Gestionar tu dinero no es lo más fácil de hacer. Ahora que muchos de nosotros nos enfrentamos a unos datos de inflación descarnados y a una subida de precios difícil de asumir, es probable que estés pensando en ayudarte de una de esas muchas apps que te ayudan a controlar cada euro que gastamos.
El seguimiento de los gastos y mantenerse al día con nuestra cuenta bancaria puede ser un poco difícil y es aquí donde entran en juego todas esas aplicaciones de finanzas personales como Fintonic o Mint. Pero hoy no vamos a hablar de su funcionamiento, de cuál es mejor o de cómo llevar todos nuestros datos bancarios al día. Hoy queremos resolver vuestras dudas sobre su fiabilidad.
Medidas de seguridad de las apps de finanzas
Teniendo cuenta que estas apps pueden conectarse con tu cuenta bancaria para ayudarte a mantenerte al día con sus gastos, averiguar a dónde va a parar tu dinero, en qué productos gastas más, y realizar un seguimiento de los próximos pagos de facturas, es normal que muchos pongan en duda si estos datos pueden verse comprometidos o no.
Como todo en esta vida, a pesar de sus beneficios, la banca móvil y las aplicaciones de finanzas no son inmunes a los riesgos. La seguridad de las aplicaciones de finanzas móviles es algo que siempre va a estar en entredicho, debido a la cantidad de información sensible que manejan.
Da igual que uses Mint, Fintonic u otra app. Casi todas ellas, en sus condiciones de uso, alegan que las contraseñas y datos solo se van a usar para ayudarte a acceder a tu cuenta y nada mas:
Su nombre de usuario de inicio de sesión y sus contraseñas se almacenan de forma segura en una base de datos separada utilizando cifrado de hardware y software de varias capas. Solo almacenamos la información necesaria para ahorrarle la molestia de actualizar, sincronizar o cargar información financiera manualmente
La mayoría de apps utilizan el tipo de cifrado que utilizan los principales bancos en sus aplicaciones, con la posibilidad de proteger el acceso mediante códigos PIN para sus usuarios, y alternativas como Touch ID y Face ID o los sensores de huella tradicionales. Básicamente, la información financiera personal que viaja desde nuestro banco a estas apps está encriptada y es ilegible para cualquier ciberdelincuente que pueda entrometerse en la transmisión. De hecho, Fintonic presume de cumplir con todas las exigencias de seguridad que exige la Directiva Europea PSD2 y que, además, la información está protegida con nivel de seguridad bancaria de 256 bits, que es el mismo nivel de protección que tienen los bancos más avanzados.
Un punto extra de estas aplicaciones es que, si decides cancelar la suscripción y dar de baja tu cuenta, porque has perdido el móvil o por el motivo que sea, toda tu información bancaria, conexiones y datos de acceso son borrados de sus sistemas de manera permanente.
Consejos de uso
Cuando usas una aplicación de este tipo las medidas de seguridad que debes adoptar son mayores para mantener a salvo tus datos bancarios. Con las opciones que ofrece las propias aplicaciones y siguiendo estos consejos podrás estar tranquilo:
- Descarga siempre la app oficial: No descargues nada de fuera de Google Play que pueda contener algún tipo de malware que se haga con los datos de acceso a tu app.
- Usa una contraseña segura: No uses la misma contraseña para todo y procura que la que emplees en estas apps contenga mayúsculas, minúsculas, números y símbolos.
- Usar la autenticación de dos factores: Siempre que sea posible y la app lo permita, además de acceder de forma tradicional con el nombre de usuario y contraseña, puedes identificarte con un código que se envía a tu teléfono móvil o correo electrónico.
- No uses redes públicas: Por lo general una Red WiFi pública red no está cifrada, lo que facilita a los piratas informáticos el acceso a tu información personal.