Te estarás preguntando si merece la pena comprar el iPhone 13 mini, sobre todo cuando ya su precio ha caído considerablemente. Pero desafortunadamente tengo que decirte que en mi caso personal me he arrepentido totalmente. A continuación te desvelo por qué.
Cuando decidí comprarlo supuse que su batería era menor que la de otros móviles del mercado, aunque también que su consumo sería menor, pero quería volver a tener un dispositivo que fuera más pequeño y no pesara tanto.
El iPhone 13 mini es mi mayor decepción

Pero desgraciadamente tuve que hacer un viaje y ahí comenzó mi decepción. El viaje era en tren de larga distancia, y al menos esperaba que aguantara todo el trayecto, pero no conté con que al reproducir vídeos de YouTube y contestar mensajes de WhatsApp la batería se agotara hasta el 50% en a penas dos horas y medias. Hice un transbordo, y seguía confiando en que la batería al menos llegara hasta destino, donde podría cargar el dispositivo. Pero desgraciadamente para mí, antes de llegar se agotó definitivamente y no eran ni las nueve de la noche, incluso aunque lo dejara en el bolsillo por precaución sin utilizarlo antes de que se consumiera totalmente la batería.
Es cierto que también lo utilicé para jugar un rato con Call of Duty Mobile, con la calidad a tope. La experiencia de juego fue buena, se calentó un poco, pero lo vi normal. La única pega es que con los pulgares apenas podía ver una buena parte de la pantalla.
Mi conclusión final fue que la mayoría de los días tendría que cargar al menos dos veces. Así que decidí venderlo y buscar otra alternativa.
Alternativa para el iPhone 13 mini

El iPhone 13 mini me costó en torno a los 600 euros, pero tuve que venderlo más barato, decidí buscar una alternativa que supliera el problema de batería, pantalla pequeña, me permitiera jugar, ver vídeos y que me durara todo el día. Así que mi cambio fue radical y aposté por el Xiaomi Redmi Note 13 Pro plus, lo localicé en este enlace de Amazon.
Este teléfono lo encontré por 500 euros en el momento de la compra, y me fijé en su excelente pantalla curva de 6.67 pulgadas AMOLED de 1.5 K, con 120 Hz de tasa de refresco. Por lo que no solamente tiene una gran fluidez, sino que además su tacto me pareció excelente, ya que normalmente le doy bastante importancia, sobre todo al principio.
Pero, esto no era lo más importante, su procesador MediaTek Dimensity 7200 Ultra me convenció por completo para poder jugar a todos los juegos, pero esta vez con una gran pantalla. Y claro, no podía ser menos en cuanto al motivo de mi decepción con el mini, la batería es de 5.000 mAh y tiene carga rápida de 120 W con HyperCharge.
Tras probarlo varias semanas, quedé encantado. Así que mi recomendación en cuanto a calidad-precio, si eres de los que piensas que el iPhone 13 mini es una buena opción, es que lo pienses mejor y le des una oportunidad al increíble Xiaomi Redmi 13 Pro plus.
