Una de las funciones de seguridad de más confianza para los usuarios estaría en peligro si tienes que sustituir la pantalla de tu iPhone 13. Apple lleva varios años intentando quitarse de encima a los profesionales de terceros que arreglan sus teléfonos y esta es una nueva prueba de ello.
La reputación precede al Face ID, la medida de seguridad de Apple que se basa en el reconocimiento facial. Sin embargo, esta deja de funcionar al completo si se reemplaza la pantalla del nuevo smartphone de la compañía.
A qué se debe este problema
El culpable de este error es un chip del tamaño de un grano de arroz que se encuentra en el cable que conecta la pantalla con la placa base. En los anteriores dispositivos no existía, por lo que no había ninguna dificultad a la hora de cambiar la pantalla.
Debido a su diminuto tamaño no es posible reparar la pantalla del móvil, por lo que se precisan de herramientas especiales para llevar a cabo la maniobra sin que la funcionalidad quede deshabilitada. Aunque incluso con las herramientas adecuadas esto supone un reto impresionante, puesto que es muy sencillo dañar la frágil pantalla.
Esto conlleva grandes problemas económicos para las empresas de reparación de terceros, ya que hacerse con el equipo adecuado puede suponer un gasto excesivo y que apenas merece la pena. De esta forma Apple se asegura serla única en recibir beneficios por esta clase de inconvenientes.
No es la primera vez
Apple no se ha manifestado sobre esta cuestión, pero tras varios años de problemáticas con las reparaciones relativas al Touch ID, baterías y cámaras es difícil de creer que este error sea únicamente un accidente.
Es cierto que podría tratarse de un fallo del hardware, aunque tratándose de uno de los componentes que más problemas suele dar es raro que haya pasado las pruebas sin someterse a ningún arreglo previo. Por lo que lo más probable es que sea una estrategia en vez de un “simple” contratiempo.
Los asuntos relacionados con las pantallas es una de las principales vías de ingreso de los talleres de reparación. De hecho, Justin Drake Carrol, fundador de Fruit Fixe, una cadena de reparación en Virginia afirmó que el reemplazo de pantallas suponía alrededor del 35% de los ingresos.
Aunque hace unos años la marca dirigida por Tom Cook anunció que permitiría arreglar los iPhone fuera de garantía en tiendas de terceros. Esto sería posible gracias a que la empresa les proporcionaría las piezas oficiales y la formación de los trabajadores, por lo que puede que esta situación se resuelva de esta forma.
Por el momento la compañía estadounidense no ha hecho pública ninguna información relativa a este asunto. Así que habrá que esperar para conocer si realmente es un error de fábrica o una práctica para lograr aún más beneficios.