Amazon funciona bastante bien para las compras de determinados productos, en los servicios que proporciona y todas las ventajas que te ofrece tanto sin tener que pagar por ello como bajo una suscripción con un coste muy accesible. Sin embargo, puede que en ocasiones presente problemas con los pagos y si has llegado hasta aquí es porque probablemente te esté pasando y no sepas a qué es debido.
Razones por las que te pueden rechazar tu pago
Hay muchas razones por las que tu pago puede haber sido rechazado, así que intenta analizar si puede ser alguna de estas que te dejamos a continuación para poder actuar en consecuencia.
- Límite de crédito superado, si has hecho muchas compras y este no es suficientemente amplio para estos casos. Puedes contactar con tu banco para que aumente este límite, que lo haga temporalmente o hacer la compra al día siguiente. Si piensas que vas a hacer grandes compras ocasionales, como el Black Friday o Amazon Prime Day, prepárate para la ocasión.
- Has introducido mal algún dato, como tu número de tarjeta, fecha de vencimiento, dirección de facturación, teléfono o el código de confirmación CVV. Si cualquiera de estos datos está mal pueden cancelarte el pago, incluso si el nombre no corresponde con el titular en algunos casos.
- Tu tarjeta ya no es válida, ha sido bloqueada o ha caducado. Cualquier problema con la tarjeta podría dar este error. Incluso utilizar una que no es válida o aceptada por el Marketplace.
- Si tienes que confirmar el pago con la app de tu entidad bancaria o de alguna otra forma y no lo haces, o no de la forma adecuada, te rechazarán el pago por seguridad.
- Tu banco considera que la transacción es un gasto fuera de lo normal y la bloquea. Para solucionarlo tendrás que decirle a tu entidad bancaria que quieres aceptar esta transacción, e incluso los cargos de Amazon.
- Transacciones sospechosas, en alguna ocasión, ya sea porque las cantidades son extrañas, porque hay pagos demasiados frecuentes o similar, es posible que el banco también las rechace. Por lo que puede parecer extraño, pero pasa frecuentemente.
- Políticas especiales de tu banco en compras por Internet, algo en lo que puedes pensar si es la primera vez que compras online, pero si llevas mucho tiempo haciéndolo no es lo más probable.
- Problemas con la conexión a Internet. Si tu conexión es lenta o se interrumpe durante el proceso de compra, puede que el pago no se complete correctamente. Asegúrate de tener una buena conexión antes de realizar el pedido.
- Cambios en el precio o la disponibilidad del producto. A veces, los productos que añades al carrito pueden variar de precio o quedarse sin stock antes de que finalices la compra. En ese caso, Amazon te avisará y te dará la opción de modificar tu pedido o cancelarlo.
- Restricciones geográficas o de envío. Algunos productos pueden tener limitaciones para enviarse a determinados países o regiones. Si el producto que quieres comprar no se puede enviar a tu dirección, el pago será cancelado. Consulta las condiciones de envío del vendedor antes de comprar.
- Incumplimiento de las políticas de Amazon. Amazon tiene unas normas y condiciones que debes aceptar y cumplir cuando compras en su plataforma. Si incumples alguna de ellas, como por ejemplo, intentar comprar productos prohibidos o ilegales, el pago será rechazado y tu cuenta podría ser suspendida o cerrada.
Es menos probable que la causa sea debido a que no haya saldo suficiente en tu cuenta porque la transacción se hace antes incluso de comprobar este dato. Por tanto, aunque comprobar si tienes dinero para hacer la compra no está de más, lo mejor es que hagas las comprobaciones anteriores para ver si se puede dar alguna de estas situaciones.
Más allá del saldo y de los problemas con el pago, uno de los errores más comunes, sobre todo en los productos más demandados de Amazon, es el de que durante el proceso del pago, se haya quedado sin stock. Sí, una posibilidad que puede ser algo rebuscada, ya que tienen que darse ciertas cuestiones de manera simultánea, pero por supuesto que puede ocurrir. Por ello, es importante que lleves a cabo la comprobación del stock antes de comprar.
¿Qué hago si Amazon no ha cobrado mi pedido?
