Galaxy S25 Edge y su batería fina: ¿resiste el ritmo del día a día?

El Galaxy S25 Edge, con apenas 5,8 mm de grosor y 163 g de peso, promete elegancia y manejabilidad, pero su batería de 3.900 mAh genera dudas entre los usuarios más exigentes. Nosotros lo hemos probado y te podemos decir que pensamos de este dispositivo.
Tras probarlo durante varios días en condiciones reales, hemos comprobado que, aunque su autonomía no bate récords, ofrece un rendimiento “aceptable” para un perfil moderado de uso, siempre y cuando se aproveche al máximo su carga rápida de 25 W.
Diseño ultradelgado versus capacidad de batería

El principal reclamo del S25 Edge es su perfil ultrafino de 5,8 mm, que deja espacio para una batería de tan solo 3.900 mAh, sensiblemente inferior a la del S25 Plus de 4.900 mAh o el S25 Ultra con 5.000 mAh. Este compromiso de Samsung busca ofrecer un móvil más ligero para el bolsillo, pero conlleva sacrificar autonomía frente a otros modelos de la misma familia, y hay usuarios que pueden que no se correspondan con este perfil.
Pruebas de autonomía en vivo

En nuestro test de pantalla encendida (navegación web, redes sociales y streaming de vídeo) para el S25 Edge alcanzó 10 horas y 15 minutos, lejos de las 12 h 38 min medidas por Tom’s Guide en condiciones similares tomsguide.com. Durante un día completo de uso mixto, mensajería, llamadas, correo y GPS, alcanzamos entre 30 % y el 20 % al final de la jornada, dependiendo del brillo y la tasa de refresco que se utilice.
En Reddit, los usuarios coinciden con nosotros en que la eficiencia puede mejorar con ajustes de software y futuras actualizaciones, aunque destacan que es mejor que el S24, tras instalarlas. Sin embargo, para un perfil que sea más jugón o de utilizar apps continuamente y que supera las 5 h de pantalla diaria, resulta necesario llevar un cargador portátil o poder hacer recargas a lo largo del día. De hecho, hay usuarios que están muy contentos y lo expresan de la siguiente manera:
“Vi muchos videos de análisis en YouTube y la duración de la batería es solo un 10 % menor que la del S25 Ultra. ¡Qué teléfono tan impresionante! Si el año que viene logran aumentar la capacidad de la batería, incluso a 5000, podría superar a esos teléfonos chinos de 7000 u 8000. La eficiencia de los teléfonos Samsung es de primera.”
El Galaxy S25 Edge ofrece una experiencia de uso satisfactoria para quienes valoran la portabilidad y el diseño, y no exigen autonomía extrema. Su batería de 3.900 mAh rinde genial en perfiles de uso moderado, y la carga de 25 W permite recargas cómodas durante el día. No obstante, si tu rutina supera las 5 h de pantalla activa o prefieres no depender de enchufes, conviene optar por el S25 Plus o Ultra. Eso sí, Samsung se las ha ingeniado para hacer de este terminal demasiado bueno para lo demasiado fino que es, la verdad es que sorprende gratamente. Si además tienes la suerte de pillarlo a buen precio, es una compra asegurada, siempre y cuando no te importe cargar un poco más que de costumbre.