El chip NFC es uno de los grandes olvidados en la telefonía móvil; gracias a él podemos llevar a cabo grandes acciones con las que por encima de muchas cuestiones, estaremos ahorrando mucho tiempo, por lo que una de las cosas más importantes será saber controlar muy bien este chip. Y es que más allá de los pagos móviles, muy pocos usuarios son conscientes de lo que realmente puede llegar a suponer este chip en el desempeño diario, por lo que te contamos todos los trucos.
Por supuesto, si algo necesitamos al primer momento de usar el chip NFC, es la necesidad de conectar y hacer que este chip funcione a la perfección para que posteriormente, podamos darle todos los usos que estamos a punto de descubrirte. Pero antes… hay que comprobar que esté todo activado.
Configurar el NFC en Android
Quizás la parte más importante, más allá de saber qué trucos son los mejores para ser usados, es la de saber qué pasos tenemos que seguir para asegurarnos de que nuestro chip NFC se encuentra correctamente conectado. Para poder llevar a cabo esto, tenemos que ponernos manos a la obra e ir hasta los ajustes de nuestro teléfono móvil y allí seguir estos pasos:
- Entrar a ‘Dispositivos conectados’ para ver qué es lo que se encuentra en nuestro teléfono conectado y una vez allí entrar en ‘Preferencias de conexión’.
- Pulsamos sobre el menú de ‘NFC’.
- Revisaremos si se encuentra activado o no. En el caso de que no lo este, obviamente, tienes que activarlo.
Otra de las opciones que nos vamos a encontrar en Android es la de la posibilidad de elegir la app a la que queremos conectar este chip NFC a la hora de realizar los pagos. De esta manera, lo único que tenemos que hacer es seguir los pasos anteriores y una vez lleguemos al menú de NFC, seleccionar ‘Pagos contactless’ donde se nos dará la posibilidad de ir cambiando la app que usaremos a la hora de realizar los pagos por defecto, por si preferimos otra.
Opciones del NFC en iPhone
Al contrario que ocurre en Android, iOS apenas pone ante nosotros alguna posibilidad para que comprobemos si esté chip está activado, está funcionando o si tiene algún problema. Por tanto, lo único que podremos hacer en cuanto a la configuración de este chip NFC con nuestro iPhone será la posibilidad de realizar pagos, donde sí tendremos control.
Esto se debe a que Apple es la que se encarga de que esta funcionalidad se active y desactive constantemente hasta el punto de que cada app pueda usarla y no a su antojo según lo vaya pidiendo. ¿Lo único que necesitas para que se active? Un iPhone 6 o cualquier modelo posterior, el resto dependerá de la app.
Todo lo que puedes compartir por NFC
Si hay algo que va a permitirnos el NFC, es la posibilidad de compartir con la gente que tengamos a nuestro alrededor numerosas cuestiones por lo que tendremos que valernos de esta tecnología para poder pasar archivos e incluso la clave de nuestro WiFi, dos opciones que serán de gran ayuda en muchos momentos.
Archivos
Si hay algo que necesitamos con asiduidad será la de enviar archivos, algo que realmente hacemos mucho en nuestro día a día pero que a través del NFC, no está tan extendido y en Android precisamente podemos llevar a cabo este proceso de una forma muy sencilla.
Para ello simplemente tendremos que seguir los siguientes pasos con el objetivo de intercambiar archivos mucho más rápido con personas que estén cerca:
- Con el NFC activado y la posibilidad de compartir activada, tenemos que abrir el archivo que queramos ir a compartir
- Pegaremos nuestro teléfono con el que queremos ir a compartir por la parte trasera.
- Notaremos una vibración y un pequeño sonido que nos dirá que este archivo ya está listo para ser transferido.
Por supuesto, esto irá a depender de tu teléfono móvil y de su modelo, pues hay muchos que no terminan de aceptar esta tecnología. Además, en el caso de que sean compatibles, también podremos hacer lo propio con ordenadores, cámaras y otros dispositivos para pasar archivos por NFC.
Por parte de iOS ya conocemos las limitaciones que nos vamos a encontrar en cuanto al NFC, por lo que en este sentido, entre los diferentes dispositivos de Apple podremos hacer uso de la herramienta de AirDrop, que a pesar de no valerse del NFC para intercambiar archivos, hace una función similar.
La clave del WiFi
No os vamos a engañar, a decir verdad es muy molesto estar deletreando la contraseña, sobre todo cuando es muy larga y tiene muchas mayúsculas y minúsculas. En este caso, el NFC puede ayudarnos a compartir la contraseña y evitar que el proceso de compartir nuestro WiFi a los invitados sea un incordio.