Lo primero que debes hacer en este caso es saber a qué es debido. Haz las pruebas pertinentes y, en caso de que no descubras a qué es debido, lo mejor es que llames a tu entidad bancaria porque probablemente es la que sepa por qué se ha rechazado esta transacción. El siguiente paso es intentar volver a comprar, pero con otro método de pago. También puedes utilizar una tarjeta con saldo Amazon, aunque para ello tendrás que adquirirla y no se va a corresponder con la cantidad exacta de la compra.
Para ello irás a tu cuenta (el icono con figura de persona que encontrarás en la parte inferior de la app), Mis pedidos, a Cambiar método de pago, seleccionar otro o indicar un nuevo número y Confirmar. Después das a Reintentar método de pago y pruebas. Puedes reintentarlo sin haber cambiado nada para ver si funciona con la misma tarjeta o forma de pago para darle una segunda oportunidad antes de intentarlo con otro, ya que este es tu método de pago principal y quieres que vaya bien.
También puedes ir a tu cuenta a Mis pagos y configurar las opciones de pago que tienes. De hecho, es aquí donde debes ir para cambiar los datos de facturación de tu tarjeta. Le das al método de pago que te interesa, seleccionas editar y allí te aparecerán datos como la dirección de facturación. Si presionas sobre la flecha que dirige a la derecha podrás seleccionar una de entre las que tienes o añadir una nueva.
Lo habitual es que ya funcione así, pero si no puedes cambiar el método de pago puedes contactar con soporte de Amazon y si lo has hecho, pero sigue sin ir tendrás que volver a contactar con tu entidad bancaria para que te confirmen lo que ha podido suceder. Ellos mejor que nadie saben la forma en la que poder solucionar el problema cuando hay algún tipo de problema y sobre todo, son los únicos que pueden tener un acceso pleno a tu banco.
¿No sabes cómo solucionar el problema?
Posiblemente, una vez que Amazon ha rechazado tu pago, no tienes forma alguna de llevar a cabo la realización del pago o no sabes cómo. No te agobies, no hay mayores problemas en esta cuestión, sino que más bien, lo que deberemos hacer en estos casos es contactar con la propia Amazon a fin de que puedan darte soporte y cobrar tu pedido de manera correcta. Si tú no haces nada ni te pones en contacto con nadie, Amazon va a volver a intentar cobrarte por segunda vez tu pedido, a la misma cuenta con la que lo has intentado por primera vez, por lo que si tienes ahora dinero en la cuenta, sí que vas a poder cobrar tu pedido.
Puede darse el caso en el que actualmente no solo cuentes con tu propia cuenta bancaria en Amazon, sino que también tengas la oportunidad de poder solucionar el problema a partir de una de las cuentas que tengas también asociadas, ya sea a través de una tarjeta bancaria u otro método de pago. Si así lo tienes configurado, una vez haya fallado el pago en la primera opción o la seleccionada, pasará a la siguiente hasta que se consiga cobrar.
Una posible solución que tienes a tu alcance con tu banco es la de utilizar una tarjeta virtual. Estas tarjetas están pensadas para que puedas hacer pagos por internet, por lo que en este caso no debería de impedir hacer el pago de la compra. Cuando Amazon llegue hasta esta opción de pagos, si no la eliges en primer lugar, procederá al cobro de tu pedido. Normalmente, una vez activada tu tarjeta virtual, lo único que tendrás que hacer es pasar de tu cuenta principal el saldo que necesitas, para asegurarte intenta pasar algo más por si te equivocas en unos céntimos y te rechaza la transacción. En caso de que no conozcas su funcionamiento, te recomendamos que contactes con tu banco para que te explique como realizar el proceso.
De todas las opciones de comunicación que podemos llevar a cabo con Amazon, quizás la más interesante de todas y la más cómoda de todas con las que nos podemos hacer es mediante chat. Es la más directa y con la que te darán la mayor cantidad de facilidades, por lo que para nosotros es la mejor de todas. De todas formas, te aconsejamos que, siempre que puedas, lleves a cabo la utilización del correo electrónico para que te vayan mandando todas las conversaciones a través de esa vía, para que puedas tener siempre a mano toda la información.