La seguridad es actualmente uno de los elementos que más en cuenta hay que tener a la hora de navegar por nuestro teléfono móvil. Filtrar por error nuestra información privada a alguien puede generarnos muchos problemas. Por ello, lo habitual es contar con algún tipo de bloqueo del dispositivo para mantenerlo seguro.
Las dos opciones más populares para ello son el reconocimiento facial o la lectura de la huella dactilar. El primero de los sistemas está presente en casi todos los dispositivos actuales, sobre todos los móviles más económicos que no tienen un lector de huellas entre sus características. Y eso que esta es la alternativa más utilizada por los usuarios generalmente debido a ciertos motivos, pero ¿cuál es mejor realmente?
Comodidad vs seguridad
La preferencia del uso de la huella, pese a sus problemas, para el desbloqueo del teléfono tiene una explicación bastante clara. No solo proporciona un método de seguridad efectivo, sino también bastante cómodo. La mayoría de los terminales cuentan con sensor para huella en el lateral o en la parte trasera. Esto significa que a medida que sacamos nuestro móvil del bolsillo podemos desbloquearlo de manera simultánea. Mucho más ergonómicos son los que alojan este sensor bajo la pantalla, aunque los teléfonos que presumen de ello suelen tener un precio bastante elevado.
En el otro lado se encuentra el reconocimiento facial, una forma bastante efectiva, pero que no está tan extendida entre los dispositivos Android de gama alta debido a que no es completamente segura debido a las carencias de los sensores. De hecho, el propio dispositivo nos avisa al configurar el reconocimiento facial de que alguien podría obtener acceso, por lo que se recomienda añadir otro patrón de desbloqueo.
El sistema es tan… débil, que hay muchos usuarios que se quejan de que alguien con una foto puede desbloquear el m´pvil debido a la ausencia de sensores que puedan escanear nuestro rostro en 3D.
iPhone lo tiene claro
Desde Apple lo tienen bastante claro, el Face ID es el método más seguro. La compañía afirma que sus teléfonos utilizan la cámara TrueDepth y el aprendizaje automático para dar al usuario una autenticación completamente segura.
Según la empresa la probabilidad de que cualquier otra persona pueda ser reconocido mediante esta tecnología es aproximadamente 1 entre 1.000.000. Incluso es muy difícil que alguien obtenga acceso a través de una fotografía de la persona en cuestión, ya que Face ID detecta coincidencias en base a la información de profundidad.
Esta cuestión da mucho de qué hablar y difícilmente tiene una solución especifica. En el caso de Android apostar por la huella es la opción más recomendable puesto que el sensor de reconocimiento facial muestra ciertas carencias. Aunque, existe un truco para quitar el lector de huellas del móvil de forma temporal. En cambio, si tienes a tu disposición un iPhone lo más seguro es optar por la segunda alternativa.
Desde la compañía estadounidense son muy conscientes de la importancia de la seguridad. Es por ello por lo que utilizan la tecnología más avanzada para brindar una defensa óptima ante cualquier tipo de robo de información.