No cabe duda de que este es el wearable de franja económica más popular del mundo. Y es que se trata de una pulsera que ha definido por completo el concepto de wearable accesible y muy completo. Cada año hay más expectación alrededor de su presentación como ocurrió con la Xiaomi Mi Band 6, pero cada año que pasa son más caras.
Algo que puede tener sentido, ya que cada año se añade una nueva característica, pero también a la vez se aleja de la esencia de la pulsera, que ya no es tan económica como lo fue en sus primeros modelos, ni mucho menos. Además, los móviles Xiaomi ya cuentan los pasos, lo que hace perder ventajas a la Mi Band.
Cada año, un poco más cara
La evolución de las diferentes Xiaomi Mi Band en cuanto a precio ha ido creciendo con el paso de los años. Los primeros dos modelos no se vendieron en España, y teníamos que comprarlos en tiendas de importación con precios que oscilaban entre los 15 y 25 euros mayoritariamente, un precio muy asequible que labró la buena reputación de esta pulsera respecto de su coste. Pero el resto de modelos ha ido aumentando poco a poco su precio.
La Mi Band 3 costaba en España 29,90 euros, que ya era un importante salto de precio respecto de lo que conocíamos, la Mi Band 4 saltó a los 34,99 euros, la Mi Band 5 fue la única que retuvo el mismo precio, y finalmente la Mi Band 6 ha dado el gran salto hasta los 44,99 euros de partida. Por tanto en cuatro generaciones prácticamente ha doblado su precio, lo que puede ser mucho para quienes usan Android y también elevado para quienes usan la Mi Band en iOS.
¿Está justificado este aumento de precio?
Esta es la pregunta que muchos nos hacemos a estas alturas, y es que no deja de ser llamativo este aumento de precio, cuando características clave que todos esperamos desde hace años no han llegado aún a ella, como son la conectividad NFC para poder hacer pagos en tiendas y el GPS para no depender del teléfono. Esas características habrían justificado este precio, incluso uno sensiblemente más alto, pero no con lo que nos ofrece hoy la pulsera. La Xiaomi Mi Band 6 ha dado un gran salto de calidad con el tamaño de la pantalla AMOLED a color, pero no justifica este elevado precio respecto de anteriores generaciones, en cuanto a funcionalidades, aunque se han añadido muchos modos, no difiere tanto de los primeros modelos con pantalla a color.
Y si lo comparamos con otro de los segmentos de moda, el de los smartwatch inteligentes, hay alternativas muy bien equipadas y con GPS a este mismo precio, sobre todo de Amazfit. Por tanto, es evidente que este salto en el precio a lo largo de los años no está justificado, porque no han entrado en juego características trascendentes y revolucionarias como para ello, si hace años nos dicen que por el doble de precio vamos a tener NFC y GPS nos haríamos con ella sin titubear, pero es que salvo en su pantalla y ciertos modos de software, ha cambiado muy poco. La realidad es que la pulsera sigue siendo un éxito a pesar de ello, y de que cada vez hay más y mejores alternativas a ella. Pero el cliente es sabio, y si sigue apostando por ella en masa, será por algo. Vosotros qué pensáis, ¿está justificado este aumento en su precio?