En los iPhone por su parte, si tenemos una persona cercana a nosotros y están intentando conectarse a una red WiFi a la que nosotros estamos conectados o la tenemos dentro de nuestras redes, se hará de manera automática. Simplemente, la otra persona tendrá que pulsar sobre la red WiFi a la que desea conectarse como si fuese a poner la contraseña y nos saltará en nuestro móvil un mensaje advirtiendo sobre si queremos compartir la contraseña.
Para llevar a cabo esta acción en Android; sin embargo, tendremos que hacer uso de otras tecnologías como es el caso del Nearby Share o incluso hacer uso de una tarjeta NFC junto al móvil o al router.
Otros trucos del NFC
Si hay algo que tiene el NFC es versatilidad y posibilidades para nuestro teléfono móvil, por lo que hay otros usos y trucos rocambolescos que pueden ser llevadas más allá del propio teléfono móvil, pudiendo interactuar con numerosos elementos de nuestro alrededor.
Abre tu coche con el móvil
Aquí ciertamente no te hará falta solo el teléfono móvil, pues no todos los coches son compatibles que esto que os introducimos, pues aunque pueda parecer extraño, puedes abrir la puerta de tu coche con el teléfono móvil. Es algo que por supuesto de momento no está demasiado avanzado y precisamente Apple es una de las marcas que más está avanzando en este sentido y ya trabaja con diversos fabricantes para llevarlo mucho más allá. Desde Android 12 también puede hacerse en algunos modelos de los BMW así como en marchas como Audi, Hyundai o Mercedes Benz, porque lo ideal es que te informes en tu concesionario sobre si dispones de esta funcionalidad y la actives si es que quieres.
Y por supuesto, es totalmente fiable, igual de fiable que la llave de tu coche, no hay riesgo ninguno más que los habituales, por lo que puedes estar totalmente tranquilo.
Sacar dinero del cajero por NFC
Todos sabemos las comodidades que nos aporta el teléfono y estas pueden ser más aprovechando los trucos del NFC en el móvil. Cuando vayas al cajero de tu banco para operar con tu cuenta, en vez de llevar la tarjeta de crédito o de débito para identificarte en el mismo, bastaré simplemente con tu móvil y su chip NFC.
Para ello lo único que tienes que hacer activar la plataforma de pago de tu teléfono móvil, ya sea mediante Google Pay, Apple Pay o cualquier otra forma, teniendo que seleccionar la tarjeta del banco al que quieres acceder como si fueras a pagar. Acto seguido, simplemente tienes que acercar el móvil al sistema contacless del cajero en el caso de que este lo tenga -pues si es muy antiguo, no lo tendrá-. Se abrirá entonces ante ti el usuario y todas las posibilidades que normalmente puedes llevar a cabo en tu cajero habitual.
Configurar otros dispositivos
Muy pocos lo saben pero existe una manera de acceder a la configuración de un dispositivo inalámbrico haciendo uso del NFC del teléfono.
Por ejemplo, si tienes un dispositivo Bluetooth, como un altavoz, puedes configurarlo rápidamente con tu móvil usando NFC. Solo tienes que acercar tu móvil al dispositivo Bluetooth y la conexión se establecerá automáticamente.
Acceder a lugares de forma segura
Muchos edificios y oficinas utilizan tarjetas de acceso para controlar el acceso a ciertas áreas. Si tu tarjeta de acceso tiene NFC, puedes programar tu móvil para que funcione como una tarjeta de acceso. Esto te permite acceder a ciertas áreas sin necesidad de llevar tu tarjeta de acceso contigo igual que henos usado el smartphone para sacar dinero sin necesidad de llevar la tarjeta de crédito encima.
Automatizar tareas
Aunque es algo que ya apenas se usa, siempre tienes la posibilidad de comprar etiquetas NFC programables y programarlas para que realicen tareas específicas cuando las acerques a tu móvil. Por ejemplo, puedes programar una etiqueta NFC para que encienda el modo silencioso de tu móvil cuando la acerques a él antes de acostarte sin que tú tengas que hacer nada más, dejándola encima de la mesilla de noche.
Abrir la puerta de casa o del garaje
Si quieres, también puedes usar el NFC del móvil como tus llaves de casa, pero con algunas condiciones. Para poder hacerlo, se necesita un móvil con NFC, evidentemente, pero también un lector NFC compatible con la cerradura o el motor del garaje. Además, se debe configurar previamente el dispositivo NFC con el código de acceso o la clave de seguridad correspondiente.
Por suerte, en el mercado varios modelos de cerraduras y motores de garaje que incorporan la tecnología NFC y que se pueden controlar desde el smartphone. También hay dispositivos que se pueden instalar en las cerraduras o motores existentes para añadirles esta funcionalidad. Así, solo basta con acercar el smartphone o la tarjeta al lector para abrir la puerta y, además, se puede gestionar el acceso de otras personas, como familiares, amigos o empleados, asignándoles permisos temporales o permanentes según se te antoje.