La nueva CEO de Hewlett-Packard, Meg Withman ha dejado claro su intención de dar un mayor impulso a WebOS, el sistema operativo por el que invirtieron fuertemente tras la quiebra de Palm Inc. Tras varios intentos de reflote, quizá sea éste el momento de su desembarco definitivo.
En enero de 2009 se presentaba en Las Vegas un atractivo proyecto, WebOS, un nuevo sistema operativo desarrollado por Palm Inc y basado en Linux, y que causó grandes sensaciones a los allí presentes y a quienes comenzaron a probarlo con el Palm Pre a partir de su lanzamiento, en junio de ese mismo año.
Sin embargo, el Palm Pre, y por extensión WebOS, se toparon con un mercado no saturado pero sí imbuido por la época dorada de iPhone. Ello impidió el gran despegue que se presumía, y condenó tanto a la empresa como a su sistema operativo al ostracismo. Pero WebOS pareció volver a ver la luz tras el anuncio de adquisición por parte de la todopoderosa HP.
Una nueva decepción
La nueva esperanza duró poco tiempo; y ello por una mala gestión por parte del gigante norteamericano, quien no ha sabido aprovechar el potencial del sistema operativo sumado a una serie de errores en la estrategia de marketing. Y el golpe definitivo parecía inmediato cuando los cimientos de HP comenzaron a temblar a partir de la reestructuración radical que el CEO de la compañía, Leo Apotheker, quiso introducir en la estrategia de HP, abandonando en gran medida el mercado de pequeños usuarios y centrándose en el sector de las grandes empresas, lo que presuponía un definitivo abandono de WebOS.
¿La oportunidad definitiva?
Pero los nuevos aires que están entrando en la compañía de Palo Alto, tras la más que presumible destitución de Apotheker (presentado como una renunciar personal) y su sustitución por Meg Withman como nueva directora general, podría suponer un intento de reflotamiento de lo que se puede convertir ya en una nueva eterna promesa.
Y es que la nueva CEO parece decidida a volcarse con un sistema operativo que, a pesar de su tortuoso camino, sigue resultando atractivo al público, gracias a las buenas sensaciones que ha ido dejando cuando se ha podido probar. Una postura decidida que se pudo apreciar durante sus primeras declaraciones tras la toma de poder: “continuamos explorando las opciones para maximizar el valor del software WebOS”, subrayó Withman, aunque dejó claro que, por ahora, no tenía nada que comentar al respecto.
Quizá sería momento de que el sistema operativo de HP, al tiempo que continuase sirviendo a los dispositivos desarrollados por la compañía, se abriera a terminales y tabletas de otras compañías, para hacerse un hueco cada vez mayor y poder demostrar así lo que siempre se ha esperado de él.