¿Peligra la ayuda del Gobierno de 200 euros para padres con hijos?

La propuesta de una ayuda de 200 euros mensuales por hijo hasta los 18 años, la conocida Prestación Universal por Crianza sin restricciones de renta, ha sido un tema recurrente en el debate político español, anunciada en diferentes ocasiones pero nunca formalizada. Y mucho nos tememos que esto va a ser así durante mucho tiempo.
Esta prestación, que se uniría a otras ayudas para las familias que ofrece el Gobierno de España, ha sido impulsada desde la parte del gobierno ocupada por Sumar, con la Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, como una de sus principales valedoras. El 14 de mayo de 2024 durante una entrevista en RNE, afirmó que era ‘la principal medida para reducir la desigualdad en España’. Posteriormente, el Sumar registró una Proposición no de Ley en este sentido el 27 de febrero de 2025 en la Comisión de Derechos Sociales del Congreso.
El anuncio de esa ayuda de 200 euros generó una gran expectación entre la ciudadanía, que vio en esta medida un verdadero apoyo para llegar a final de mes entre pagos de colegios, libros, ropa, comida y las muchas necesidades que hoy en día tiene cualquier menor. Sin embargo, a pesar de las reiteradas menciones y la intención expresada por parte del Gobierno, esta ayuda nunca ha llegado a materializarse.

Su implementación está supeditada a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, pero la dificultad para lograr acuerdos en el Parlamento ha impedido que unos nuevos PGE salgan adelante. De hecho, la situación es tan caótica que los presupuestos de 2023 aún siguen prorrogados y, por consiguiente, mucho nos tememos que habrá que esperar mucho para ver como la Prestación Universal por Crianza pasa de ser una promesa a una realidad.
Llegó la tormenta política
Lo que pasa es que la situación política actual ha alejado aún más la posibilidad de aprobar unos presupuestos que incluyan la mencionada ayuda. El Gobierno de coalición, liderado por el PSOE, se encuentra inmerso en una profunda crisis de confianza y estabilidad por los diferentes casos de corrupción que salpican a figuras vinculadas al PSOE.
Las investigaciones sobre presuntas «mordidas» y tramas de tráfico de influencias, como el denominado «Caso Koldo» (que afecta a ex altos cargos del Ministerio de Transporte y al antiguo número 2 del partido, Santos Cerdán), han minado la credibilidad del Ejecutivo y han puesto el foco, además ,sobre sus socios parlamentarios.
Precisamente, la detención y el encarcelamiento de Santos Cerdán, ex secretario de Organización del PSOE, en relación con estos casos de corrupción, ha sido un golpe demoledor. Cerdán, una figura clave en las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez y en la construcción de la mayoría parlamentaria, ha pasado a ser un símbolo de la crisis que atraviesa el partido.Y es aquí donde se aleja esa ayuda de 200 euros para familias, ya que los apoyos parlamentarios que son tan necesario para probar los PGE, ahora mismo piensan en disolver cualquier tipo de acuerdo.

Partidos como Sumar, ERC, Junts o EH Bildu, que han sido cruciales para la investidura y la gobernabilidad, se encuentran ahora en una encrucijada e incluso formaciones como el PNV estudian dejar de apoyar a Pedro Sánchez. Otros pueden aprovechar la debilidad del PSOE para exigir mayores concesiones o para replantear sus condiciones de apoyo, dejando esta Prestación Universal por Crianza muy en tercer, cuarto hasta quinto plano. Ahora mismo cada partido mira por sus propios intereses.
De esta forma, una hipotética aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, donde se encuentra esta ayuda de 200 euros para las familias, se antoja más complicada que nunca, si no imposible. Sin el respaldo firme de sus socios, el PSOE carece de la mayoría necesaria para sacar adelante las cuentas públicas y, una vez más, una prórroga presupuestaria se perfila como el escenario más probable, lo que significa que no habrá una partida específica para la anunciada ayuda a la crianza de 200 euros por hijo, y esta permanecerá en el limbo de las promesas incumplidas.