría empujar el agua aún más dentro de los componentes que dan vida a nuestro smartphone, lo que aumentaría las probabilidades de que el teléfono sufra daños permanentes.
Es aquí donde se llega a la peligrosa combinación entre calor y humedad. Si usas un secador de pelo y no has apagado el dispositivo, o enciendes el móvil inmediatamente después de aplicar calor, podrías generar un cortocircuito que dañará los componentes eléctricos de forma irreversible. Incluso si logras secar el teléfono por fuera no sabes los daños que puedes crear por dentro.
Pasos para secar un móvil mojado
Si quieres secar un smartphone mojado como es debido, además de dejar el secador de lado, te recomendamos seguir estos pasos:
- Sácalo del agua y apágalo inmediatamente.
- Seca el exterior con un paño suave que no suelte pelusa. Concéntrate especialmente en las áreas donde el agua puede entrar dentro del smartphone, como los puertos de carga y los de auriculares.
- Deja el teléfono en un lugar seco y ventilado. Lo mejor que puedes hacer es dejar el dispositivo en un área bien ventilada con aire fresco y que sea un entorno seco, como un armario, prescindiendo de cocinas o baños.
- Usa gel de sílice. Si tienes paquetes de gel de sílice (esas bolsitas que suelen venir con productos electrónicos o zapatos), colócalos junto al teléfono en un recipiente sellado. Este gel absorbe la humedad, ayudando a secar el interior del dispositivo de forma lenta pero efectiva. Es aquí donde te deberás armar de paciencia ya que muchos fabricantes y expertos recomiendan dejar el móvil en este material hasta 3 días.
Olvida el arroz
Un consejo más: si el secador s malo para tu smartphone, igual de perjudicial, o más, es el uso de arroz para secar tu móvil. Aunque es un método que ha pasado de generación en generación, no es tan efectivo como muchos creen y puede ocasionar más problemas de los que resuelve.
La realidad es que el arroz no tiene la capacidad de absorber la humedad de manera eficiente, y en algunos casos, sus partículas o residuos pueden introducirse en los puertos del dispositivo, empeorando la situación. Además, el polvo que genera puede acumularse en componentes delicados, como el conector de carga o los altavoces, haciendo que se dañe aún más de lo que lo haya hecho el agua.
Por eso, si buscas un material para secar el móvil, mucho mejor que el arroz y con menos riesgos para su integridad, insistimos en las bolas de sílice.